𝐃𝐚𝐧𝐢𝐚|✔

Capitulo 20

Traté de no prestar atención a todas las personas con las que pasamos mientras mirábamos por los escaparates de varias tiendas tratando de decidir si queríamos entrar o no.

Era extraño saber que Orión nos seguía. Miraba discretamente por encima del hombro mientras caminábamos, fingiendo que estaba mirando algo en el escaparate de una tienda, pero nunca pude verlo. Realmente era bueno en lo que hace.

—Entonces, ¿hay algo específico que estés buscando? —Giré mi cabeza para enfrentar a Rylan. Su cabello rubio hasta los hombros rebotaba con cada paso.

Ella se encogió de hombros con una sonrisa—. Tal vez algo de lencería. Tengo que darme un capricho de vez en cuando.

Quizás también compre algunos.

Mis mejillas se calentaron ante la idea de usarlos para Reyn. Lo disfrutaría, ¿no? O tal vez fue demasiado en contra de mi imagen. Miré mi atuendo, él me vistió de una manera juvenil. ¿La lencería lo desanimaría? ¿Pensaría que era demasiado extraño?

Pero te llama puta cuando está dentro de ti.

Quizás lo disfrutaría. Revisé mi bolso para ver cuánto efectivo tenía. Sabía que solo había un par de cientos en mi cuenta bancaria. La lencería era cara; No quería gastar todo lo que tenía en eso. Necesitaba algo para pagar el alquiler y la factura del teléfono. Al mismo tiempo, vivir con Reyn alivió gran parte de la tensión financiera.

Busqué dentro de mi billetera y la abrí para encontrar una tarjeta desconocida. Hablando de aliviar la tensión financiera.

Lo que me dejó perplejo fue que tenía mi nombre. La tarjeta era pesada y metálica. ¿Cuándo demonios había ido a buscar esto? ¿Por qué iba a hacerlo? Debe haberlo deslizado allí mientras yo estaba en la ducha. No podía recordar que estuviera ni siquiera a una pulgada de mí desde esta mañana. Lo guardé en mi bolso y le envié un mensaje de texto a Reyn.

¿Me compraste una tarjeta de débito?

R: Sorpresa, bebé <3. Está vinculado a mi cuenta. No hagas demasiado daño;)

Reyn, esto es demasiado.

—Chica, ¿por qué te ves tan presionada? ¿Está todo bien? —Ry preguntó mirándome.

—Sí, solo necesito encontrar algo muy rápido.

R: Tengo más de lo que sé qué hacer, princesa. No preocupes a tu linda cabecita por eso. Quiero que mi chica tenga cosas bonitas, ¿qué hay de malo en eso?

Cuando lo pones así...

R: ¿Y sabiendo que te compré lo que llevas puesto? Joder, vuelve pronto a casa, cariño. Te echo de menos.

Le envié algunos emojis de besos. Si tuviera que comprar lencería, sería más para él que para mí. Me hizo sentir menos culpable por usar su dinero para ellos. Tampoco tendría que preocuparme por no tener suficiente dinero. Solo unas pocas series, eso es todo. Quizás incluso solo uno.

Cuando estuvimos en la tienda, juro que podría haber comprado al menos una cuarta parte de la ropa en exhibición. Todo parecía de encaje, femenino y halagador. Tan pronto como puse mis ojos en un corsé blanco bordado con flores, supe que tenía que tenerlo. Siempre me incliné por los patrones y aromas florales.

Era una combinación de sexy y linda, exactamente mi vibra. Incluso podría usarlo como top o sobre una camisa. La versatilidad de la pieza solo me convenció más. Eso y el hecho de que había querido un corsé durante mucho tiempo, pero nunca pude encontrar el adecuado. Estaba destinado a ser, decidí. Tenía que comprarlo si me quedaba bien, por supuesto.