°Tus ojos cuentan una historia°

capitulo 34

Cristina estaba metida en la cocina viendo cómo su madre y Vicenta terminaban de cocinar, a momentos su mirada se perdía viendo fijamente la pared, pensaba en Federico y en como la vida se había encargado de castigarlos talvez como una manera de cobrar toda la felicidad que les había dado por años...

Cons: Cristina...— interrumpiendo los pensamientos de su hija

Cris: ¿Si?

Cons: No ha llegado María del Carmen...

Cris: Debió haberse quedado platicando con Romina, ya sabes que a veces lo hace...

Cons: Ya deberíamos servir la comida para que Federico se tome su medicamento.

Cris: Si mamá, de todas maneras mi hija no debe de tardar, voy por el para traerlo a la mesa...

Cristina entro al cuarto de Federico y lo encontró sentado en el mismo lugar donde lo había dejado, por supuesto...

Cris: Es hora de comer...— tomándolo del brazo— vamos...

Fede: ¿En serio vaz a estarme llevando así a todo los lugares?— levantándose de la silla

Cris: Si, hasta que tú te puedas mover solo

Fede: Quiero un bastón...— afirmó

Cris: ¿Que?

Fede: Que quiero un bastón, no quiero que tú me estés llevando a todos lados como si fuera un niño...

Cris: Pues si lo quieres te lo consigo, pero mientras sigas con la pierna así aunque no quieras voy a tener que llevarte yo ya que no quisiste la silla de ruedas

Fede: ¿Dónde está mi hija?

Cris: Aún no llega...

Fede: A está hora ya debería haber llegado de la escuela.

Cris: Si, pero aún no lo hace, debió quedarse platicando con Romina

Fede: Yo creo que se trata de algo más, últimamente hace cosas muy raras...— llegando a comedor

Cris: Pues yo creo que no, es normal que a su edad este conviviendo más con sus amigos...—abriendo la silla para que el se sentara

Poco después de que la comida se sirviera apareció María del Carmen gritando feliz de ver a su padre, el le respondió con la misma felicidad y la cuestionó del porque había llegado tarde, por supuesto con sus celos comunes de padre de una adolescente

M. Del Car: Estaba con Romina papi—sentándose a la mesa

Cris: Ves Federico, te lo dije...

Cons: La próxima vez llama y avísanos que te vaz a tardar un poco.

M. Del Car: Ni siquiera me di cuenta de a qué hora nos pusimos a platicar abue...

Fede: Hija, quisiera pedirte que después de que comamos me acompañes afuera a las caballerizas con los caballos, quisiera decirle algunas cosas a los caballerangos acerca de cómo los deben estar trabajando a partir de hoy

M. Del Car: Claro que sí papi...—sirviéndose agua

Cris: Federico, yo considero que sería mejor que no estuvieras caminando tanto...

Fede: Y yo no recuerdo haber pedido ninguna opinión.— respondió groseramente

Cristina agachó la cabeza avergonzada ante su madre y su hija por la respuesta de Federico e inmediatamente el ambiente se llenó de incomodidad hasta que terminar de comer..

M. Del Car: Voy a quitarme el uniforme y bajo por ti papi— levantándose de la silla

Cons: Y yo me voy a recostar un momento a mi cuarto, con permiso...— también levantándose la silla