| Marvel One Shots |

Eddie Brock/Venom

Título: Halloween
Personajes: Eddie Brock/Venom
Advertencias: No one.
Parte uno.

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Mierda, como pesaba esto.

–¡Llegue!– Avise entrando atolondrada al departamento compartido con mi novio, intentando no aplastar ninguna bolsa.

–Hol..¡Wow!– Dijo Eddie acercándose y tomando algunas de mis bolsas.–¿Cobraste una herencia o que?– Rió apoyándolas en la mesa.

Yo cerré la puerta con mi pie y quite el cabello que se había colado por mi cara, solo para quedarme parada viéndolo formando un piquito con mis labios. Él sonrió acercándose a besarme.

–Hola mi amor.– Susurré risueña en sus labios.– Me falta un amor y está extrañamente callado.– Dije poniéndome sería. Eddie entorno los ojos y pronto su pálido rostro fue reemplazado por los suaves zarcillos negros que ya conocía. –¿Tengo que preguntar por ti para que salgas a saludarme? Alienígena mal educado.–Bromee saltando a abrazarlo. Él me abrazó de vuelta.

–Te extrañamos. Lamento no haber dicho nada, no se que sea ser mal educado pero suena feo.– Rei, amaba que no entendiera el sarcasmo pero ahora me había dado pena.

–Estaba bromeando.– Dije aún colgando de su cuello. Otra cosa que amaba era que él era como un maldito puf gigante.– No eres mal educado de hecho para no ser de e... ¡¿ESTÁS BUSCANDO CHOCOLATE EN MIS BOLSAS?! –Chille separándome al sentir como revolvía las bolsas con algún zarcillo, ya que sus manos seguían sosteniendome.– Ahora si estoy enojada, me estás usando de mercado de chocolate.– Comenté indignada separándome e intentando bajarme. Sin lograrlo ya que claramente tenía más fuerza que yo.

–Eres una persona no un mercado.– Dijo sin entender.– No entiendo, ¿Y porque te usaria? Nosotr....¿Que haces?– Pregunto interrumpiendose a sí mismo y mirándome hacer fuerza para separarme y bajarme de el.

–¡Me bajo indignada de este abrazo!– Respondí alejándome, aún sin lograr separarlo de mi. Él sonrió.

–¿Y que te lo impide?–

Abrí mi boca indignada, ahora se burlaba.

Alienígena atrevido.

–¿Te estás burlando de mi? Porque bien podría poner Baby de Justin Bieber a todo volumen y moririas entre terribles sufrimientos.– Amenace, sus manos me sostenían como un asiento en mi trasero y tenía dos zarcillos abrazándome por la cintura, asegurándose de que no me moviera de mi lugar.

–¿Asi? A ver.– Provocó aún más haciendo de abra nuevamente mi boca indignada.

–¡Eddie!– Chillé retorciendome.

–¡Perdón amor! Ya sabes cómo es él.– Dijo el nombrado dejando ver mitad de su rostro.

–Agh, estar enojada me agotó, ya no quiero jugar a la pelea marital.– Dije apoyándome contra su pecho. Sentí su pecho vibrar junto a su barítona risa. Él quitó los zarcillos pero dejo las manos en su lugar y camino hacia el lugar que más le gustaba del departamento. La ventana con vista a la ciudad tenía un sillón alrededor lo suficientemente grande como para que entrara él, o gran parte de el al menos. Se sentó conmigo en su regazo. Me acosté encima de él, sintiendo sus garras pasar suavemente por mí espalda. En silencio, amaba estas cosas. – Sigo enojada.– Mentí suprimiendo un bostezo.

–Mmh.– Apoyada en su pecho sentía su voz aún más profunda.–  Me gusta cuando estás enfadada.– Confeso y giré mi cabeza mirando hacia afuera. Vivíamos en un décimo piso por lo que no me asustaba que alguien nos viera. Creo que por eso le gustaba a él también. Era lo más cerca que estaba de estar afuera conmigo.