¿Todo es efímero? ANTIGUA VERSIÓN

4- LA FAMILIA PERFECTA

Al entrar a casa me di cuenta que mi madre ya había llegado del trabajo, últimamente llegaba muy tarde o muy temprano.

Nada más poner un pie en casa me sentía como si estuviera en una cárcel, o por lo menos mientras ella estuviera ahí.

—Leanny, tenemos que hablar —ni siquiera me saludó.

La seguí hasta la sala de estar. Ella se sentó esperando a que yo hiciera lo mismo, pero no lo hice.

—Leanny... Yo... Estoy conociendo a alguien. Es un buen hombre y... —No la dejé seguir.

—¿Y qué? ¿Pretendes que le llame papá?—Espeté.

No venía de buen humor, y enterarme de eso hizo que lo poco de buen humor que me quedaba desapareciera al instante.

—No, no pretendo que le digas papá, tú padre es quien es. Lo que pretendo es que por una vez en tu vida empieces a comportarte bien conmigo y lo que esté relacionado a mi. Me gustaría formar una nueva familia —Lo que me faltaba por escuchar...

Apreté tanto los puños que mis nudillos quedaron blancos—. Y a mi me gustaría que pasases más tiempo conmigo, que me trates como cualquier madre trataría a su hija, que no pongas a cualquier hombre antes de que a tu propia hija. Solo te pido que me quieras joder —Eso último se la había clavado en el corazón, y no pude evitar llorar .—¿Desde hace cuanto le conoces?

—Desde hace casi un año —¿Pero cómo lo podía decir tan tranquila?

—Papá... —murmuré, incrédula.

—¿Me estás diciendo que mi padre desapareció de tu vida por arte de magia? —dije entre dientes.

—Sabes perfectamente que siempre le quise —Se puso de pie poniéndose a la misma altura que yo.

—¿Como mismo me quisiste a mi? Y luego de un día para otro dejaste de hacerlo.

Nunca antes había sido tan dura con ella, pero en ese momento no me podía seguir mordiendo la lengua.

—¡Tú sabes perfectamente que te quiero!

—¡Pues demuéstramelo! Deja de fingir delante de todos que eres la mejor madre del mundo, y demuéstrame a mí lo buena que puedes ser, y quizás, algún día podré volver a confiar en ti. Pero si sigues con esta mierda me vas a perder del todo —Sentía que me faltaba el aire—. No te estoy diciendo que salgamos todos los días a comer, te estoy pidiendo que cuando se me venga el mundo abajo tú estés ahí conmigo, porque desde hace casi un año solo te he tenido a ti y tú no has estado. ¡Y no sé qué mierda de familia quieres...! —De repente todo se volvió negro y pesado.

—¡Leanny! —Fue lo último que escuché.

Despertar en una habitación de hospital y ver a Tyler jugando con su piercing hizo que pensase que estaba en el mismísimo infierno, pero luego vi a Bry con Jace y a Jayden con Dani. Mi madre no estaba sola, dos caras desconocidas, un hombre alto de pelo castaño y ojos verdes estaba parado al lado de mi madre, pasando su brazo por la cintura de ella, y al lado de ese hombre, una chica que aparentaba tener mi edad cruzada de brazos, tenía las mismas facciones que ese hombre así que supuse que era su hija al igual que supuse quien era él.

Pero lo importante no era eso,lo importante era saber lo que me había pasado. Primero estaba discutiendo con mi madre y luego estaba en esa habitación blanca.