"Creo que me enamore Deidara sempai"

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— "Nadie decide de quien enamorarse"

El chico rubio alzo la mirada avergonzado y vio como el de cabello oscuro empezaba a llorar, pero de la felicidad, iban a tener un hijo... ¡Iban a ser padres! Obito nunca se imagino esto, siempre pensó que nunca se volvería a enamorar.

Probablemente algunos piensan que Obito siempre fue así de duro y cruel, sin embargo, él desde muy pequeño tenia metas. Fue practicante de policía, aunque nunca destaco, sin embargo siempre se esforzó y dio lo mejor de si para lograrlo. 

— Ni siquiera puedes dar al blanco –indico Kakashi agarrando un arma y dando dos tiros precisos.

— ¡Bien echo Kakashi! –animo Rin sonrojada.

El de cabello oscuro, siempre quiso que Rin lo viera con otros ojos, eran amigos, pero Obito sabia que Kakashi era dueño del corazón de aquella chica, como dolía saber eso y tenerlo presente.

— Yo podría hacerlo mejor... –susurro Obito molesto.

— Te escuché –respondió Kakashi sin mirarlo.

— ¡No me importa que me hallas escuchado Bakakashi! –exclamo molesto.

Rin se dirigió a Obito y le dijo que son compañero y que no deberían pelear. Este suspiro y se disculpo, ella tenia razón... son compañeros y deberían protegerse.

Por eso, aquel día que Obito vio morir a Rin a manos de Kakashi, este juro vengarse y hacer que el de cabello peli-gris se arrodillara frente a él, para hacerle pagar todo lo que había echo... bueno, fue así hasta que conoció a Deidara...

— ¡Ya te dije que soy hombre! –grito molesto el rubio.

— No me grite Deidara-senpai, no ve que lastima mi corazoncito –dijo agarrándose el pecho.

Sin sopórtalo más, este lo tumbo y empezó a ahorcarlo con sus piernas. Obito pedía perdón, pero fue en vano, aunque Deirara paro después de un rato, ya que Obito le había rosado sus partes intimas, lo cual le provocó un sonrojo.

— No entiendo porque el jefe me puso contigo... hubiera preferido estar con Itachi o Sasori... 

Esas palabras, molestaron un poco a Obito. Él solo fingía ser un idiota porque estaba infiltrado, pero de todas formas no le gustaba que su compañero Deidara dijera eso.

— ¡Que malo es Deidara-sempai!

Y así fue como empezó todo, cada vez se volvieron mas unidos y en varias ocasiones, se notaba que la atracción era mutua. El amor estaba prohibido y cuando Obito se volvió jefe lo sabia, pero amaba a Deidara y decidió tomar el riesgo.

— ¿Qué pasa Tobi? –pregunto Deidara mientras le limpiaba las lagrimas.

— Creo que me enamore Deidara-sempai... 

El nombrado se sonrojo y lo llamo idiota... su idiota, los dos estaban tan felices y a la vez asustados, pero para su mala suerte, probablemente su historia no será un final feliz... en el mundo de la mafia siempre alguien sale muerto...

Por otro lado, Mizuki llevaba días encerrado, sin embargo su estadía duro poco pues, alguien lo había liberado. Mizuki al salir, vio a un chico de cabello rojo en las afueras de la cárcel. ¿Quién es? se pregunto y fue a interrogarlo.

— Soy parte de los ingredientes.

Fue lo único que respondió. Mizuki sabia lo que significaba y tomaron un taxi para conversar en otro lugar, pero Mizuki pidió que se detengan, ya que a los lejos observo al niño de cabello rubio, con el hermanito de Itachi, eso si que era tener surte para él, pero no para aquellos niños.

— Mierd@... –susurro Sasuke al ver como Mitsuki se acercaba a ellos.

Naruto lo vio confundió, pero el de cabello oscuro le agarro la mano y salieron corriendo. Al ser mas pequeños, sus pasos no eran rápidos y Mitsuki ya estaba cerca, sin mas opción, entraron por la ventana de cualquier casa.

— ¿¡Sasuke que esta pasando?! –pregunto molesto el de ojos azules.

El mencionado le tapo la boca y le hizo una señal de que se callara, este hizo caso y se mantuvieron en silencio. Ya pasando 10 minutos, Sasuke se tranquilizo y le dijo a Naruto que ya los empezaron a buscar.

— Sasuke debemos encontrar a Iruka, el sabrá que hacer –afirmo Naruto.

— ¡Naruto!

Grito una señora que los vio en su casa. El de cabello oscuro se asusto, pero el nombrado, fue a darle un abrazo a la señora ¡Era Anko! Sin darse cuenta, estos lograron llegar a casa.

— ¿Dónde esta Iruka? –pregunto desesperado el pequeño.

— Ya no te preocupes Naruto, el se fue a la escuela, ya que estuvo faltando por buscarte, pero ahora estas aquí y no te pasara nada.

Mientras Anko abrazaba a Naruto, Sasuke se puso triste, ya que su hermano le había dicho algo parecido.


Perdón por la ortografía y redacción, pero tengo sueño XD

El chico nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora