"
AndreaTraté de levantarme pero Sam estaba aún con la cabeza en mi vientre y parecía momia.
- Sam.- Susurré moviendo su cabeza un poco -. Sam.- Repetí con el tono un poco más alto -. ¡Samuel!- Grité y este reaccionó de golpe, se cayó de la cama.
- ¿Qué? ¿Ya nació?- Preguntó adormecido.
- No he llegado ni al segundo trimestre, genio.- Dije con sarcasmo.
- ¿Por qué me tiras?- Preguntó levantándose del suelo.
- Como sea, voy a ducharme. Bajaré a desayunar.- Informé y me levanté para caminar hacia la ducha.
- Ahorremos agua.- Escuché de él y a los poco segundos sentí su presencia detrás de mi en la ducha.
Abrí la llave del agua y este cayó frío, haciendo que un escalofrío recorra mi cuerpo de pie a cabeza. Poco a poco se calentó y llego a la temperatura normal.
- Mira, está creciendo.- Dijo Sam, acariciando mi vientre y apoyando su cabeza en mi hombro.
- Claro, supongo que crecen. ¿O será que se quedan igual de chaparro que tu en tu niñez?- Pregunté sarcástica.
- ¿Estás de joda, mujer?- Preguntó fingiendo estar ofendido -. ¿Cómo sabes que era chaparro cuando estaba pequeño?
- Mamá me mostró algunas fotos hace meses, y también descubrí algunas cuando estaba husmeando en tu habitación, luego de nuestra luna de miel.
- Debiste ser espía, no se te escapa nada.- Se quejó untando shampoo en su cabello.
- Lo estoy dudando.- Bromee.
****
- Vaya, vaya. No vayas a embarazarte, ya solo faltaría que me den un hermano.- Le bromeé a mi mamá.
- Buenos días, hija.- Saludó ella, sonriente y riendo con papá.
- ¿No hay helado?- Pregunté abriendo el congelador.
- Negativo, prima.- Dijo Raphael entrando a la cocina -. Samy y Victoria se lo terminaron anoche.
- Esas hijas de su bendita madre.- Me quejé.
- Que educación.- Dijo Sam, sarcástico.
- Tu ni hables, cuando cantas en inglés dices más groserías que un adolescente.- Reclamé sentándome junto a Raphael.
- Ustedes siguen siendo los niños que peleaban por cualquier razón - Contó papá -, solo te falta golpearlo y ya.
- ¿Puedo hacer eso?- Pregunté sonriendo.
- No.- Respondió Sam.
Puso su mano en su entrepierna, disimuladamente, y me sonrió con lascivia. Sonreí y negué, divertida.
- ¿Qué les parecería irnos un tiempo?- Sugirió mi madre - Despejar la mente, y quizás, que mi nieto nazca en otro país.
- Es buena idea, mamá. Pero recuerda que no podemos dejar los negocios de lado, perderíamos contactos y es difícil empezar de cero. Aún me queda poco más de seis meses para dar a luz.
- Un fin de semana, sería bueno.- Dijo Sam.
- ¿Les parece ir a Grecia? Me gusta la casa de allá.- Dije.
- Claro, así visitamos el lugar donde jugabas con Sam.- Dijo papá.
- La llevaré al ginecólogo antes del viaje, quiero asegurarme que todo está bien.- Dijo Sam.

ESTÁS LEYENDO
Andrea
AléatoirePRIMER LIBRO DE LA BILOGIA "SALVATORRE" • A veces el amor no lo vence todo, tenemos que vivir para aprender. Andrea lo sabe, Andrea nos cuenta su vida, nos cuenta como conoció el amor y le fue arrebatado, nos cuenta como luchó y como le dió valor a...