| Marvel One Shots |

Eddie Brock/Venom

Título: "¿Donde consigo un exorcista?" (Parte uno)
Personajes: Eddie Brock/Venom
Advertencias: Lenguaje!

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Un tono, dos tonos, tres, cuatro.

-Maldito, más te vale que me atien...- En ese preciso momento una voz masculina sono del otro lado.

-Hola Cher ¿Donde estas? Estoy esperándote hace como una hora y la verdad...- Sonaba agitado, estaba caminando era evidente. Lo interrumpí antes de que pudiera terminar .

Imbécil, hacia mas de media hora que estaba tocando el timbre de su apartamento.

- ¿A sí? Entonces debes haberte vuelto sordo porque estoy hace media hora esperando a que me abras la estúpida puerta- Grité entre dientes.

Bueno, el ahora no se movía, ni hablaba de hecho.

- Ah..... eh...-

Gran pensador mi mejor amigo.

Con derechos.

Algo así.

¿Es complicado?

-¿Algo para decir?-

-No quedaban papas fritas y tenía un antojo- Dijo rapido- Pero ya llego, de hecho ahi veo tu abrigo ¡Ay! Pero que hermosa y para nada peligrosa ni mucho menos enojada con tu gran amigo y probable.... amor de tu vida- Lo último lo dijo llegando a mi lado y finalizando la llamada-

Di un paso dispuesta a arrojarle mi bolso a la cara cuando se "atajo"

-TE COMPRE HELADO TAMBIÉN- dijo Mientras cerraba los ojos Y ponía sus manos hechas puños delante de su cara-

Bueno, podía pensar en perdonarlo.
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-¡Eddie! ¡Tu comida se va a enfriar si no vienes ahora!- Grité desde la cocina sirviendo su plato.

Había estado extraño todo el día, y esto no había empezado hoy. Primero su desaparición por dos semanas, no atendía mis llamadas ni respondía mis mensajes y cuando intente ir a visitarlo el departamento estaba lleno de policías y ni siquiera me dejaron pasar. Luego simplemente decidió volver a aparecer como si nada hubiera pasado bajo la simple escusa de que había estado enfermo y que su "fiebre" no lo dejaba atender el teléfono. Con respecto al departamento dijo que habían intentado robar pero que por suerte el no había estado ahí.

No, si, mi mejor amigo me cree idiota.

Decidí ignorarlo, ya que el no me diría la verdad, era evidente. Las semanas siguientes tampoco mejoraron tanto, Eddie se tildaba mirando un punto fijo como si estuviera escuchando algo o alguien y no sólo eso si no que a veces simplemente hablaba sólo. Y no hablo de simples preguntas sino de conversaciones enteras.

Deje lo que estaba haciendo para ver que era lo que tanto hacia Eddie, lo escuche hablar y de nuevo salieron mis nervios a flote, aunque no se lo dijera eso me ponía muy nerviosa. ¿y si hablaba con personas muertas? ¿Necesito un exorcista? Veré la película nuevamente para cerciorarme .

Me acerqué lo mas silenciosamente al baño, la puerta estaba entre abierta y si era lo suficientemente cuidadosa quizás podría ver con quien demonios hablaba.

Que no sea con su pito, que no sea con su pito, por favor Diosito.

Trague saliva y me asomé tras la puerta para primero oir lo que decía.

-¿Es chiste? ¿Cómo se supone que le diga eso? ¡Morirá del susto imbecil!- Murmuró mirando al espejo.

Frunci el ceño ¿Hablaba consigo mismo? ¿Eso era todo? ¿Y que cosa no le podía decir a quien?

Estaba dispuesta a girarme e irme pero de repente, una especie de gusano negro gigante, con alargados ojos y dientes afilados salió de su espalda para que luego, ambos se enfretaran.

Respire mi propio grito y me moví lo mas rápida y silenciosamente posible hacia atrás hasta llegar a la cocina.

Hubiese preferido que fuese su pito.

Me recargue en la mesada de la cocina y intente tranquilizarme principalmente.

¿Llamo a exorcista ya?

Cerré mis ojos con fuerza

¡¿Qué mierda era eso?!

Entre todo el maquineo mental que estaba teniendo recordé al bicho, me recordaba a algo.

Hacia unas semanas una foto de un supuesto monstruo se había colado en Internet. La piel negra y la lengua era lo único que recordaba de esa foto pero eran suficientes para entender.

Okey no, aún no entendía nada pero podía asimilarlo.

-¿Linda? ¿Comemos?- Pregunto Eddie saliendo del baño.

Salte del susto y me gire.

A QUIEN QUIERE COMER

Ah, el habla de la comida.

-Oh - Dije calmando mi cerebro de pensar y a mi corazón de tanto miedo- Si, Claro, comamos.

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