Mi destino, eres tú. (Sesshomaru Y Kagome) (Sesshome)

Capítulo 5.

Mientras Kagome, comía con los niños, Sesshomaru, se acercó a ella con el plato en mano y Kagome, no necesitó que Sesshomaru, dijera nada para entender que Sesshomaru, quería un segundo plato de comida.
Kagome, solo lo observó por unos momentos para después tomar el plato de la mano de Sesshomaru, para servirle nuevamente de comer.

Al tener su plato nuevamente llenó, Sesshomaru, se dispuso a seguir comiendo, solo que esta vez se sentó mas cerca de Kagome y los niños.

Jaken, también quería un poco mas de comida y Kagome, notó que el pequeño Youkai verde no se decidía a acercarse a pedir mas comida, así que decidió llamarlo para servirle un poco más, después de todo, había preparado comida mas que suficiente.

-Jaken, venga por un segundo plato de comida- el Youkai por un segundo contempló la idea de negarse pero finalmente se acercó a la Miko y le tendió su plato. Kagome, le sirvió mas comida a Jaken y después de entregarle el plato, ella siguió comiendo regresando su atención a los niños.

Momentos después, Sesshomaru, se acercó por un tercer plato de comida y esta vez se ubicó mas cerca de Kagome y los niños, pero sin llegar a estar sentado juntos a ellos, aún.

Cuando todos terminaron de comer/cenar, porque con todo lo que habían caminado ya era tarde.
Kagome, comenzó a preparar las cosas para que pasaran la noche ahí.

Preparó dos fūtones juntos para que durmieran ella, Shippo y Rin, juntos fue por agua y por leña con los niños, siempre asegurándose de que ninguno de los dos saliera de su vista.

Sesshomaru, estaba atento a lo que sucedía en los alrededores.
Todo estaba tranquilo y solo un verdadero idiota iría a atacarlos sabiendo que el estaba ahí pero, era mejor estar alerta (como dicen por ahí, nunca falta algún pendejo...) en caso de que alguien con muy poca inteligencia y sentido de supervivencia, quisiera ir a atacarlos.

Mientras tanto, Sesshomaru, seguiría haciendo lo mismo que cuando se encontró con la Miko y su cachorro, cuando había ido por su cachorra al oírla gritar y había decidido que ellos los acompañaran.
Usaría su Youki y su aroma para cubrir el Reiky de la Miko y el aroma de la.Miko y el cachorro kitsune de ella.

La Miko y los cachorros, estaban comenzando a tardar en volver al campamento, así que decidió que lo mejor sería que fuera a buscarlos para asegurarse de que no estaban en problemas.
Él, era muy concierto de que la Miko de ropa extraña, atraía los problemas gracias a los fragmentos de la perla que llevaba con ella.

Él, aún no podía entender como es que todos los Youkais y humanos, eran tan estúpidos como para caer en la trampa de la joya maldita.
La perla, había intentado tentarlo pero él era Lord Sesshomaru, él no necesitaba el falso poder que prometía la perla, él era poderoso por naturaleza, era un orgulloso y poderoso Youkai por mérito propio.

Con Kagome y los niños:

Kagome, aprovechó que habían ido a buscar agua y que en su mochila llevaba ropa para Rin y para Shippo, a parte de la que llevaba para ella, para darle un baño a los niños y darse un baño ella.

Después de que llenó varias botellas con agua, les dijo a los niños que tomarían un baño y los tres entraron a darse un baño.
Kagome, se encargó de lavar el cabello de los dos niños primero y de que los dos niños se ejabonaran bien el cuerpo, después se lavó ella el cabello y se limpió el cuerpo sin saber que eran observados por el Lord del oeste.

Después de que los tres habían terminado de darse un baño y de que los niños jugaran un rato en el agua, salieron del agua para cambiarse de ropa, Kagome, cepilló el cabello de los niños, los peinó y después comenzaron a regresar al campamento.

Sesshomaru, que había ido a buscarlos para asegurarse de que estaban bien se encontró con que estaban llenando las botellas de agua para después los tres entrar al río para darse un baño.
Vio como Kagome, se encargó de lavar el cabello de ambos cachorros para después encargarse de el de ella.

Cuando los tres estuvieron aseados y era hora de que salieran del agua decidió que era hora de que el regresara al campamento para esperarlos ahí.

Cuando Kagome, regreso con Rin y Shippo, al lugar en el que acamparían, puso un poco mas de leña en la fogata y después arropó a los niños juntos a ella en los fūtones y después fueron a dormir.

Al día siguiente, se levantaron todos muy temprano para seguir avanzando, después de todo, Sesshomaru, también estaba en busca de Naraku y era seguro que encontraría mas fragmentos de la perla mientras ellos siguieran buscando al hanyou malvado.

Con Inuyasha y los demás:

Después de mucho tiempo, lograron llegar a la parte de abajo del risco para enamorarse con un río.

Sango y Miroku, inmediatamente se dirigieron río abajo, preocupados por Kagome y Shippo, ni siquiera esperaron a Inuyasha, que parecía indiferente a la situación.

Inuyasha, no tenía prisa por encontrar al detector de fragmentos y al mocoso después de todo los encontrarían tarde o temprano.

Kirara, iba siguiendo el rastro del aroma de ambos y finalmente se detuvo en un lugar en el que evidentemente había habido una batalla.

Encontraron un par de cráteres en la tierra, varios árboles destrozados y sangre, sangre con el pañuelo de Kagome y el listón que Shippo solía usar para sujetar su cabello.

Inuyasha, al llegar les dijo lo que ellos ya se imaginaban, que la sangre pertenecía a Kagome y a Shippo.
También les dijo que ya no había rastro de Kagome o Shippo, que indicara que ellos habían salido de ese lugar.

-Parece que no sobrevivieron- dijo Inuyasha- Y el aroma de Sesshomaru, esta por todo el lugar.

Sango y Miroku, estaban realmente muy tristes, por no decir devastados con la noticia.

Sango no pudo evitar romper a llorar mientras abrazaba a Miroku, quien a su vez tenía una expresión llena de tristeza por su amiga y el pequeño Shippo.

Inuyasha, estaba muy molesto, Kagome era su detector de fragmentos y sin ella su búsqueda se complicaría mucho por que dudaba que Kikiyo, quisiera ayudarlo.
Si no se hubiera confiado y se hubiera dado prisa en encontrarlos al igual que Sango y Miroku, probablemente no habrían acabado muertos y su plan no se vería afectado, pero ya era tarde. Buscaría otra forma para encontrar los fragmentos de la perla y acabar con Sesshomaru, al decir que su aroma estaba por todas partes, se había asegurado de tener la excusa perfecta para acabar con él.

Lo culparía de las muertes de Shippo y Kagome y nadie lo detendría para exterminar a Sesshomaru.

Continuará...

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Otro capítulo más de esta historia.

Espero que les guste.
Gracias por leer.
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Les mando un abrazo.
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