Mi primera esperanza (Abraham Mateo) (Corrigiendo)

¿Que dijiste...QUÉ?

NARRA ______

Después de que Tony y Mateo se fueran, me dirigí a mi habitación. No había podido dormir muy bien por todo lo que pasó esa la noche, así que estaba muy cansada. Cuando ya estaba a media escalera escuché como se abría la puerta de la calle, eran Susana y Antonio.

Susana- ¿pero porqué saliste tan temprano? Apenas son las 2 de la tarde -- dijo mientras cerraba la puerta, tenía dos bolsas de mandado, una en cada mano y miraba confusa a Antonio.

Antonio- ya te lo dije, mi jefe y mi supervisor tenían una junta y no querían que nos quedáramos todos los empleados solos -- levantó los brazos como disculpándose o avergonzado.

Susana- está bien, pero me ayudarás a hacer la comida.

Antonio- tú mejor que nadie sabe que la cocina no es lo mío.

Susana- no te preocupes, de eso me encargó yo... Oh! ___ Hola no te habíamos visto.

___- Hola... -- Murmure mientras me ponía muy roja, no había notado que los estaba espiando desde la escalera.

Antonio- ¿en dónde están los chicos? ¿Estás sola?

__- am... No. Ellos están arriba hablando de...algo -- no puedo decirle lo de anoche, pero no sé mentir. PORFAVOR ya no pregunten nada, por favor....

Susana- ¿y qué es TAN importante como para dejarte aquí sola? -- Tenía una tierna sonrisa en el rostro pero yo sé que por dentro está enojada con ellos. Oh no.

___- no lo sé, pero no creo que tarden mucho. -- Intenté fingir una media sonrisa pero de los nervios parecía una mueca rara.

Susana- bueno pues diles que bajen para que me ayuden con las cosas. Además hay algo que tengo que decirles, creo que Abraham se pondrá feliz -- asentí y le devolví la sonrisa, tenía un tono de orgullo maternal en su voz, seguro le va a dar buenas noticias a Mateo.

Me gusta mucho ver a Susana tan feliz cuando habla de sus hijos, eso es lo que una madre debe hacer. Quererlos y cuidarlos. Ella es una buena madre y Antonio es un buen padre aunque a veces cuando se enoja es aterrador. Me gustaría poder tener una madre y un padre como ellos para poder pasar tiempo con ellos, salir juntos como lo hacen Mateo y Tony y que me enseñe lo que todavía no entiendo, como peinarme o maquillarme.

No, no puedes llorar aquí.

Me muerdo el labio para reprimir las lágrimas que no sé si son de tristeza o felicidad por poder estar con estás personas tan amables...

Antonio- ___.... ¿todo bien?

___- sí, sólo estoy un poco cansada -- contestó sin mirarlo a los ojos

Susana- está bien ___, tú sube a descansar un rato. Te hablaré cuando éste lista la comida -- me dedica una sonrisa amable y se va acompañada de Antonio a la cocina.

Cuando cierro la puerta de mi habitación y me tumbó en mi cama, escucho cerca los gritos de Tony, por el sueño no puedo entender bien lo que grita pero creo que me está hablando a mí.

Me levanto de la cama y al instante se abre la puerta y aparece Tony frente a mí, su respiración es agitada y tiene la cara completamente roja, ha estado corriendo pero... ¿tan grande es la casa como para estar tan cansado?

Tony- _____....-- su voz es apenas un murmullo.

__-Hola, Tony -- le sonrió nerviosa, aún me siento incómoda con él.

Tony se lanza sobre mí, y me abraza muy fuerte. Del susto y la sorpresa lanzo un pequeño grito.

No me quiere hacer nada malo, no quiere herirme, sólo me está abrazando - me repito en mi cabeza una y otra vez.