MY THREE DEITIES (𝐻𝑎𝑖𝑡𝑎𝑛𝑖'𝑠 𝐵𝑟𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟𝑠 & 𝑆𝑎𝑛𝑧𝑢) (+18)

Trato

Estaba lista.

Suspiré frente al espejo que tenía, hoy sería trasladada al lugar que solía visitar Ronin.

Ran y Rin mencionaron que la mejor forma de llegar a él era llevándolo a la cama y para eso debía acercarme aunque fuera para hablar.

-Llegarás a la barra y estará nuestro bartender de confianza... Asahi por favor recuerda bien esto.-decía Ran.

-No la presiones, idiota.-Rin se encontraba a un lado de su hermano con los brazos cruzados, Rin se acercó a mí y me dio un anillo.

-Te vamos a estar rastreando desde aquí-decía mientras ponía el anillo en mi dedo- el bartender te dirá la clave y es ahí cuando debes hacer tu trabajo.

Ran estaba serio y podía notar el miedo en su mirada en cambio Rin estaba mas tranquilo, sabía que esto sería fácil, no había nada que pudiera complicar las cosas.

-Si haces bien tu trabajo pequeña-susurro Ran en mi oído-recibirás una grata recompensa.

Al tener aquella charla con los Haitani's ya me encontraba lista para ir a aquel bar.

-No piensas ir con esa ropa... ¿O si?-dijo aquella chica saliendo de una de las habitaciones de la mansión de Bonten.

-Deja de molestar y ve a terminar de chuparsela a otro.-le respondió Ran a la chica.

-Siempre haz sido tan esquivo conmigo Ran Haitani-se acerco la chica a nosotros.-No como tu hermano.

-Basta Sumi.-la calló ahora el menor de los Haitani's-Sirve para algo bueno y ayúdanos ¿Quieres?

-¿Me darás algo a cambio?-Por alguna razón Rin me miró y luego miro a Sumi.-bien, entiendo. Oye tú Kurokawa, ven conmigo.

Ran me guió hacia ella y entramos a la que sería su habitación. Al estar dentro pude notar que era demasiado bonita, tenía decoraciones en dorado y rojo, una tenue y sensual luz nos iluminaba y olía suavemente a dulces.

-Ustedes dos pueden irse.

-Ha! ¿Crees que te dejaré sola con Asahi?-Ran se puso entre Sumi y yo.

Sumi tomó mi brazo y me halo hacia ella ignorando a Ran.

-Ya vete Haitani.

-Tks... -Ran se giro enojado, al parecer no le había gustado la idea de que Sumi estuviera cerca de mi. Algo me dice que el mayor de los Haitani sabía que cosas de las que yo no me he enterado aún.

Rin imitó a su hermano y lo siguió atrás.

-Par de idiotas.-Sumi que se cruzó de brazos comenzó a avanzar por la habitación, le seguí el paso sin bajar la guardia, no la conocía bien y el hecho de que quisiera ayudarme era extraño.

-Veamos con que le puedes gustar a Ronin.-dijo mientras sacaba prendas de su closet y me las lanzaba.

-Tu... ¿lo conoces?-tenía demasiada ropa sexy en los brazos, me acerque a su cama donde deje caer todo lo que ella me había lanzado.

-¿A Ronin?-se giro para mirarme.- ¡Ha! Pequeña... llevo mas tiempo que tú aquí ¿y te atreves a preguntar eso?-la mire confundida, sabía que llevaba más tiempo que yo aquí pero no sabía con qué intenciones la trajeron aquí.

-Mhm...

-Ronin fue mi cliente por un tiempo...-comenzó a contar mientras buscaba mas prendas- En todas las fiestas que Bonten organizaba le suplicaba a Kakucho que lo dejara conmigo.

¿Kakucho?

-Me fui ganando su confianza...-un pequeño silencio se generó entre nosotras.-pero eso es pasado ahora.