Wei Ying es mi princesa.

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Lan WanJi adoraba las películas de Disney y adoraba los cuentos de hadas. Además de que eso le hacía olvidar asuntos como la muerte repentina del Señor Tuzi.

Veía Cenicienta, por alguna extraña razón, todas las versiones de Cenicienta le encantaban, incluso la historia original, omitiendo los detalles sangrientos, claro. Según su tío la venganza nunca traía cosas buenas.

Como cuando la pareja de su tío se peleó con una señora por una bolsa de arroz en el mercado agrícola.

Nunca olvidaría esa ocasión, era chistoso que su tío regañara a su pareja por ser tan escandaloso, sin embargo, su tío se reía entre el regaño, como burlándose indirectamente de su pareja.

Lan WanJi quería tener algo así con alguien. Prácticamente, tenía como ilusión tener una pareja y tratarla como su tío político trataba a su tío.

En más de una ocasión veía a la pareja tener un momento tierno y dulce entre ellos, pasaban de decirse cosas bonitas a darse besitos y tomar sus manos mientras veían una película.

Le encantaba estar con sus tíos, en cambio estaba en casa con su hermano, quien parece estar pegado a su computadora en tiempos libres viendo Donghuas.

Se preguntaba si su hermano siquiera tenía vida amorosa.

Se aburría intensamente con su hermano en casa, pero por no querer hacerlo sentir mal, no se lo demuestra y convive con él.

Aunque esa monotonía cambió cuando conoció a Wei WuXian, entonces todo lo que le había contado su tío político en los cuentos que le leía, cobraba sentido.

Siempre había una princesa y un príncipe, había un primer encuentro, un cortejo y luego había una boda.

Como en Disney...

Lan WanJi había sentido mariposas en el estómago cuando conoció a aquel niño de ojos grises y sonrisa deslumbrante, aún si era su opuesto, pudo recordar algo que le había dicho su tío político.

"—Tu tío Qiren y yo somos muy diferentes, pero esas diferencias son lo que nos mantienen unidos como pareja, ¿entiendes?—"

Su tío siempre le decía que en algún momento, al igual que los príncipes de los cuentos, encontraría a su princesa.

Bueno, pues ya la encontró.

Y fue gracias a su raro hermano que lo hizo, después de observar al mayor por un rato, llegó a la conclusión que no era tan asocial cómo creía, agradecía internamente que el asesino del Señor Tuzi tuviera amigos, y que esos amigos lo llevaran a conocer a Wei Ying, agradecía internamente que lo llevara en contra de su voluntad al grupo de juegos.

Wei Ying era su princesa.

Jiang Cheng era el dragón que debía enfrentar para quedarse con la princesa. Sería fácil.

. . .

{ Lan Qiren }
<< ¿Qué clase de persona consciente no lee la etiqueta de lavado?>>

—Fue mi error—sonrió con nervios, cuando le mencionó a su tío sobre el peluche, no esperó un regaño. Su tío político, Wen RuoHan se unió a la conversación.

<< ¿Mataste a su conejo? JAJAJAJAJAJAJA>>

Genial, ahora se burlaría de él.

—Ya le pedí perdón, incluso lo dejé viendo Cenicienta—se escuchaba A dream is a wish your heart makes al otro lado de la puerta.

<< Al menos dime que lo reemplazaste, ya sabes que él no puede dormir sin el "Señor Tuzi">>

Habló su tío, quitándo a su pareja de la pantalla.

—No lo reemplacé, pero tiene uno nuevo, lo llamó WangXian—su tío se le quedó viendo y asintió.

<< Los dejo conversar, iré a hacer té >>

—Bien—se despidió de su tío, quedando sólo con la pareja de este. —¿Cómo lo convenció?—le preguntó.

<< ¿De qué?... ah ¿de rasurarse la barba?, no hice nada más que decirle que se vería mejor sin ella, además de que lleva quejándose por los gastos extra de la casa>>

Vaya cambio, se preguntaba si su tío político estaba contento o no.

<< Sin embargo se ve tan joven que llama la atención, y me molesta que llame la atención>> bufó.

—¿Y por qué no le dice?—RuoHan rodó los ojos.

<< Ya me acostumbré a verlo así, ¿Qué puedo decir?, es más me gusta más así, me hace recordar nuestra juventud>>

—Ja...Me despido—ya le daba miedo el rumbo de la conversación.

<< Salúdame a WanJi, adiós>>

{Lan Qiren se ha desconectado}

Ahora se preguntaba cómo es que su tío había sentado cabeza con un hombre como Wen RuoHan, y todavía durar más de veinticuatro años juntos.

Sin dudas, admiraba a su tío, verdaderamente había amor en esa relación, y se sentía orgulloso de ellos.

Salió de su habitación, WanJi seguía atento a la película de Cenicienta, abrazando a su nuevo peluche, decidió sentarse con él y pasar tiempo juntos. Después de todo, desde que se hacía cargo de él no había pasado tanto tiempo con su hermanito.

¡Que difícil es ser hermano mayor!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora