Medicinal Love [ Jeon JungKook +18 ]. FINALIZADA.

QUINCE.

Al día siguiente.

   

      

JungKook camina con decisión por el pasillo habitual de siempre, había optado por trabajar medio día y claramente lo hacía con una sola intención: estar presente en la consulta de su padre, que si no mal recuerda, se dará dentro de diez minutos.

Había dejado a Hye Kyo en la escuela, su niña se había levantado muy feliz e entusiasmada. Quizás sea el hecho de que él no tuvo que salir a las corridas en plena madrugada y pudo dormir todo lo que quiso.

Sí, posiblemente se deba a ello, porque Hye le pidió dormir juntos, sin poder negarse, JungKook le dejó su lugar en la cama que tiene solo para él y con Barbie como película elegida por su hija, ambos se fueron quedando poco a poco dormidos, hasta llegar a un sueño profundo que les permitió descansar lo máximo que pudiesen.

Y aunque Hye sea algo incómoda para dormir, JungKook sonreía entre sueños cuando su hija se acurrucaba de su lado y tocaba su oreja, o cuando simplemente uno de sus brazitos intentaba abrazarlo pero no llegaba a rodearlo por completo.

¿Cómo despertaron?

Hye en medio de la cama estirada como cual Reina y JungKook casi cayéndose, pero posiblemente no hubiera sentido el impacto, cuando se trata de dormir, es alguien pesado de despertar.

—¿Que haces aquí, JungKook?— Alguien llama por él con cierta incertidumbre.

El pelinegro deja de caminar y se da vuelta, con unos ojos curiosos y sus brazos cruzados, espera a que su cuñado le responda.

—Tengo que atender a pacientes hoy. — Miente. La verdad es que no tenía ninguna cita.

—¿Por qué eres pésimo mintiendo?— Yoongi niega mientras se acerca con cautela hasta JungKook. — Estás aquí por tu padre.

Ni siquiera era una pregunta, más bien estaba afirmándolo. JungKook no puede siquiera soportar más su intensa mirada que termina por girar su rostro hacia un lado soltando un suspiro a la vez.

— Vale, sí. Estoy aquí por mi padre. ¿Acaso eso está mal?— Acepta derrotado.

— Claro que no, pero te han dicho que no es muy conveniente que estés en el momento de sus resultados.

— Eso lo sé, Yoongi. Lo sé y muy bien, pero no puedo simplemente desentenderme así porque sí, él es mi padre y por sobre todo, además de ser médico, soy su hijo, quién se preocupa por su salud. — JungKook no pierde su postura y dice con total convicción.

Yoongi solo puede mirarlo por unos segundos y sabe que aunque intente detenerlo, eso será más que imposible, por lo que solo asiente en silencio y señala el consultorio 14. El perteneciente a TaeHyung.

— TaeHyung junto a Jimin y Jung Suk han entrado hace tan solo cinco minutos, quizás y aún estás a tiempo. — Le informa. — Suerte.

JungKook da una rápida mirada hacia el consultorio y luego vuelve a Yoongi, a quien le sonríe y le da un pequeño golpe en su hombro como saludo.

El pelinegro se da la vuelta y en un trote tranquilo, se acerca hasta la puerta y toca dos veces antes de entrar y encontrarse con su hermano y padre.

—¿Qué haces aquí, JungKook?— Tal y como el mismísimo Yoongi, el pelinegro de cabellos ondulados le pregunta incrédulo. — Dijiste que no tenías absolutamente nada que hacer hoy.

— Como se lo dije a Yoongi, te lo digo a ti. No puedo desentenderme, es mi padre. — Murmura caminando hasta ellos.

JungKook puede ver cómo Jimin tiene sus ojos brillosos y cristalinos. Quizás la noticia ya se había dicho, pero algo le decía que su padre no aceptó ninguna propuesta.