Bienvenido a la pesadilla

Batidos

Todo ha estado muy bien con Kai, es muy atento y afectuoso , últimamente paso mucho tiempo con él, más que con mis amigos,  Kai me hace sentir muy cómoda, en realidad...Me esta empezando a gustar un poco. Pero quitando el color de rosa en mi relación con Kai, me sigue pareciendo extraño que sepa tanto de mi, ¿Es un acosador o algo así? Imposible.
-¡Ariiiiin!
-Oh, Emma eres tú. ¿Qué pasa?
-¿Quieres ir a tirarte en paracaídas conmigo?
-¿Eh? ¿Qué?
-Solo ven, hablémoslo juntas.
-Mmm... ¿No es raro que dos chicas menores de edad vayan a saltar en paracaídas? Si quieres hablar con Arin solo dilo. -Dijo Kai, tenía una expresión seria, casi parecía enojado.
-Sí, bueno...
Emma me tomo de la mano molesta y me llevo con ella afuera, nos sentamos en un banco que quedaba a la sombra de un árbol. 
-¡No sabía que Kai era así! ¡Parece tan molesto como Leo!
-Kai no es molesto. En realidad tenía razón, no tienes que inventar excusas para hablar conmigo, no es como que Kai me haya secuestrado, somos novios, ¿Recuerdas?
-Aja. Pero, ¿Por qué sales con él? Me dijiste que te gustaba Leo.
-¿Yo dije eso? Ja... Jajajaja. Claro que no, Leo es como un hermano.
-¡Sí, Arin, tú dijiste eso!
-En fin, debí estar confundida, Leo no me gusta.
-¿Y Kai si?
-Sí.
-Pero... No lo entiendo. Habían hablado muy pocas veces, de la nada se hicieron novios.
-Descubrí que tenemos mucho en común.
-¿Cómo qué?
-Es un secreto.
-...
-...
-Uff... -Suspiro Emma. -¿Al menos quieres ir a beber un batido hoy? Conmigo y Leo.
-No puedo.
-¿Por qué no?
-Voy a salir con Kai.
-¡¡Vamos!! También tienes amigos, no solo esta tu novio ¿Si?
-De acuerdo... Iré.
-¡¡¡Geniaal!!!

-¿Entonces vas a salir con tus amigos?
-Sí, lo siento.
-Tranquila, lo entiendo.
-Nos vemos mañana entonces.
-Sí, hasta mañana. -Dijo Kai con una sonrisa, y se fue.
Espere a Emma y a Leo en la salida, mientras escuchaba un poco de música. Había bastante sol, pero también había una brisa fresca, lo que hacía que el tiempo se sintiera bastante agradable.
-¡Ary!
-¿Qué tal?
-Hola Arin.
-Hola, Leo.
-Síganme chicos, hay que tomar el autobús. -Dijo Emma, y comenzó a caminar.
-¿Es lejos?
-Está en el centro.
-¿Por qué vamos hasta allá solo por un batido? -Pregunte mientras seguía a Emma.
-Dicen que los batidos de ahí son los mejores. También venden té de burbujas y sandía cortada.
-¿Y qué pasó con el café de gatitos? -Subí al autobús. -¿No querías ir a ese también?
-Ohh, es cierto. Pero no importa, ya estamos en el autobús.
Me iba a sentar junto a Emma pero ella se sentó con una señora, así que me senté en otra parte, junto a la ventana.
-¿Puedo sentarme? -Pregunto Leo, pero se sentó.
-¿Por qué preguntas si igual te vas a sentar?
Fue un viaje silencioso, era incomodo, Leo no decía nada y yo tampoco. Finalmente Emma nos dijo que habíamos llegado, así que la seguimos, y nos llevo hacía una linda cafetería; Era elegante pero acogedora a la vez.
-Mmm...
-¿Qué pasa Ary, no te gusta la cafetería?
-No es eso. Creo que la he visto antes.
-Quizás viste una foto, es famosa.
-No creo...
-Buenas tardes. -Dijo el mesero. -¿Qué van a pedir?
-Quiero un té de burbujas por favor, sabor-
-¿Quéee? ¡Pero si vinimos aquí por los batidos! -Me interrumpió Emma.
-Un té de burbujas de ciruela, por favor. -Dije con una sonrisa. - Y un batido de arándano.
-¿Vas a beber todo eso? -Pregunto Leo. -Te darán ganas de ir al baño.
-Entonces, mmm... También quiero un pedazo de pastel de cereza, por favor. -Sonreí. 
-Je. Un batido de mango, por favor.
-¿Y para usted, señorita?
-Un batido de frambuesa y unas galletas con chispas de chocolate, porfis.
-Anotado. -Dijo el mesero, sonriendo. -Enseguida regreso.
El mesero se fue y se creo nuevamente un ambiente incomodo.
-¿Cuanto se demora en vomitar una jirafa? -Pregunto Emma.
-¿Qué?
-¿Las jirafas vomitan?
-Supongo que es una buena pregunta...
-Todos los animales vomitan, ¿No?
-Eso creo.
Ahora que lo pienso somos idiotas, es decir, Emma hace una pregunta extraña y nosotros la seguimos.
-¿Podemos hablar con normalidad, chicos? Es cierto que Arin no ha pasado mucho tiempo con nosotros, pero no por que tenga novio debemos dejar de ser amigos, ¿Cierto? 
-Es cierto. Arin ya es mayor, que haga lo que quiera.
-Que grosero de tu parte. De cualquier forma, perdón por dejarlos de lado.
Estuvimos hablando un rato, hasta que llego el mesero. Traía nuestros batidos, las galletas de Emma, mi pastel de cereza y mi té de burbujas.
-¡Gracias!
-El batido de arándano es genial. -Dije dándole un sorbo.
-El de frambuesa es más rico, jeje.
-No lo creo, demasiado espeso.
-Los batidos son espesos en si.
-¿Entonces tu batido de mango es mejor?
-Lo es. -Leo le dio un sorbo. -Pienso que es más refrescante.
-Mmm... ¡Ya lo sé!
-¿Qué es lo que sabes? -Pregunto Leo.
-Ya había visto este lugar, fue en mi pesadilla.
-¿Si? Probablemente lo habías visto antes y se grabo en tu memoria.
-No, nunca lo había visto.
-¿Y qué pasaba en el sueño, Ary?
-Había un tiroteo y una chica moría.
-¿Tiroteo? -Pregunto el mesero que justo pasaba.
-Sí...
-Habrás leído la noticia y luego soñado con eso. 
-¿Noticia?
-¿Eh? ¿No lo saben?
-Cuando recién abrimos hubo un tiroteo por aquí cerca. Murió una mujer, y otras personas se lesionaron, la mujer no dejaba de repetir un nombre... ¿Cómo era? ¿Marina? ¿Martina?
-Mary.
-¡Oh, sí! ¡Eso es! Mary, esa mujer seguía repitiendo "Mary" Intente ayudarla pero ella se levanto del suelo y ese hombre le disparo. 
-¿Tiroteo? ¿Mujer muerta? -Murmuraban los demás clientes. -No volvamos a venir por aquí... Parece peligroso.
-¡Alan, no espantes a los clientes!
-¡L-Lo siento, jefe! -Dijo el mesero y se fue.
-Que raro...
-¿Qué cosa? ¿Mi cabello? Olvide lavarlo, pero no es para tanto...
-¿Eh? No, no es eso. Primero soñé con el padre de Leo y resulto ser verdad que lo golpeaba, y después soñé que una mujer moría por aquí y realmente murió.
-Pues sí, es extraño, quizás tienes un don ¿No, amiga? Jaja.
-Puede ser, jiji. -Le respondió Emma a Leo, riendo.

Parece que todo vuelve a ser como antes e incluso mejor, hablo con normalidad con mis amigos, y tengo un novio atento. Quizás esos sueños horribles en realidad no son ton malos, aunque no deja de ser extraño que cosas con las que he soñado realmente han pasado.

Bienvenido a la pesadilla
Capítulo 15 - Batidos
FIN