¡Que difícil es ser hermano mayor!

Nie HuaiSang y los dramas. 3.49

Dicen que cuando te dedicas a algo que te gusta mucho, puedes perder interés o simplemente puedes llegar a sentirte completamente vacío, presionado, e incluso, estresado.

HuaiSang jamás creyó que experimentaría un "bajón", a este punto de su carrera.

No tenía ganas de nada.

Su humor estaba por los suelos.

Jamás se había aburrido tanto en la lectura de un guión, aunque no podía definir esta amarga sensación como aburrimiento.

En algún punto, las cosas que solían gustarnos, se tornan agobiantes, como si te ahogaras en el océano, sin nadie al rededor que pueda ayudarte.

—¿Señor Nie?—HuaiSang salió de sus pensamientos y comenzó a leer la parte que le indicó el miembro del staff—ciertamente, señorita, mi joven maestro es muy tímido como para mostrarse cariñoso con usted. Él necesita tiempo—se detuvo ahí—continúe—mencionó su co-estrella—claro—se concentró lo mejor que podía—él necesita tiempo, tiempo para asimilar que ambos están comprometidos, para pensar en el bien que le hace al clan esta unión—la actriz sonrió y comenzó a leer su diálogo.

Tiempo.

Hace algunos meses que había visto Rocketman, la película que se basa en la vida de Elton John, y aunque, a diferencia de él, HuaiSang no abusa de sustancias o sufre ataques de ira, aprendió, gracias a ese filme, que, en ocasiones, está bien darse un descanso de todo.

Puede que actuar le guste, pero, a medida que se hacía más famoso, más sofocado se sentía, y mientras más sofocado se sentía, menos ganas le daban de trabajar.

. . .

—¿Por qué no has comido?—menciona XuanYu, observándolo, haciendo que salga de su burbuja—estaba pensando—XuanYu suspiró—¿y en qué estás pensando?—HuaiSang jugó un poco con su comida—posiblemente, me tomaré un tiempo fuera de la actuación—XuanYu dejó de comer—¿hablas en serio?—parecía que estaba más confundido que sorprendido.

—Hablo en serio, me tomaré un año de descanso de la actuación, después de éste drama—XuanYu asintió—vaya, ¿sabes, cariño? Mi papá me llamó hace una hora, pero estaba tan ocupado cocinando que se me olvidó, así que, ahora vuelvo—se levantó de la mesa.

. . .

XuanYu suspiró, se sentía un poco mal por alegrarse al escuchar eso.

Posiblemente, para él, que HuaiSang se tome un descanso es bueno, porque así, tendrá mas tiempo para estar en casa con él y con Kuaile.

Sin embargo, le preocupaba que ese descanso se volviera una renuncia permanente.

Que en realidad, sea algo más que un descanso.

. . .

HuaiSang levantó los platos y los dejó en el fregadero, observó a XuanYu, quien estaba sentado en la cama, con la mirada perdida.

¿Acaso había sido algo malo?

. . .

¿Acaso HuaiSang se sentía mal?, ¿no se sentía cómodo estando en las filmaciones?, ¿ya no quería actuar?

Si es un descanso, entonces no hay de qué preocuparse.

Pero, si no lo es...

¿Acaso HuaiSang ya no tenía interés en los dramas?

. . .

HuaiSang se sentó en el sofá y se puso a leer el guión.

Su personaje, era simple, un sirviente que sólo habla cuando es requerido, pero, que es parte del triángulo amoroso.

Aunque eso se revela al final.

—Señorita...—dejó de leer después de una palabra, lo haría después.

. . .

XuanYu se preocupó aún más cuando sólo escuchó una palabra salir de la boca de su esposo, observándolo arrojar el guión a un lado.

Se revolvió la cabeza, posiblemente este sobre pensando las cosas otra vez, posiblemente sea sólo un descanso, tal vez su esposo se había hartado de los papeles del chico secundario.

Sí, eso debía ser.

Oh...

. . .

HuaiSang suspiró.

Sólo era un bajón, pero, ¿por qué ya no sentía lo mismo que la primera vez que grabó un drama?

Aquella adrenalina combinada con nervios, aquella euforia, aquel sentimiento de vergüenza porque cada persona que lo conoce lo verá en la televisión.

¿Por qué había dejado de sentirlo?, ¿por qué todo se tornó gris?, ¿por qué se sentía tan agotado?, ¿por qué parecía ser que se ahogaba?

Unos brazos delicados lo rodearon en una suave y casi fugaz danza, y unos segundos después sintió los cálidos labios de esa persona en su mejilla.

—Si quieres tomarte un descanso, está bien, yo te apoyo—le sonrió—gracias, A Yu—XuanYu suspiró y lo observó—sólo, no quiero que ese descanso se vuelva permanente—menciona—me preocupa que, de la nada, dejes lo que más te hace feliz sólo por una mala experiencia o un mal sentimiento...está bien descansar, está bien retirarse, pero no está bien rendirte—HuaiSang no dejó de sonreír, aún si tenía lágrimas en sus ojos.

—¿Por qué lloras?—estaba sorprendido—sólo estoy feliz—mencionó—¿de qué?—.

—De haberme casado contigo—.

XuanYu simplemente le sonrió.

—Yo también estoy feliz de haber aceptado casarme contigo—.

—Aunque, ¿sabes?—HuaiSang le besó la mano—actuar no es la única cosa que me hace feliz—XuanYu levantó una ceja con su sonrisa intacta—¿Y qué más te hace feliz?—.

—Tú—.

Aún si ya no sentimos lo mismo que sentíamos al comenzar  con lo que más nos gusta, siempre habrá algo que nos gustará más, y que nos recordará el porqué seguimos de pie, el porqué seguimos ahí, y nos motivará a seguir adelante.

Si te sientes asfixiado por aquello que solía gustarte; Está bien si te tomas un descanso, está bien si te retiras...pero no está bien si te rindes.

HuaiSang se levantó, rodeó el sillón y abrazó a XuanYu, dándole un beso en la sien.

Si había algo que le gustaba más que actuar, eso era, amar a Jin XuanYu.

Y jamás se cansaría de hacerlo.

Jin XuanYu es su mayor motivación para no dejarse caer ante sus propios demonios, así que, se aseguraría de no rendirse, por él y por el futuro de ambos.

Y Kuaile, que estaba un poco más interesado en comer su manzana que ver a los humanos interactuar.

¡No te rindas, Nie HuaiSang!