La heroína llegó a la academia y busco al héroe para enamorarlo pero...no encontró a la villana que propulsaría el amor.
Preguntando se dio cuenta que dicha persona no existía y empezó a impacientarse. Los personajes no estaban interesados en ella a...
Todas las polillas nos miraban con asombro y movían sus antenas para comunicarse entre ellos. La mujer volvió a extender sus brazos exigiendo sus huevos.
-No. Hagan lo que dice mi compañera o partiré tus huevos con el martillo- Wayne sonaba enojado tras la máscara
La mujer se acercó más y sus ojos eran espirales violáceos muy hipnóticos. Parecía querer algo cuando su mirada se enfocó en mí de manera penetrante y sus antenas abanicaban mi cabeza. Una sensación muy familiar surgió de repente y saqué mi celular del bolsillo.
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-Wen que estas haciendo?! Detente, esto no es...- oía la voz de Wayne detrás de mí
-Tengo que...- apunte mi celular y la mujer se sorprendió al ver el flash encendido
Fotos, muchas fotos es lo único que quería y no me detendría hasta lograrlo. Esta sesión serviría para la guía y para recuerdos de la visita de seres raros.
-Eres incorregible...Discúlpame- recibí un golpe en la cabeza con la vaina de la katana que me detuvo
-No tienen miedo?!-
-Eh?!- de que estaba hablando esta mujer
-La gente huye o grita cuando nos ve. Pero ustedes, quiénes son? No huelen como la gente de aquí- el hombre movía sus antenas
-Es cierto! No se han disculpado y mucho menos han pagado por su desastre-
-No tenemos dinero pero lamentamos todo. Su casa era muy brillante y nos atrajo las cajas luminosas en el piso, solo teníamos curiosidad de saber que eran-
-Ah...entonces solo limpien y arreglen todo. Mañana van a venir los clientes al onsen y debe estar presentable- Wayne les devolvió sus huevos
-Otra cosa, dejen de atacar a la gente. Necesitamos clientes y si ustedes los matan nos iremos a la quiebra-
Las demás polillas bajaron, varios gatos monteses, murciélagos, lobos y mapaches gigantes salieron de sus escondites debajo del piso y los matorrales. Explicaron sus razones de ocultarse y dejaron en claro que ellos no eran quienes atacaban a la gente.
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