Falta sólo un día y ahora... ¿qué?

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NARRA _____

Me despierto sin abrir los ojos aún, escucho cómo alguien camina por toda la habitación y abre cajones una y otra vez, confundida abro lentamente los ojos y la luz del sol me cae directo en los ojos sin permitirme ver, me levanto y aún adormilada veo una sombra pasar frente a mí. Paso la mirada por toda la habitación y un escalofrío recorre mi espalda al notar que este no es mi cuarto, sin poder recordar nada hago a un lado la cobija que está sobre mis piernas y me siento, dejando caer mis pies descalzos en el suelo.

Xx- buenos días -- murmura la sombra que está frente a mí, por su voz parece que está sonriendo. Abro los ojos asustada al recordar lo que pasó ayer, no debería estar aún aquí. Esto está mal ¿En qué estaba pensando?

Miro a Mateo que está a frente a mí y la sangre me sube a las mejillas al notar, después de un rato, que está mojado y solamente en toalla. El torso lo tiene descubierto y la parte inferior la cubre con la toalla atada a su cintura. Avergonzada cierro los ojos y, de manera muy infantil, me dejo caer sobre la cama y me cubro el cuerpo muy avergonzada con la cobija. Mateo ríe y su voz se escucha más cerca cada segundo hasta que siento como se hunde el colchón a un lado de mí. Me estremezco cuando una mano cae sobre mi espalda y me sacude ligeramente.

Abraham- ¿qué pasa? ¿Tan mal estoy? -- suelta una fuerte risa e intenta quitarme la cobija pero la agarro fuerte haciéndolo imposible. No quiero verlo, no así.... -- de acuerdo, como tú quieras. -- por fin se levanta de la cama y escucho como la puerta de su armario se abre y cierra, quiero revisar que ya se fue pero no me atrevo a mirar, dos minutos después se abre la puerta y pasos se dirigen hacia mí.

Abraham- listo, ya puedes mirar. -- lentamente me asomo por encima de la cobija y Mateo me mira con una sonrisa burlona. Ya está vestido y la verdad se ve muy bien. Me levanto de la cama sonrojada por lo que pasó y me pongo de pie frente a él.

__- lo siento. -- digo para romper el silencio sin saber que más puedo decir.

Abraham- ¿por qué? Fue mi culpa, pero... lo podemos repetir si quieres... -- frunzo el ceño y Mateo suspira sentándose en la cama a un lado de mí.

__- no, gracias -- susurro, él me mira de arriba a abajo y se muerde el labio sonriendo, sin saber qué está pensando lo miro de frente esperando que diga algo.

Abraham- te ves muy linda. -- susurra. Miro hacia abajo y noto que aún estoy en pijama, frente a él. De un salto me separo de él y camino rápido hasta la puerta. -- ¿ya te vas? -- hace un puchero mientras se acerca más a mí.

__- sí, tengo que ir a bañarme.

Abraham- mm...... puedo acompañarte si quieres....

__- no -- contesto rápido, no entiendo porqué se está comportando así, me pone nerviosa.

Abraham- está bien, pero si cambias de opinión...... -- salgo de la habitación, no sin antes revisar que no haya nadie, y camino rápidamente hasta la mía. Cuando estoy a punto de llegar, estiro la mano para abrir la puerta.

Xx- buenos días ___. -- oh no, ¿por qué ahora?

___- buenos días, Austin. -- me giro hacia él y fuerzo una sonrisa que al parecer funciona.

Austin- ¿dónde estabas? ¿Con Abraham? -- levanta una ceja sonriente y burlón ¿me habrá visto?

__- no... Yo... sólo fui por agua. -- digo lo primero que se me ocurre, pero obviamente Austin no me cree, soy muy mala mintiendo, por suerte decide dejar el tema.

Austin- de acuerdo, te creeré por ahora. Te veré abajo -- levanta la mano para despedirse y se gira dándome la espalda.

__- si -- murmuro en respuesta, me giro haciendo que quedemos espalda con espalda y alcanzo a escuchar como Austin me susurra: "linda pijama" antes de irse.

Mi primera esperanza (Abraham Mateo) (Corrigiendo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora