Extra #1.

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Frace: "Eran perfectos, pues ella se enamoro de sus demonios, mientras que el amaba su oscuridad" -de algún usuario en Instagram.

*Narrador*

Abigail, Esme, Astrid e incluso el pequeño Kaden estaban fijos mirando como Sebastián dormía en un trance profundo dentro de la tina el agua que le cubría gran parte del cuerpo se tornó de un color negro intenso, todos estaban en suspenso por el que pasara mientras el tiempo corría a prisa, todo estaban asustados, todos estaban en suspenso, todos se preguntaban ¿lo lograra en sesenta segundos? Abigail se encontraba a su lado mirándolo con delicadeza preguntándose si en otra vida volvería a verlo, si es que existía otra vida.

Todo estaba muy tranquilo y eso desconcertaba a Astrid, habían pasado quince segundos cuando un estruendo enorme se escucho fuera de la habitación, Astrid no pudo disimular y en sus labios se formo una sonrisa puesto que el, rey de las sombra, había llegado a su morada.

Las puertas se abrieron de par en par en lo que fue un portazo y algunos libros de los estantes salieron volando, la ira en su mirada era notoria, pero Astrid se puso en el frente evitando su paso, uso todo su poder mágico para retenerlo, lo retaba con la mirada, para ella esta era la batalla que tanto había esperado desde la rebelión.

-Bruja- le saludo él.

-Diablo- le dijo ella haciendo una reverencia en burla.

-Empieza a pedir piedad-

-Hace mucho que te esperaba ¿crees acaso que te tengo miedo demonio?- le cuestiono determinada.

-He venido por lo que me pertenece y no me iré sin ello- amenazó con sarcasmo.

-No te llevaras a nadie y mucho menos al niño- advirtió firme.

-No podrás evitarlo- trato de intimidarla.

Astrid dio un paso al frente decidida -Inténtalo entonces- lo reto ella con una sonrisa en el rostro.

Y así dio inicio una vez más una batalla épica entre el diablo y la bruja más antigua que existía, más sin embargo el diablo le ganaba en poder, hechizo tras hechizo evadió, y ataco, la habitación se había convertido en una sinfonía de golpes y gritos; mientras estos peleabas Esme y Abigail se encerraron junto a Kaden y Sebastián en un círculo de sal para ganar más tiempo.

Veinticinco segundos habían pasado, casi la mitad, cuando el demonio hiso levitar por los aires a Astrid haciendo que cada musculo de su cuerpo se tensara provocándole un dolor desgarrador, luego la lanzo por los aires haciéndola atravesar varios estantes, Esme entonces decidido salir a la batalla y enfrentarlo pero apenas pudo acertar un golpe cuando el diablo la tomo del cuello levantándola del suelo y la lanzo lejos de el haciéndola aterrizar sobre una mesa, Esme era fuerte se levanto e intento atacarlo de nuevo pero Lucifer la envolvió en una masa de humo negra y espesa, seguramente iba a lanzarla lejos de nuevo pero en ese momento Abigail que con mil dudas y temores dejo a Kaden para abalanzarse sobre su creador lo evito, por un segundo estuvo encima de el y le rasguño el rostro, pero eso hiso enfadar más la rey de las tinieblas y en un chasquido de sus dedos la redujo a cenizas.

Astrid que en ese momento estaba arrastrando su cuerpo presencio la escena con mejor ángulo que Esme haciéndola maldecirlo y gritar, el diablo, ya arto de tanto escandalo hiso que el cuerpo de Esme volara por los aires y atravesara varias paredes, provocando la furia de Astrid.

Habían pasado treinta segundos solo faltaba la mitad del tiempo y Astrid en verdad rezaba por que Sebastián lograra su prometido, entonces decidida y sin miedo a morir saco todas sus fuerzas para seguir lanzando ataques a Lucifer quien con mucha facilidad los esquivo, se acerco a ella de prisa y la tomo del cuello.

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