SIEMPRE HAS SIDO TÚ (Saga Gemel@s)

Capítulo 16

-Alice, ¿Estás segura de que no tienes problemas con quedarte sola? – Pregunta su madre preocupada – Puedo quedarme contigo si lo prefieres.

-Mamá, Nana Lilly va a estar conmigo – Le recuerda – Así que no te preocupes por mí, voy a estar bien – Trata de tranquilizarla.

-Alice, pero…

-Mamá, esa reunión es muy importante – Insistió – Asistirán todos los Alphas de la región, y sabes que no puedes faltar.

-Sí, pero odio dejarte sola – Dice enfurruñada – Aunque tu hermano no debe tardar, él sabe que quedas sola en casa.

-Mamá… – Le reprocha.

-¿Qué? – Pregunta inocente.

-Puedo quedarme sola, no debiste molestar a Alec, él debe estar muy ocupado ahora que ha empezado a integrarse en la empresa – Se queja.

-No digas tonterías, no es ninguna molestia – Le habla como si fuera una niña – Alice, recuerda qué sí necesitas algo, puedes llamarme en cualquier momento, por la marcación por voz de tu celular.

-Sí, mamá lo sé – Rueda los ojos.
En ese momento su padre entro en su habitación, la abrazo efusivamente y después de darle miles de instrucciones, y de despedirse de ella, se llevó a su madre consigo.

Cuando sus padres se fueron ella se quedó sola en su habitación, su Nana había ido a verla después de que ella salió de la ducha, y habían conversado por un largo tiempo, pero había regresado a la cocina en busca de unos bocadillos.

Alice se encontraba muy ansiosa, esa mañana había despertado y Razvan ya se había ido, como era habitual, pero sentía que algo andaba mal, hoy en especial se sentía más ansiosa de lo normal, no sabía a qué se debía, pero se lo atribuía a qué la noche anterior, él parecía estar un poco tenso, como si le preocupara algo.

Sin querer darle mucha importancia se levantó de la silla de su tocador en busca de su celular – lo había dejado en la mesa de noche mientras se daba un baño – Cuando una sensación extraña se apoderó de su cuerpo, tenía la sensación de que había alguien más en su habitación.

-¿Quién está allí? – Preguntó a la nada, pero el débil olor de Razvan llegó hasta a ella, y sonrió, pero su sonrisa desapareció al notar el olor de alguien más.

-¿Sabes…? – Preguntó una voz, detrás suyo, haciéndola estremecer.

-¿Quién es usted? – Pregunta confundida, sabía que era un vampiro, su olor le era familiar.

-Muy buena pregunta, pero no la contestaré, lo que si te haré saber es que te metiste en el camino de la persona equivocada.

-No sé de qué me habla ¿Qué hace aquí? – Pregunta a la defensiva.

-Aún no logro comprender qué fue lo que él vio en ti – Dice como si no la hubiera escuchado – ¿Como una perra sarnosa como tú, logró captar su atención?

-Es una estupidez que haya venido hasta aquí – Dice encarándola enojada – ¿Qué es lo que quiere? ¿A qué ha venido?

-Vine a decirte qué todos esos esfuerzos que haz hecho para alejarlo de mí, no te han servido para nada – Dice paseándose delante de Alice, con una camisa de Razvan, queriendo que notara el olor de su amado.

-No sé de qué habla – Frunce el ceño, al sentir el olor de Razvan sobre ella o eso era lo que quería hacerle creer.

-Como sabes, Razvan y yo hemos estado juntos durante mucho tiempo, desde mucho antes de que tú nacieras – Le aclara – Nuestra relación ha pasado por muchos altibajos, pero hemos decidido arreglar todas nuestras diferencias, casarnos e irnos juntos devuelta a Rumania, de dónde nunca debimos salir.