RECLUSO (Katsudeku)

Capítulo 26

Izuku daba vueltas en la sala murmurando y fumando, la nota que le había dejado Shoto le preocupaba bastante.

Midoriya.. Saldré por un asunto que tengo que atender.. Por favor, no me esperes. Regresaré mañana temprano en la noche. Prometo explicarte después el porqué.. Anoté el número fijo de la casa de Uraraka, que es el lugar donde dijiste que te le ocultarías.. Te llamaré en caso de cualquier emergencia.

- Shoto

El pecoso se acostó en el sillón sobando su frente, aún no conseguía nada respecto a su madre, en su mente divagaban sus dudas y preocupaciones. Ya ni si quiera pensaba en..

Kacchan...

Izuku abrió los ojos abruptamente sin saber de donde se le había ocurrido aquel apodo.. Estresado se levantó apagando su cigarrillo y buscando algo para cenar. Se sentó y comenzó a a pensar de su vida, lo que recordaba y lo que no, realmente quería acordarse de todo lo que olvidó, porque era importante.

Quizás si Iida no lo hubiera salvado de ninguna manera habría sobrevivido, pero la cosa era diferente, ya que incluso estaba metiendo en peligro a Mitsuki Bakugo.

Trataba de aclarar sus nublosos recuerdos, tenía curiosidad y se sentía mal por Katsuki, al parecer ambos fueron importantes el uno para el otro pero su tonta cabeza y su subconsciente protector no lo dejaba . ¿Que debía hacer para recordar todo?

Suspiró y dandole un mordisco al sandwich que acababa de prepararse. Ni si quiera sabía si alguien allá afuera estaría preocupado por él..

Decidió acostarse a descansar y despejar su mente, pero simplemente no podía. Se esforzaba en aclarar las imagenes de su mente. Sus oídos escuchaban zumbidos y su propia voz mencionando en diferentes tonos la palabra "Kacchan", y múltiples imagenes aparecían en su cabeza. Su compañero de celda estaba quitándole el sueño. Necesitaba dormir y no podía pensando en el pelicenizo, en su madre, en donde rayos se había metido Shoto y en que Iida junto con Ochako están desvelandose por su culpa. Estaba desesperado..

Si no hubiera sido tan despistado.. tan idiota, tan.. inútil.

- ¡Deku!

La vaga vos de Katsuki retumbó en sus oídos, apretó los ojos y se retó a sí mismo a recordar esos 5 años perdidos. Cansado los abrió y se encaminó a beber un poco de agua. Odiaba estar así, sentirse tan débil. Recordaba aquellos extraños sueños, su yo mismo le decía que no quería recordar para proteger.

Pensó y se convenció de que tanto Katsuki como cualquiera que estuviera relacionado con él correrían peligro si se hacia pública la noticia de que era él Daga Verde. Pero al mismo tiempo quería recordarlo, en serio que si. Por primera vez en mucho tiempo se concentró en aclarar y acomodar sus visiones. Sentía que la cabeza le explotaría-

Como si se tratase de una película proyectada frente a sus ojos, comenzó a ver y recordarlo todo, claro como el agua. Una enorme sonrisa se ensanchó y se levantó de golpe revolviéndose el cabello. Su expresión era única, aún más al recordar esa noche, el beso, las balas, el llanto, gritos, tristeza mezclada con alegría. Melancolía..

- Hehe.. - rió maldiciendo su situación. Estaba extremadamente feliz, después de tanto tiempo y de tantos intentos..

- Kacchan.. - susurró a lo bajo, ahora sabía que debía decirle la verdad, pero no ahora, primero estaba su madre.

- ¿Izuku-kun? ¿Estás aún despierto? -Cierta castaña lo sacó de sus pensamientos, no dudó en acercarse a ella y darle un abrazo, la chica sorprendida y algo dudosa, correspondió con una agotada sonrisa.