Maldito Amor

Prólogo:)

Mi vida no ha sido igual desde que el apareció, todo lo que creía imposible se volvió posible y mis pesadillas salieron de la hora nocturna para atormentarme todo el día, todos los días. Pero la verdadera pregunta aquí era ¿Estaba dispuesta a amar a aquel hombre después de saber la verdad? O ¿es que acaso me confesaría todo sobre su vida y como se ligaba a la mía? Bueno estaba a punto de descubrirlo.

- ¿Asesinaste a mis padres? – pregunté temerosa, no hubo respuesta -Respóndeme con un carajo Sebastián- exigí.

-Si- su corta y fría respuesta fue como una puñalada a mi corazón.

- ¿Por qué? – pregunté llorando. 

-Llevo mucho tiempo en esto; empezó incluso mucho antes de que tú, tu padre o tu abuelo nacieran. Hablamos de una guerra activa de hace siglos entre nuestros descendientes Abigail, hasta que llegué a ti y cambiaste mi perspectiva con tu sonrisa, cambiaste mi mundo mismo con ese maldito amor- fueron sus palabras aquella noche que descubrí la verdad sobre los horribles asesinatos de casi toda mi familia.

-Sabes, he visto y oído tanto que no se si creerte, te odio- confese llena de ira.

Sabia que todo absolutamente todo cambiaría a partir de ahí; debía ser fuerte, muy fuerte para no rendirme, ahora tenia a dos vampiros intentando asesinarme y lo peor es que, aunque me doliera, yo si estaba enamorada de uno de ellos. Ese hermoso monstruo de ojos color fuego llamado Sebastián.

-Maldito amor, mil veces maldito- repetí una y otra vez llorando cuando por fin creí estar sola en mi habitación.

*Sebastián*

No debí encariñarme con ella, no debí confesárselo, debí matarla cuando tuve la oportunidad. Ahora me aborrece me mira como un monstruo y ¿cómo no? Si he matado a cada uno de los miembros de su familia.

Lo mejor sería asesinarla y cumplir con mi promesa de exterminar a los Jones de una vez por todas, pero como hacerlo si con su sonrisa me sacaba de la cruel y dura realdad, estaba completamente enamorado de ella y lo único que en este momento me importaba era conseguir su perdón.

-Maldito amor- es todo lo que diré.