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Viernes 20 de Agosto de 2021, Mikonos.
Narra Camille:
Aún no podía creer que las vacaciones de Lando se estaban terminando. Parecía ayer que estábamos los dos ansiosos en el aeropuerto de Londres por querer viajar y hoy, nos encontrábamos reacomodando nuestras valijas para regresar a casa.
Largué un gran suspiro mientras terminaba de guardar las últimas prendas bajo la atenta mirada de Lando, el cual no tardó en romper el silencio.
− ¿Qué ocurre Cam? – preguntó mientras se recostaba aún más en la cama.
−Nada, simplemente me gustaría detener el tiempo y quedarme acá... con vos
Hice en el medio una gran pausa para soltar el resto bien bajito, como si eso provocara que las palabras salieran con algo de anestesia.
−Ven acá
Me dijo mientras palmeaba la cama y abría los brazos para recibirme, para luego rodearme fuertemente con ellos pegándome a su pecho.
−Estos días fueron...
−Hermosos – hablé sin darle lugar, para ser yo quien completara la frase−Gracias Lando – agregué mientras me aferraba aún más a su pecho.
−Gracias a vos bonita– dijo mientras no dejaba un solo lugar de mi cabello sin acariciar −A mí también me gustaría detener el tiempo, pero también sé que es imposible escapar tan fácil de las obligaciones...
−Si lo sé.... –Traté de hablar pero ahora era él quien me interrumpía.
−Pero eso no quiere decir que no podamos encontrar un balance y disfrutar de todo
−¿A qué te refieres? – pregunté mientras jugaba con mis dedos sobre su abdomen.
El se levantó un poquito provocando que yo me despegara levemente de su pecho, para luego ver como estiraba su mano hacia la mesita de luz y sacaba un sobre de ella. Se terminó de incorporar haciendo que ambos quedáramos sentados en la cama mirándonos frente a frente y así, sin romper el contacto visual, colocó el sobre en mis manos para luego hablar.
−Me refiero a que a partir de hoy no quiero que nos perdamos de disfrutar nada por las obligaciones o por el que dirán... así que solo abre el sobre
Aparte mi mirada de la suya para concentrarme en el gran sobre blanco, lo abrí sin dudarlo para encontrarme con otro sobre adentro. Mi cara de confusión se presentó rápidamente pero así como llegó también se borró al ver la frase que en él estaba escrita
"¿Me acompañas en este viaje?"
Y así sin dudarlo más, me decidí a abrir el resto del paquete para sacar de él un pase del paddock con mis datos y fotografía en él.
