❛𝐒𝐇𝐀𝐃𝐎𝐖𝐒❜ ᵃ ʳᵉᵐᵘˢ ˡᵘᵖⁱⁿ ᶠᵃⁿᶠⁱᶜ

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capítulo cinco: suposiciones.

Sábado 14 de octubre.

El Slug Club o Club de las Eminiencias eran reuniones que organizaba el profesor de pociones Slughorn en su despacho, allí iban los alumnos sobresalientes o aquellos que podrían servirle al profesor en el futuro; sangres puras, hijos de ministros o nobles encabezaban la lista. Mareena había ido el primer año junto a Sirius y Regulus pero no había pasado de una fiesta porque con sus notas bajas él dejó de invitarla a pesar de ser una Black.

Ahora ella veía a Olivia cepillar su cabello albino y pedirle que se lo trenzara para una de esas reuniones. La pelinegra tenía mucha experiencia con trenzas porque sus primas mayores la habían obligado a aprender a hacerlas para su propia conveniencia, lo que antes era algo agobiante que causaba llantos de frustración, ahora era algo útil para sus amigas.

—Te acompañé, tal vez vea a Robertson en el camino. —dijo Astrid poniéndose su campera— ¿Vienes Mare?

Ella estaba despierta y llena de energía, como siempre a esas horas de la noche. Su cerebro parecía hacer un 'click' cuando el sol se ponía y despertaba con toda la energía que debía haber tenido durante el día.

—Por supuesto.

Caminó junto a sus dos amigas escaleras abajo de la torre de Ravenclaw para luego seguir bajando hasta las mazmorras en el salón de pociones. Olivia tenía un sencillo vestido color dorado que quedaba bien con el color de su piel y unos zapatos de plataforma baja. Astrid no paraba de hablar de lo romántico que eran las fiestas como las de Slubhorn, aunque nunca haya ido sabía que eran más formales y totalmente diferentes a las que hacían en las salas comúnes con música alta y rock saliendo de los tocadiscos.

—¡Allí está! se ve tan bien... —su amiga admiraba al chico que le gustaba como si fuera el único en el planeta, a Mareena no le parecía alguien atractivo pero cada cuál...— Iré a hablar con él, ¡Hey Tom!

Luego desapareció. Olivia la vio irse y Mareena rió, eso no le llamó la atención a la rubia pues siempre hacia lo mismo al llegar a la noche; esa chica que reía de todo volvía en la noche como por arte de magia.

La rubia entró al salón luego de sonreírle a su amiga y ella se volvió para buscar a Astrid. Subió fuera de las mazmorras pero no la encontraba, pensó que tal vez había vuelto sola y siguió caminando tranquilamente cuándo una figura la hizo detenerse. Nathaniel estaba vestido con un traje blanco y le sonreía al mismo tiempo que soltaba su mano que había agarrado para detenerla, la llevó al lado de una de las ventanas del castillo y ambos miraron hacia afuera.

—Creí que éste año Slubhorn te invitaría, ya sabes... con el compromiso entre Lucius y Narcissa. —dijo  él.

—Pero la que se casó fue Narcissa, no yo. De todas formas no me molesta, ¿tu no estabas por ir?

—Sí... pero es más divertido estar aquí contigo.

Él intentó acercarse, poniendo una mano sobre la de ella pero la sacó, no porque hubiese notado su tacto sino porque una sombra se acercaba a la vuelta de un pasillo, yendo directamente hacia ellos. Mareena vio a Remus Lupin pasar en frente suyo, la miró unos segundos a ella y en su mirada le quiso decir algo, luego se perdió en otro pasillo.

—Debo irme, Nathaniel, ya es tarde. Además llegarás tarde a la fiesta.

—Pero...

—¡Adiós!

Siguió los pasos que había seguido Remus hasta que se encontró con un pasillo con dos caminos, no sabía cuál tomar y creyó que tal vez había mal interpretado su mensaje, hasta que escuchó su voz.