The Chaos (Spin off de The Moral of the Story)

Capítulo I: Bajo el Nuevo Portland

03 de noviembre, 2021

Victoria estaba en su oficina terminando su papeleo, ya no veía la hora de huir de ahí. Hoy era uno de esos días en los que no soportaba estar en la oficina. Quizá porque estaba sola, sin Genevieve haciéndole compañía o bromeando con ella, ni mucho menos para poder distraer la mirada con el esposo de la pelinegra. Desde que ambos habían pedido una transferencia de estado para poder criar a su hija con mayor tranquilidad las horas en el trabajo se habían vuelto más rutinarias y pesadas.

Con la partida de la dupla Bell-Sallow, su jefe decidió retirar a la rubia de informática y ponerla junto al agente Mackie a cargo de los casos más pesados. No era ningún reto para Victoria ya que ella era como navaja suiza, se sabía todos los trucos y podía desenvolverse a la perfección en cualquier área. Sin embargo, Portland se encontraba en las tinieblas, bien decían que pueblo chico infierno grande y es que la italiana no se creía la cantidad de casos de desapariciones que había esa semana.

—Es la del alcalde. —Anthony le dijo sentándose frente a ella extendiéndole una carpeta. La rubia la miro extrañada. —Una de las desaparecidas es la hija del alcalde.

Ella sabía que la noche de Halloween sería un día decisivo, por eso las últimas noches ella y Anthony estuvieron patrullando por las fiestas más grandes que habían, y aunque en definitiva vieron a muchas niñas ebrias, no encontraron nada fuera de lo normal. Sin embargo, al llegar por la mañana ya tenía en su mesa diez nombres nuevos de desaparición, no se explicaba en qué momento o como sucedió.

Victoria paso sus dedos acariciando sus sienes. No quería ser egoísta, pero debía dormir, ya su corazón no podía seguir viendo casos de niñas desaparecidas y violaciones.

—Estabas ahí, viéndola. Arthur. No me lo niegues ¿Qué mierda te pasa? Es una niña, es casi tu hija. —Victoria escucho la voz de su madre por el pasillo, la pequeña rubia se asomó desde su habitación sosteniendo la toalla que la cubría.

—Vic ¿tienes alguna teoría? Tu siempre tienes teorías. — Anthony llamo su atención haciendo que deje de divagar y lo regresara a ver.

—Si te soy sincera, no. Es claro para mí que es una banda, estos ya son patrones que vienen siguiendo desde hace cuatro meses. No es casualidad. Pero lo que no comprendo es ¿para qué? No hay mucha coherencia, algunas desaparecen, otras son asesinadas. Te diría que trata de blancas, y en efecto, pero ¿para qué? no se supone que si secuestras tantas personas es para venderlas. Y no hay reportes de ninguna salida. —Victoria se echó hacia atrás en su asiento. Cuando comenzó a recibir los casos pensó que se trataba de una persona, pero mientras avanzaron las semanas era evidente que había algo más grande, por eso tenía vigiladas todas las salidas del pueblo.

—¿Tus cámaras son seguras? —el moreno le cuestiono viéndola por sobre su computadora, la rubia arqueo la ceja ofendida.

—Por supuesto que sí, están ubicadas en lo que otros creen son los puntos ciegos de las fronteras. Si alguien lo supiera es porque hay un soplón aquí. —Victoria se acercó a él y miro a su alrededor. La oficina ya estaba casi vacía, solo un par de oficiales al otro lado apagando sus computadoras, alistándose para irse.

—¿Y lo crees? —Anthony le cuestiono. El ambiente de la oficina había cambiado mucho, existían nuevos agentes como Morgan Bruhl y David Brown, habían transferido a dos más de Boston y quienes solían encargarse de ciertas áreas habían sido modificados. Como la propia Victoria, que, si bien ahora comandaba el área más importante, el Agente Bettany era quien ahora supervisaba informática y por quien debía de pasar todos los filtros.