Medicinal Love [ Jeon JungKook +18 ]. FINALIZADA.

TREINTA Y DOS

21:45 PM.

La puerta de la casa de los Jeon es tocada tres veces. JungKook quién está mirando con total aburrimiento su móvil, levanta su cabeza y Hye Kyo deja de bailar al ritmo de Shine de Pentagon.

—¿Crees que sea ella, papá?— Mirándolo con una sonrisa entusiasta, le pregunta acercándose hasta su padre.

—¿Quién más sino? — Él responde levantándose. —¿Cómo me veo?

Hye Kyo inspecciona a su padre, él lleva un pantalón negro ajustado a sus piernas, una remera de color blanco con un logo negro, sus cabellos lucen algo rebeldes por lo húmedo que se encuentran y está lindo. Muy lindo.

— Estás guapo, papá. — Ella asiente regalándole otra sonrisa.

JungKook aprieta levemente su mejilla y comienza a caminar hasta la puerta de entrada. Realmente no mentiría, se encontraba nervioso de recibir a Sebin en su hogar.

Porque sí, sus amigos le habían convencido que le invitará a cenar. Y él lo hizo a sabiendas que podía recibir una respuesta negativa, pero cuando Sebin aceptó, no pudo evitar en sentirse feliz por ello.

Abriendo la puerta, se encuentra con la silueta de ella, está sonriendo y se ve muy fresca. Sus cabellos lacios caen por su espalda, lleva puesta una remera blanca ajustada a su torso dejando a la vista parte de su abdomen, allí le adorna un piercing, un pantalón de mezclilla del mismo color que dicha prenda de arriba, como también sus tenis. Apenas y lleva maquillaje, y a él le encanta verla de forma tan natural.

— Hola JungKook. — Sebin se acerca hasta él y lo abraza con fuerzas.

Por un momento JungKook se olvida de todo y al sentir sus brazos rodearle, él hace lo mismo y se permite disfrutar de su calor.

Hye Kyo observa con sus ojitos brillosos dicha escena. Solo espera que su papá sepa ver lo linda que es Sebin con todos.

—¿Cómo estás, preciosa?— Susurra y con sumo disimulo, baja un poco su cabeza y besa su frente.

— He podido dormir un poco, así que estoy bien. — Le responde alzando su mirada, allí se encuentra con la dulce sonrisa de JungKook. —¿Tú? Luhan me ha dicho que la has pasado mal.

— No voy a negarlo, pero ahora puedo estar un poco mejor. — Murmura mirando sus labios. — Realmente deseo besarte, pero no puedo.— Susurra haciendo un leve puchero.

—¿Por qué no?— Sebin responde frunciendo su ceño.

JungKook se suelta de Sebin y con sus manos sobre su cintura, se da la vuelta y así puede dejarle la vista completa, por lo que cuando sus puños se encuentran con Hye Kyo, no puede evitar en alegrarse.

—¡Hola, Sebin!— La pequeña se levanta del sofá, y va corriendo hacia ella y la abraza por su cintura. — Gracias por venir.

¡Joder, es que no puede ser más tierna!

— Gracias a ustedes por invitarme. — Sebin le da un beso en su cabeza y puede sentir la pequeña risita de Hye. — Venga, chulada de casa.

—¿Te gusta?— Cuando ella asiente, JungKook se siente en cierta parte, a gusto con su aprobación. — Hace tan solo un año vivimos aquí, sino estábamos en un departamento muy chico, no había espacio para nosotros dos.

— Sí, yo debía dormir en la misma habitación con papá. — Hye Kyo recuerda con un pequeño puchero.

Sebin le da una mirada a JungKook, él asiente ante las palabras de Hye Kyo. No tenía privacidad alguna, ni siquiera ella podía hacer lo que una niña de su edad haría.