Sweet Paradise.

11

-¿Por qué siempre me buscas cuando me quiero ir?

-Karol, yo...

-Tu única estrategia ha sido enviar flores y mensajes de buenos días, ¿No crees que me merezco mucho más que eso?

-He intentado darte más que eso.

-Ya conozco tu juego, no sigas con lo mismo, cambia de estrategia, mueve más fichas.

Erick, cansado de nuestra conversación, suspira cruzándose de brazos. Le miro buscando algo en él, aunque sea algo pequeño que le haga reaccionar y decirme que en serio quiere luchar.

Estoy cansada de jugar, de todos los días esperar algo nuevo y siempre terminar en lo mismo. En exactamente el mismo mensaje y las mismas flores.

Quiero más.

Necesito más.

He estado mucho tiempo esperando algo más de él, pero siempre obtengo lo mismo.

Dice que está arrepentido, que quiere enmendar su error y que esta vez hará las cosas diferentes pero no las hace, nunca las hace. Sigue siendo, haciendo y diciendo lo mismo de siempre. Estoy cansada de buscar algo que no obtengo.

Me cansé de esperar que al menos algo en él cambie.

Estábamos sentados en la cafetería del set de grabaciones, después de exactamente tres meses de entrenamiento básico, las grabaciones comenzarán, ya no se harán en junio o julio como lo habíamos planificado, se harán en abril aunque evidentemente, no se van a detener en los entrenamientos, seguirán asistiendo.

El chiste es que mientras eso sucede, mientras todo el mundo se alista para grabar y mucho otros se preparan ensayando escenas y demás, yo estoy sentada en una mesa de cafetería viendo al que se supone es el amor de mi vida.

Sigo esperando que al menos hoy, algo cambie.

-Te amo, Karol.

-Eso ya lo he escuchado muchas veces. -susurro.- Dime algo que no sepa, o que quizá sepa pero que esta vez sea diferente.

-Quiero cambiar, que me des una segunda oportunidad y esta vez, hacerlo bien.

-¿Y cómo se supone que lo harás bien esta vez? ¿Haciendo qué?

-Déjame intentarlo.

-¿Intentarlo? ¿Más? -muerdo mi labio inferior.- Ya estoy cansada de que lo único que hagas es intentar, me lastimas más y lo sabes. Estás haciendo que todo lo que sentía por ti se vaya a la mierda, y que los buenos recuerdos sean solamente una fantasía porque sinceramente, ahora mismo desconozco a este Erick que me juró un montón de cosas bonitas que no está cumpliendo.

-Y no pretendo justificarme, sé bien que la cagué en grande. -susurra con cierto tono de sinceridad.- Y luego cuando comenzaron a vincularte con el italiano ese...

¡Ja! Esa fue mi decepción amorosa más estúpida.

Esa, fue exactamente esa la ilusión más pendeja que tuve, es decir, me dejé llevar por el momento y terminé enojándome conmigo misma por impaciente.

Por idiota.

Y de Ruggero no obtuve nada, primero se vio con la ex, luego con una amiga de la adolescencia y quedé como una estúpida creyendo que teníamos algo especial cuando evidentemente no era así.

Después de eso, a veces me habla, a veces no.

Le pregunté a Sophie qué significaba, mamá me escuchó y dijo...

Nunca te fijes en los ojos que no te ven a tí.

Y cómo toda pendeja que ignora los consejos de su madre, ahí estuve...