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- ¡Los quiero listo en 5! - grito Hannah fuera de mi puerta pero no creo que solo fuera la orden hacia a mí. Odio que Hannah grite por lo que me tape con la sabana hasta la cabeza para volver a conciliar el sueño pero a los pocos segundos regresaron los gritos.

¿Pero es que no se cansa de gritar?

Escuche los gritos o mejor dicho quejidos de mis hermanos deseando la muerte de Hannah y como a los segundos se escuchó los llantos de los dos.

-¡Ness no me hagas hacerte lo mismo!-grito Hannah afuera de mi puerta.

Solté un suspiro de frustración, pero me destape para después pararme y caminar hacia al baño. Sabia que si no me paraba en algún momento Hannah regresaría pero acompañada de alguna arma dolorosa.

Al llegar al baño, hice mis necesidades y me cepille los dientes. Ya afuera, fui al armario y saque un pantalón de mezclilla, una camisa corta color negra con blanco en las mangas, sin ningún tipo de letras o dibujo, siendo así completamente lisa. Camine hacia el espejo de la esquina para ver el atuendo. Me mire unos cuantos segundos y levante un poco la blusa para así poder apreciar el tatuaje que tenía.

Observe el tatuaje y pase mi dedo índice por él. Recuerdo lo que significó el tatuaje en aquel tiempo, recuerdo que estaba harta de la rutina y quería un cambio, quería ser otra chica a la que alguna vez fui.

Ninguna persona ha visto alguna vez el tatuaje, ni siquiera Hannah o mis hermanos, esto es algo mío y solo mío, algo que quisiera que se mantuviera en secreto por siempre.

-¡Ness baja ya!-toco la puerta Nick.

-¡Ahora bajo!-grite de regreso para escuchar sus pasos alejarse de mi puerta. Baje la blusa y la acomode para que no se viera y me senté para atarme los converse blancos.

- ¿Ness porque siempre te tardas?- pregunto Chase al segundo que me coloque a su lado.

- ¡Pues porque soy mujer! - dije golpeándolo en la nuca.

- ¡Hey, no hay que ser tan agresiva!- dijo sobándose.

- ¡Ya Nick, deja de ser tan nena! - espeto Hannah saliendo de la cocina en busca de algo.

-¿Por qué tenemos que ir?-escuche preguntar a Chase una vez que Hannah volvía a buscar debajo del sofá las llaves de su carro.

-¡Ya Chase deja de quejarte!, aun te queda un año de escuela y tienes que comprar lo necesario-hablo.

Mis hermanos y yo nos quedamos quietos y en silencio observando como Hannah movía toda la sala en busca de sus llaves.

-¡Al fin!-grito alzando las llaves en el aire.

- ¡Hey por cierto!, ¿A dónde vamos? - pregunto Nick. (¿Apoco hoy es el día de las preguntas?)

-Hacer las compras para la escuela -dijo Hannah obvia.

-¡Así que muevan sus cuerpos al carro!-ordeno malhumorada por lo cual todos salimos, porque cuando Hannah esta histérica, no hay un dios que te pueda salvar de ella y su humor.

Abrió la puerta de entrada y todos salimos primero para que después Hannah la cerrara.

Caminamos hacia su carro, pero al parecer todos estábamos en su mundo porque lo único que se podía escuchar era la música de la radio y el silencio.

Minutos pasaron y por fin aparcamos enfrente de "Adosa", la casa de los útiles escolares. Todos bajamos calmados del carro y nos quedamos a lado de el a esperar las ordenes de la capitana de compras.

-¡Bien chicos!, esto es lo que necesitan-dijo Hannah entregándole una hoja por separado a Chase y Nick.

-Tiene que comprar todo lo de la lista, cada uno lleva diferentes cosas-ordeno mientras me pedía que buscara carros. Camine hacia los carros de compra y traje dos.

Ella la... ¿chica mala?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora