Narra la narradora:
Ambos se levantaron de la cama.
Junta estaba algo cansado pero no lo suficiente para seguir con la pequeña sorpresa que le había preparado a su Takato.
-Takato san no me gusta despertarte tan temprano pero hoy tienes cita con el doctor.
-Que se vaya al diablo - y el pelinegro se acurrucó más en las sábanas.
-Takato san! - se quejó Junta con un puchero - No debes decir ese lenguaje nuestro pequeño tesoro podría escucharlo además hoy es la ecografía.
Más rápido que un rayo Takato se paró de la cama y fue al baño, Junta al ver esa reacción también lo acompañó.
Había pasado mucho tiempo.
Takato tenía muchos mareos y con las justas podía salir a la calle se la pasaba en el apartamento, solo podía comer algunas comidas especiales y que no eran algo pesadas.
Por otro lado los amigos cercanos comenzaron a enterarse del embarazo.
-Ah! Muchas felicidades Takato kun - gritó alegre Sasaki san - Más vale que yo sea el padrino.
-Si lo serás Sasaki san - decía Junta - Eso ya está asegurado.
Takato asintió.
Luego cuando se enteraron sus padres fue una tremenda sorpresa.
-Takato tú estás .... - su padre se apoyó en la mesa - Estás embarazado!?
-Sorpresa - dijo Takato nervioso.
La madre fue corriendo a abrazar a su hijo.
-Ya soy abuela! - se notaba mucho su alegría - Oíste cariño seremos abuelos.
El padre seguía apoyado en la mesa.
-Cariño?
-Azumaya kun - se acercó amenazante a Junta - Ven aquí tranquilo no te haré nada.
El castaño se alejó cuidadosamente pero luego empezó lo peor.
-Maldito mocoso ven aquí te voy a castrar! - gritó y persiguió a Junta.
Todo eso fue gritos y risas.
Ambos en el auto estaban yendo al hospital, Takato miraba la ventana pensando en su bebé, sonrió al ver su vientre.
Junta se dio cuenta de ello y cuando el semáforo se puso en rojo fue y dejó un casto beso en los labios del azabache, luego tocó su vientre.
-Ah~ ya se nota mucho más este pequeñín va a crecer fuerte y sano - dijo y volvió al volante.
Takato se sonrojo y se ocultó en su abrigo.
''Maldito ángel''
Ya habían llegado al lugar y allí esperaron un poco de tiempo hasta que una enfermera los llamó diciendo que pasaran.
-Buenos días soy su doctor mi nombre es Hiroshi - dijo el hombre.
-Muy buenas tardes doctor - dijeron ambos - Venimos por la ecografía.
-Bien bien comencemos.
Empezó su procedimiento primero poniendo un gel sobre su piel, después apareció una imagen en el computador.
-Allí está su bebé.
Ambos se quedaron callados al ver la imagen de una pequeña bolita, era un evento tan mágico.
-Chunta míralo es tan pequeño - Takato comenzó a sollozar - Nuestro bebé es tan pequeño.
-Si Takato san es tan pequeño - Junta agarró la mano de su tesoro con fuerza.
-Ah ya me había olvidado porque había elegido este trabajo - suspiró el doctor - Quiere una foto de su bebé?
-Si! - dijeron ambos.
El doctor les entregó una foto y mientras Takato se secaba las lágrimas de emoción, Junta observó y acarició las foto con dulzura.
Luego se fueron del lugar después de escuchar las recomendaciones del doctor.
Mientras que volvían a casa el azabache miró ilusionado una tienda de ropa de bebé.
-Takato san que pasa? - dijo Junta observando a su azabache.
-Nada solo ... olvídalo - ignoró la mirada de Junta.
-Mmmm ¿Quieres ir allá?
-No! s-solo...
-Venga vamos.
Ambos fueron a la tiendita que era muy tierna tenía un montón de estantes con ropita muy pequeña, también peluches muy adorables, maniquís en miniatura etcétera.
-Bienvenidos ¿Qué están buscando? - preguntó la empleada.
-Ah pijamas y mantas - respondió inmediatamente Takato.
-Bien síganme.
Caminaron durante un buen rato viendo un montón de ropita.
-Mira Takato san! - gritó emocionado Junta - Este tiene un dibujo de un osito.
-Ya cálmate Chunta - respondió.
-Y este es un vestido muy tierno.
-Aún no sabemos si es niño o niña!
-Oh ... entonces podemos tener dos?
-Cálmate ángel procreador.
Luego de mucho tiempo por fin terminaron esas compras.
-Mmmm compramos muy poco - dijo apenado Junta - Si fuera por mi me hubiera llevado toda la tienda.
-Ay que desesperado - suspiró el pelinegro.
-No puedo evitarlo es por nuestro bebé.
Caminaron de la mano como una bella pareja por el parque, era de tarde por lo que el cielo se veía muy hermoso.
-El cielo sigue siendo tan hermoso a tu lado Takato san.
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Unidos
RomanceSaijo Takato ha sido un omega que ha obtenido el puesto de ''el más deseado'' hasta que alguien se cruza en su camino alguien que le cambiará la vida. Es una historia omegaverse.