Parte XXXIX: ¿Quién es el padre?

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El corazón de Frank latió fuerte, sus impulso de adrenalina seguían en su cuerpo, así que tuvo que contenerse para no levantarse.

La rubia sonrió saludando a Chris y regresó a ver a los nuevos internos. Su corazón se detuvo en seco al ver al castaño frente a ella

Frank abrió su boca sin poder formular una sola palabra ¿El hijo era de él?

Victoria cogió con mayor fuerza el micrófono y aparto su vista de él encontrándose en los ojos de Chris quien sabía todo estallaría cuando su amiga llegara al escenario desde el momento que distinguió a Frank entre los internos

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Victoria cogió con mayor fuerza el micrófono y aparto su vista de él encontrándose en los ojos de Chris quien sabía todo estallaría cuando su amiga llegara al escenario desde el momento que distinguió a Frank entre los internos. 

Chris apoyó su mano en su espalda baja y sonrió dándole fuerzas.

La rubia acomodó su cabello detrás de tu oreja y comenzó con su charla intentando mantener la compostura. Sus ojos aunque querían ver a Frank, prefería no hacerlo. Prefería ver a cualquier otro lugar antes de aceptar su presencia.

El morocho no procesaba ninguna palabra. Solo veía su barriga asomándose en su traje negro. Él intentaba sacar cálculos mentales. Hace cuatro meses que no la veía, y hace cuatro meses fue su último encuentro. Su barriga era pequeña, de hecho era bastante insignificante y si no era porque él conocía muy bien su cuerpo sólo podría interpretarse como que hubiera subido unos cuantos kilos. No debía de pasar del cuatro meses.

No de nuevo.

No era como que Frank no siguiera muriéndose por ella. No era como que no le encantaría pasar toda su vida con ella criando a su hijo. De verdad, no era como que no quisiera eso. Pero es que si fuera su hijo. Ella ya se lo hubiera dicho ¿no?

La rubia terminó con su charla y se despidió dejando a Chris que continúe. Frank se moría por levantarse en ese momento y salir detrás de ella pero sabía debía demostrar la supuesta madurez que había obtenido estos meses, estaba en ahí para seguir con lo que se habia propuesto. No podía solo abandonar la charla e ir tras de ella, ya no era un muchacho.  

Media hora después el neoyorquino salió como alma que llevaba el diablo y caminó por los pasillos del edificio buscándola. La ansiedad comenzaba a comerlo lentamente de nuevo.

—No está aquí.—una voz lo hizo voltear encontrándose con Chris.—posiblemente ya se fue ¿Estarás de interno?—el morocho le pregunto curioso. 

Frank se acercó a él y asintió.

—Quiero estar en las divisiones de apoyo a testigos.—él le dijo acercándose al menor. Chris abrió ampliamente sus ojos sorprendido. No lo había conocido mucho pero de lo que había visto y lo que veía ahora se notaba cierta madurez. 

—¿Cómo arreglaste...ya sabes tus problemas?—Chris le pregunto sin poder evitar recordar la ultima vez que se vieron. Frank sonrió de lado asintiendo.

—Estuve en rehabilitación. Llevo casi cuatro meses sobrio y pues, intentando mejorar.—él se encogió de hombros.—Chris...¿Quién es el padre?—Frank tuvo que preguntar, ya no aguantaba más.

The Chaos (Spin off de The Moral of the Story)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora