Podía sentir la intensa mirada de aquellos cuatro tipos que tenía en frente, los mire detenidamente, cada uno tenía rasgos diferentes, dos de ellos tenían un pequeño parecido, sus ojos color morado intenso hacia que mi piel se erizara con tan solo verlos, aunque uno de ellos se veía un poco más serio y seguro de si mismo a comparación del otro que tenía una sonrisa de superioridad en su rostro.
-Sabía qué te encontraría-habló nuevamente el tipo mas bajo que tenía en frente.
Su apariencia no era para nada elegante, tenía una mirada oscura con ojeras que cubrían la parte baja de los ojos, llevaba cabello blanco a la altura de las mejillas. Mientras más lo observaba mas me hacía recordar a mi hermano, pero eso era imposible, el había muerto cuando yo tenía 6 años. Lo habían asesinado.
-Cuando me enteré que tenía una hermana- comenzó a contar aquel tipo. Se distancio un poco de mi y comenzó a caminar lentamente por el lugar.
Podía sentir el frio aire de aquella sala, me encontraba solo con un vestido blanco lo demás había desaparecido.
-Sentí envidia y enojo. Como podía ser que alguien tan miserable como tú... -sacó un arma y la puso en mi cuello, podía sentir como el frio del arma acariciaba mi piel lentamente. comenzó a subir el arma hasta mi mejilla y se detuvo ahí.
Los tipos de atras solo observaban con atención aquella situación, uno de ellos estaba con los brazos cruzados y sonriendo, su mirada encima de mi parecía cual gato tratando de cazar a su presa.
El tipo del arma me dio un leve golpe en la mejilla dejando una marca roja en aquel lugar, subio el arma lentamente para posicionarla en mi cabeza. Dio me dia vuelta, soltó un pequeño suspiro y luego se giro para tomar mi cara con una de sus manos libres y con la otra mano apoyar el arma en mi frente.
-¡SEA UNA INÚTIL! ¡POR ESO SHINICHIRO TE DEJO ABANDONADA!- Todos comenzaron a reír.
-¿Sabes?- Acercó su cara a mi.- en este preciso momento no dudaría ni un puto segundo en matarte.-sonrió.
-Puedo hacerlo por usted jefe.-dijo un tipo alto y delgado, al decir aquellas palabras sus ojos brillaron como si de una noche estrellada se tratara, el tipo acariciaba una katana plateada y dorada.
-¡CALLATE!- el ambiente estaba tenso, no podía hacer nada más que observar y aceptar lo que tuvieran decidido para mi aquellos tipos.
-Pero-siguió hablando el tipo mientras cargaba el arma.- Te haz salvado. El maldito de Shinichiro te salvo, por ahora.
Tiro el arma al suelo, eso me calmo por unos segundos hasta que sentí su fría mano pasando por mi cuello y adentrarse en la parte de atrás de mi cabeza para luego posar su mano en mi pelo y tirarlo hacia atrás. Solté un pequeño gemido de dolor, ya que había tirado muy fuerte.
Comenzó a mirarme fijamente, cada parte de mi rostro, mis ojos, mis mejillas que ahora debían estar rojas por el roce anterior del arma.
El tipo quitó la tela que cubría mi boca.
La luz que se filtraba por la ventana que había arriba de la sala hacía que esta situación se viera cada vez mas tenebrosa. Dos de los cuatro tipos que habían se posicionaron a cada lado del que identifique como su jefe.
-¿Quién eres?-preguntó serio.
¿Quien soy yo?
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Capítulo cortito porque se viene bueno:) Recuerden votar así no me siento solita:(
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MY THREE DEITIES (𝐻𝑎𝑖𝑡𝑎𝑛𝑖'𝑠 𝐵𝑟𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟𝑠 & 𝑆𝑎𝑛𝑧𝑢) (+18)
FanfictionDesde ese día sabia que mi lugar no era aquí, pero aún así quise arriesgarme, no podía hacer nada mas que obedecer a aquel hombre, es más, fue él quién me adentro a ellos, fue él quién hizo que todo esto se convirtiera en una peligrosa y extraña obs...