¿Y si no te vuelvo a ver? ©

37. Ya me contó

¿Y si no te vuelvo a ver?

Capítulo 37.

—Especial Zenda—

Desde niña he sabido que la palabra perder no es nada aceptable para mí. No me gusta que nadie me gane, no me gusta que alguien más tenga lo que me pertenece. Soy capaz de destruir a cualquier persona por el simple hecho que quieran ser mejor que yo. Aquí no puede haber dos ganadoras, o soy yo o no lo es nadie.

Ayer durante la fiesta intenté de todas las maneras existentes hacer quedar mal a Cassie, y ni Darsy ni yo pudimos. La muy tétrica me golpeó dos veces y por más que me defendí ella parece más de barrio que de ciudad y por eso me sacó ventaja.

«La muy perra me tiene con la nariz hinchada y me duele todo. Ya me las pagará».

Antes, Gales me defendía a mí, podía ser culpable que siempre me defendía de lo que yo hacía. Parecía ciego ante mis encantos. Lo tenía a mis pies y quiero que vuelva a ser así. Está claro que haber regresado despertó muchas cosas en él y haré que me siga queriendo a mí y se olvide de Cassie.

—Así que tu absurda prima no llegó a dormir a tu casa.

Digo después de haber escuchado hablar a Darsy.

—Ya te dije que no. Llegó esta mañana acompañada de Gales, con una cara de haber follado hasta por la boca.

Resbalosa.

—Por lo visto me lleva ventaja.

—Hace rato. Siempre discuten y luego están como si nada. Gales se ve enamorado de Cassie y no creo que la deje por nadie. Menos por ti —Sarah deja de limpiarse las uñas—. Para mí que esos dos están pendejos el uno por el otro.

—A la única que Gales ama es a mí, no a la aparecida esa —le tiro el vaso de jugo que tengo en la mano a Sarah. Empieza a quejarse y la ignoro—. Gales no ha dejado de amarme nunca.

—¿Por qué tu obsesión con Gales? Si cuando lo tuviste contigo le hiciste daño —miramos a Hairéth. Ella no me cae muy bien, solo le hablo para saber más de Cassie—. Déjalo que sea feliz al lado de Cassie, tú lo tuviste y no lo valoraste. Él estuvo enamorado de ti por mucho tiempo, y tú por ese afán de tener una vida llena de libertinaje preferiste irte. No te metas en la vida de Cassie y menos en la de Gales.

—Espera, ¿desde cuándo los defiendes tanto?

—No estoy defendiendo a nadie, solo me parece de mal gusto que quieras arruinar su felicidad, Zenda.

—A ti te gusta Gales y por eso quieres quedar bien con él, quieres que me aleje para entrar tú y quedarte con él —bufo, mirando su cara—. Eres una golfa.

—No me quiero quedar con nadie. Gales me gustó en su momento, y quise hacerle daño a él y a Cassie cuando me sentí excluida, pero me di cuenta de que no vale la pena. Yo no merezco estar detrás de nadie, soy hermosa y le puedo gustar a otro chico.

—No seas ridícula.

—Mejor me voy, no quiero estar con un par de chicas que solo buscan hacer daño. ¿Vienes, Sarah?

Miramos a Sarah que acepta y salen de mi casa. Las dos son tan débiles. Las voy a destruir a ellas también.

—¿Tú también saldrás huyendo?

—No. Creo que entre las dos la que más odia a Cassie soy yo.

—¿Por qué no te cae bien si son primas?

Se toma un trago de la botella que está a su lado.

—Ella siempre tuvo lo que yo no, un papá que la adoraba, un novio perfecto, una amiga que lo daba todo por ella, una buena mamá y dinero. Cassie es de buena familia, por parte de su papá todos tienen buenos trabajos y enormes casas. Donde vive no es nada comparado con la casa donde vivía con sus papás. No sabes cómo disfruté verla tan mal cuando mataron a su papá y cuando me encontró en la cama con Yulian. Me sentía en la gloria.