Silbaba tranquilo anudando las correas de su fiel compañero en el poste del lado posterior a la taberna de aquel lugar que podía afirmar no era tan buena como la que había en casa. Mirando al pueblo ir y venir, no deteniéndose en ninguna persona en particular, esperaba encontrarse con Seokjin apenas la hora de encuentro se hizo presente en sus hombros.
Recibió algunas miradas de preciosas doncellas admiradas de ver al hombre más hermoso que sus ojos alguna vez vieron, Jungkook estuvo complacido de todas aquellas sonrisas coquetas.
Quizás en algún otro momento se detendría a conversar con ellas.
Se dio la vuelta para volver a dejar que su querido corcel bebiera a su antojo del agua que estaba en aquel sitio exclusivo para ellos y se recargo en la valla con los brazos cruzados.
Seokjin estaba tardando mas tiempo de lo planeado.
Antes de moverse para calmar sus piernas de los calambres que estaban amenazando con venir, pudo vislumbrar una extraña cabellera rosada y dio un salto en su sitio ansioso de molestar a Jin por quien de ellos habría conseguido el mejor regalo.
Su "extraño comportamiento" se disipo apenas miro tantas bellezas estructurales de High Mountain y recordó las veces anteriores que su familia y la de Jin, visitaban aquellos lugares.
Pero al ver a su mejor amigo siendo acompañado por otro chico que no conocía y verlo tan o incluso mas cómodo de lo que había estado con el, le hizo fruncir el ceño con confusión. Seokjin llevaba en sus manos algo que seria posiblemente lo que el había llegado buscando, Jungkook solo pudo mirar al flamante hombre que ponía una mano en sus hombros y le sonreía tan condescendientemente.
Seokjin no pudo ser consiente de su mirada persistente sino hasta que el rubio fijo sus ojos primero en el.
Y bajo todo su orgullo como el hijo prestigiado del sheriff mas honorable de Crystalline, se negó a hablar hasta que su mejor amigo estuviera a su lado.
— Jungkook, ¿conseguiste todo lo que buscabas?
La mirada ingenua del chico que había compartido muchas memorias consigo, causo que diera un gran suspiro y deshiciera su cruzar de brazos.
Era imposible enfadarse con Jin.
Normalmente sus pequeñas peleas no iban mas allá de unas palabras y tiempo lejos uno del otro, siendo como niños quienes al siguiente instante olvidaban sus disputas y seguían como si aquella molestia nunca hubiese sucedido.
— Lo hice. También tengo el obsequio de Junnie, ¿tu encontraste lo que querías?
— ¡Lo hice, lo hice! ¡A Jun va a encantarle! Ya quiero ver su linda carita cuando lo reciba.
— ¿Acaso es tan bueno? Anda, dime que es Jin.
— No quiero, es una sorpresa. M-mi nuevo amigo me ayudo a escogerlo, nunca lo habría visto de no ser por el.
Una vez que perdió de nuevo la atención de Jin de él, Jungkook pudo volver a mirar al rubio de pie a unos metros de ambos y sonriendo con encanto. Algo en ese chico le causo escalofríos en la espalda.
— Ha sido todo un placer compartir tiempo de calidad con una hermosa persona como tu, Kim Seokjin.
¿Quién era ese tipo?
El hombre de cabello carbonizado miro quisquillosamente el tono rosado de mejillas de su mejor amigo y se preguntó que diablos había pasado en su ausencia.
— Gracias Yoongi, espero volver a vernos pronto.
— Tenga usted por seguro que antes de que seamos consientes, el destino estará de nuevo uniéndonos.
ESTÁS LEYENDO
Tan lejano como el oeste; Kookjin
Teen FictionDonde hay una historia de AMOR, alguien decidió un día ser valiente... 𝑯𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂 𝒐𝒓𝒊𝒈𝒊𝒏𝒂𝒍 𝟏𝟎𝟎%, 𝒏𝒐 𝒔𝒆 𝒑𝒆𝒓𝒎𝒊𝒕𝒆𝒏 𝒄𝒐𝒑𝒊𝒂𝒔 𝒐 𝒂𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔. * GANADOR EN EL SHIPP KOOKJIN DE LOS YOUR AWARDS 2022 * Créditos t...