La heroína llegó a la academia y busco al héroe para enamorarlo pero...no encontró a la villana que propulsaría el amor.
Preguntando se dio cuenta que dicha persona no existía y empezó a impacientarse. Los personajes no estaban interesados en ella a...
Al día siguiente, Magdalena, quien llevaba una peluca marrón, llega con un niño hasta la prisión afirmando ser la esposa de uno de los presos. Es el día de visitas y aprovechando que todos recibían a sus familias, pidió por un hombre llamado Steve Thur.
-Como que ya sabían sobre ustedes? Planificamos todo para qué saliera perfecto! Quién los delató?- Magdalena no entendía la situación
-No lo sé. No tuvimos tiempo de reaccionar ante los guardias. La gente sombra de Unalome se encargó de los demás para entregarnos. Al llegar, nos acusaron de terrorismo e incluso de haber liberado a esas bestias malolientes- Steve se agarraba la cabeza
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-Alguien los entregó y voy a averiguarlo. Qué más sabes sobre este asunto que pueda ser relevante?-
-Aparte de eso, sé que que el maestro Gustav se llevó la caja y varias sombras lo siguieron. Quizás también lo atraparon en silencio-
-O quizás fue una trampa. Dijiste que viste sombras ir detrás de él pero no cuando los acorralaron es claro que quería que lo viéramos. Pero por qué? Si no sabes más le haré llegar la información a Hugh-
-Muchas gracias mi señora. Si es el señor Hugh, seguro seremos libres pronto- Steve le agradeció para que se retiraran
Su rostro estaba duro como piedra por la rabia de darse cuenta tarde de su error. Llevó al niño hasta la esquina y le entregó dinero para volver a su escondite.
-Fue un gusto trabajar para usted. Gracias y adiós- el niño tomó el dinero y salió corriendo
-Mocoso, si tan solo estuviera segura de que tendré esta libertad en otro cuerpo tu serias el siguiente- la envidia de ver un cuerpo sano la cabreaba
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Suspirando caminó varias cuadras, cuando algo dentro de su sostén comenzó a vibrar y sonar. Entró a un callejón, sacó el celular y presionó el botón verde.
-Hola- una voz masculina provino del aparato
-Hola?- Magdalena contestó confundida
-Como está señora? Espero no interrumpir nada importante luego de su paseo por la prisión- la voz sonaba muy jocosa
