Capítulo 10: "Condición"

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Hinata al darse cuenta que había dicho su nombre se cubrió la boca con ambas manos mientras Sasuke intentó no sonreír y se acercó a ella.

- ¿Qué pasa?

- N-Nada...solo que me perdí...

Ella habló tan bajo que no sabía si él la había escuchado, pero cuando lo miró él estaba sonriendo, rápidamente bajó la mirada avergonzada esperando que él dijera algo pero nada.

- ¿Quieres que te ayude a volver? -. habló Sasuke después de unos minutos observandola. No podía evitar querer burlarse de ella, sus reacciones eran graciosas. Era la primera vez que se divertía tanto después de mucho tiempo.

- S-Si...te lo agradecería mucho...

Hinata levantó la mirada para seguir a Sasuke de regreso pero se dió cuenta que él no se había movido de su lugar, por el contrario él caminaba pero en su dirección.

- Pero antes, tenemos que hablar de un pequeño detalle.

- ¿A-Ah si?

- Si, ¿sabes de que?

- No...

Ella retrocedió varios pasos al ver a esos ojos negros que le traían recuerdos de esa noche, recuerdos que  no había logrado olvidar, intentando disipar de su mente esos pensamientos siguió retrocediendo hasta que sintió su espalda chocar con la pared. Sasuke aprovechó y colocó su brazos en la pared apresandola y luego acercó su boca a su cuello.

- ¿Estas segura que no recuerdas?

- ...

Hinata podía sentir el aliento caliente del pelinegro chocar en su cuello. Sus mejillas comenzaron a sonrojarse nuevamente, e intentó alejarse rápidamente de él, pero Sasuke fue más rápido y la tomó del brazo. Le dió un corto beso en la mano y luego hizo una reverencia exagerada.

- Déjame presentarme de nuevo...mucho gusto. Soy Uchiha Sasuke, al que le pagaste por sus servicios sexuales.

Sentenció Sasuke con una sonrisa burlona que hizo que Hinata en ese momento quisiera desaparecer. Inconscientemente comenzó a jugar con sus dedos, algo había cambiado en ella desde que había conocido a ese hombre y ella lo sabía. Sus viejos hábitos habían vuelto en ese poco tiempo.

De seguro no dejo de pensar en él porque fue mi primera vez y eso es importante.


En ese momento recordó la conversación que había escuchado en ese hotel y se arriesgó a levantar la mirada.

Si él me llevó ahí...significa que debe estar algo relacionado con ello. Pero...

- Por favor no diga nada de lo que pasó entre nosotros...

- ¿Ahora si recuerdas?

- S-Si...pero...

No tengo el valor para chantajearlo pero si mi padre se entera, yo...

Con una mirada un poco más confiada, Hinata miró fijamente a Sasuke y habló sin dejar que su nerviosismo le ganará. 

- Si tú no dices nada...yo prometo no decir nada acerca de lo que haces en ese hotel...

- ¿Qué?

- T-Tu trabajo...

- ¿Qué trabajo?

- En el hotel...que trabajas con tu cuer-

- Ni lo digas. -. Esta vez fue Sasuke el que cubrió la boca de la peliazul con su mano impidiéndole seguir hablando, aún así para ella era su única opción y tenía que aprovecharla. Intento quitarse su mano de encima pero este segundos después la quitó de su boca y la colocó en su cintura atrayéndola a él. 

- Dices algo como eso nuevamente y esta vez no será mi mano la que te haga callar sino mi boca, ¿entiendes?

- ... 

- Buena chica. Ahora déjame explicar algo, yo no trabajo de...eso, ¿entiendes?

Hinata lo miró atreviéndose a dudar y Sasuke la observó con una cara de incredulidad.

- ¿Ahora dudas de mí? Mira, yo tampoco sabía que ese lugar era para eso. Yo sólo fui al bar por una copa y tú terminaste borracha, fui un caballero y te lleve al hotel que tampoco sabía que era un prostíbulo.

- ...

- ¿Sabes lo sorprendido que estaba al enterarme y más al despertar con tres cheques en la cama? 

Hinata al darse cuenta de la gran equivocación, quiso disculparse rápidamente pero notó que Sasuke seguía con sus brazos apoyados a cada lado de su cabeza. Intento hablar pero las palabras no salían. En ese momento sintió como el pelinegro comenzaba a jugar con un mechón de su cabello.

- Pero no te preocupes, eso lo hice gratis. Si sabes a que me refiero, ¿no?

Al terminar de hablar, Sasuke se alejó y Hinata sintió sus mejillas arder al darse cuenta de su error. Se sentía una tonta al pensar en chantajear a una persona con eso y más si eso ahora se sabía que era una mentira. Además la última frase que había dicho...

Ahora lo único que me queda es rogarle que no diga nada.

- E-Entonces...por favor, te lo pido...

- ¿Qué cosa?

- N-No digas nada..

- Oh, es cierto. ¿A qué padre le gustaría saber que su hija se emborrachó y luego...?

- P-Por favor...

Hinata lo miró suplicante y Sasuke sonrió ante la escena. Esa era un gran venganza pero aún así tenía otros planes con ella.

- No lo sé. ¿Sabes cuanto me ofendió saber que me trataste de esa manera?

- Y-Yo lo siento mucho...fue una equivocación. Te lo compensaré.

- ¿Ah si? ¿y cómo?

- Dime lo quieres, haré lo que sea.

- ¿Lo que sea?

- L-Lo que sea...

Sasuke la miró sin dejar de sonreír, se veía algo desesperada y él sabía por qué. Karin le había dado datos específicos de esa familia y sabía de las reglas a las que se atenía. Pero tampoco podía dejar pasar esa gran oportunidad.

- Esta bien.

- ¿Eh?

- Dije que está bien. No le diré nada a tu familia.

- ¿E-Enserio? Muchas gracias, yo...

- Pero con una condición.

- ¿C-Condición?

- Si.

- ¿Cuál?

Sasuke volvió a arrinconarla a la pared y colocó su mano en su mejilla. Ante el nerviosismo de Hinata, él acercó su nariz a la suya y susurró:

- Vuelve a pasar la noche conmigo.

Despertar contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora