Capitulo 48

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JENNIE

El cuerpo de Lisa comenzó a temblar en el mismo instante que vio a ese hombre aparecer, mi fuerza del agarre en su mano se intensificó transmitiéndole todo mi apoyo, nunca en mi vida había sentido tanto rencor por una persona y eso que ni siquiera lo conocía, pero de solo ver la reacción de Lisa frente a él y de recordar las cosas terribles que me dijo Lisa que había pasado en su infancia por la culpa de ese hombre, me es inevitable no odiarlo, recorrí con mi mirada el rostro de aquel hombre, en efecto se parecía mucho a Lisa, su nariz y sus ojos era lo que más tenían semejante, pero aun así, en los ojos de él había algo por la cual se distinguían, la mirada del hombre alto y de cabello oscuro estaba extremadamente cansada, desgastada, sin brillo a comparación a la hermosa mirada de mi prometida, sus rasgos claramente más envejecidos, lo más probable es que se hayan deteriorado mucho más por el vicio del alcohol que Lisa me dijo que tenía.

-Yo...yo me quiero ir...- dijo en un momento Lili levantándose de la mesa rápidamente, tratando en todo momento de no mirar a la persona frente a ella, de inmediato copie su acción y me puse de pie a su lado.

-Lalisa... Por favor... Escúchame...- suplico con voz ronca, de inmediato sentí como Lisa se tensaba ante sus palabras y el como la llamaba- yo vengo a...-

- ¡No me importa!- Lili apretaba fuertemente sus puños a los costados de sus caderas, me dolía el alma y mi angustia crecía al verla de esta manera- Usted....no es nadie para mí- Lisa finalmente se atrevió a mirarlo a la cara para decirle tales palabras.

-Lis...por favor, el solo quiere hablar contigo- Intervino Cara a favor del hombre, Lisa la miro con el ceño fruncido, lo más probable es que se sienta realmente traicionada por la que creía su amiga.

-No puedo creer que te hayas prestado para esto...- no pude seguir manteniéndome al margen de lo que sucedía y le recrimine a Cara- Lisa realmente confió en ti...- espete con decepción, yo también había confiado de cierto modo en ella- se supone que eras su amiga...

-Y lo soy, por eso hago esto...- trato de disuadirme.

-¿Porque eres su amiga, ayudas al hombre que tanto le hizo daño a Lisa?- la mire incrédula.

-¿Jennie verdad?- se dirigió a mí el hombre con voz tranquila.

-¿Cómo sabe mi nombre?- lo mire con desagrado, Lisa a mi lado miraba atenta cada movimiento del hombre. -

-Yo...yo le dije, él quería saber algunas cosas de Lisa... - Cara agacho su mirada avergonzada ¡Lo que faltaba! no tan solo le ayudo para que él se encontrara con mi Lili, sino que increíblemente también le contó cosas de nosotras,

-Yo le pedí que me contara de ti Lalisa, la convencí para que me ayudara a acercarme y poder hablarte... Ella no hizo nada malo...- intervino el hombre - tenía muchas ganas de conocerte Jennie...- me miro con una leve sonrisa, que me pareció era genuina, se acercó unos pasos hacia mí con la intención de extenderme la mano en modo de saludo, me exalte por el movimiento repentino de mi prometida, antes de que el hombre llegara frente a mi ella lo interceptó, lo arrastró violentamente hacia una de las paredes del café, poniendo uno de sus brazos sobre en el cuello de él, inmovilizándolo completamente.

-¡LISA!- grite al ver como ese hombre era prácticamente ahorcado por mi prometida, todos los clientes del local miraban horrorizados lo que estaba pasando.

-¡No te acerques a mi familia!- Lisa estaba enajenada por el odio, su tono de voz y la mirada que le dirigía a su supuesto padre eran prueba de ello.

-Lali...la....- al hombre apenas les salían las palabras.

-Lisa por favor suéltalo...- Cara le suplico a Lili, pero ella no la tomo en cuenta, yo por mi parte estaba completamente pasmada, mirando más que sorprendida lo que sucedía, era la primera vez que veía a Lisa comportándose tan violentamente. -¡Jennie has algo!- el grito de Cara me saco de mi estado de estupor- ¡Lo va a matar!- volvió a gritar y era verdad, Lisa cada vez ejercía más fuerza en el brazo que tenía en el cuello del hombre, acorralándolo con toda su fuerza contra la pared, él claro, trataba de sacarse a Lisa de encima pero le era inútil, las palabras ya no le salían de la boca, daba pequeños golpes con la poca fuerza que le quedaba en el brazo de Lisa para aflojar el agarre y liberarse, su rostro se estaba volviendo de un color pálido y se notaba que sus pulmones se le estaban quedando sin aire. Un pánico enorme inundó todo mi cuerpo, mi corazón comenzó a latir fuertemente contra mi pecho, Lisa estaba realmente dispuesta a matarlo.

Todo por ti -  JENLISA GIPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora