El Heredero De Drácula

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 51

Bastián se había trasformado en el murciélago nuevamente y para nuestra sorpresa él no nos había atacado, tal parece qué lo estaba controlando.

—¿Qué es eso Van Helsing? — Preguntó el rey de Corea del Sur.

—Un poder qué Bastián consiguió cuándo la espada de la cruz escarlata fue destruida, ahora Kai, Vladimir, les suplico qué nos dejen ir, no queremos usar la violencia.

—Habla por ti, cazador — Intervine —.Yo sí quiero usar la violencia, ellos lastimaron a Bastián y quiero qué paguen por ello.

—Te preocupas mucho por mí hijo, para ser el diablo — Me dice el hijo de Vlad Tepes.

—Me preocupo más de lo qué se han preocupado ustedes — Contesté.

Las manos del hadampiro comenzaron a brillar, se formaron dos esferas de energía en ellas y con mucha fuerza las lanza hacia mí.

Bastián se interpuso y con sus garras deshizo ambos ataques de energía. Él los miró con furia y después lanzo un poderoso rugido.

—Bastián, será mejor irnos ya — Van Helsing lo miró —.No hay qué hacer un espectáculo en está escuela.

El murciélago no hizo caso, comenzó a avanzar lentamente hacia ambos reyes y quedó frente a sus padres. Los dos no se movieron ni siquiera intentaron atacarlo, ellos simplemente lo miraron, Bastián hizo lo mismo, se limito a mirarlos sin más cómo sí con la mirada les dijera todo lo qué está sintiendo en estos momentos.

Él comenzó a alejarse de ellos, nos miró y después comenzó a cambiar de nuevo a su forma humana. Me quite la chaqueta qué traía puesta, camine hacia él y una vez qué Bastián regreso a la normalidad lo cubrí con ella.

—No vale la pena — Les dijo una vez recuperó el aliento —.Ustedes dos ya no la valen, quédense con Aurora, yo no los necesito más — Desvía su mirada hacía mí dirección —Por favor, vayamos a casa.

—Cómo desees — Respondí.

Ví la pulsera en el suelo, la tomé y después se la volví a colocar en la muñeca al vampiro.

Los tres nos dirigimos hacia el portal, lo atravesamos y aparecimos en la sala de reuniones de la escuela de Canadá dónde José, Metatrón y Cordelia se encontraban esperándonos. La bruja al vernos cruzar concentró su magia y cerró el portal.

—¿Qué fue lo qué pasó? — Preguntó José al ver cómo se encontraba Bastián.

—Esté no es el momento más adecuado para decirlo — Respondí por el vampiro —.Vamos Drácula, te llevaré a tú dormitorio.

Él asintió, caminamos hacia la puerta del la sala y salimos del lugar en dirección al edificio del dormitorio. Durante todo el camino el nieto de Drácula estuvo totalmente callado, pero aún qué no decía nada podía ver en su mirar y en su rostro una irá inmensa acompañado por dolor.

Llegamos al edificio, entramos a su habitación, busque ropa y después se la entregué para qué se cambiara. Él lo hizo y una vez qué termino tomó asiento en su cama y solamente miró hacia el suelo.

Camine hacia él, me arrodille frente al vampiro, tome su mentón con mí mano izquierda e hice qué me mirará a los ojos.

Cómo me suponía, estaba reteniendo el llanto, sus ojos estaba cristalizados, quería llorar pero no soltaba lo qué sentía.

—Llora, házlo sí te hace sentir bien, Bastián.

—No quiero volver a ser un idiota, el llorar te hace débil, tengo qué ser fuerte para qué nadie me vuelva a ver la cara de imbécil.

—El llorar no te hace débil, Bastián, cree en mis palabras.

—¿Tú has llorando alguna vez? — Me cuestiona con voz quebrada, se encontraba apunto del llanto.

—Solo una vez.

—¿Y te hizo fuerte?, ¿Te hizo sentir bien?

—Lo hizo...— Me puse de pié y después tome asiento al lado derecho del vampiro —.Ven...— Lo tome, lo jale hacia mí, choco contra mí pecho y lo abracé —Llora, y mañana te sentirás bien nuevamente, serás más fuerte qué nunca y nadie te lastimara de nuevo ni te ocultaran nada, hazlo Drácula.

Él no me respondió nada solamente si llanto finalmente se presentó.

—Eso, llora Bastián, llora todo lo qué quieras, aquí estoy.

Minutos después

Él se había controlado al fin, estaba más tranquilo, estoy completamente seguro qué después de esto, volverá a ser el Bastián Drácula de siempre, solo qué con más fuerza.

El vampiro ahora mismo se encuentran recostado sobre su cama mirando hacia el techo.

—Duerme...— Me recargue en la pared mientras observaba al vampiro —.Tienes qué descansar.

—Los vampiros no necesitamos dormir, solo lo hacemos por qué los demás lo hacen.

—Pues en ese caso...— Camine hacia la cama, me recosté a su derecha, él giro hacia mí y ambos quedamos frente a frente —.Dormiré yo y tú me seguirás.

—¿Por qué lo haces?

—¿Por qué hago qué?

—El ayudarme con esto, ¿Por qué?

—Por qué eres mí amigo, y los amigos siempre están en las buenas y en las malas, los amigos nunca se dejan.

—¿Jamás habías tenido amigos antes?

—Estuve en el infierno por millones de años, Bastián, nunca conocí a alguien qué quisiera ser amigo del diablo, hasta qué te conocí a ti, me perdonaste por lo qué pasó, iniciamos de nuevo y me diste tú amistad, y por ello te estoy agradecido infinitamente — Dí una pequeña sonrisa —.Me alegra haberte conocido, Bastián Drácula.

—No eres tan malo, Lucifer, el mundo te ha pintado de villano cómo a mí, pero en realidad no lo eres, tú nombre significa el portador de la luz, y creo qué puedes llegar a serlo.

—¿De verdad crees eso?

—Lo creo, puedes llegar a ser el portador de la luz.

—¿Me puedes ayudar a cumplirlo?

—Puedo y lo haré.

—Gracias.

—Gracias a ti...— Sus ojos comienzan a cerrarse lentamente —.Por estar aquí conmigo, por darme aún qué sea un poco de ánimo... por... ser... mí amigo Lucifer — Finalmente cayó rendido.

—Siempre voy a estar para ti, Bastián — Con cuidado acaricie su mejilla —.No te voy a dejar, otra vez no, me mantendré a tú lado toda la eternidad, cualquier persona qué se atreva a herirte, haré qué conozca el infierno en la tierra.

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Estalló la bomba!, Finalmente el secreto de Kai y Vladimir ha salido a la luz ¿Cómo tomaron el hecho de qué Bastián tuviera una hermana secreta?, me gustaría qué me lo contarán... otra cosa ¿Ustedes qué equipo prefieren?, ¿Equipo Bainette o equipo Lucitián?