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Narra Jimin

Escucho tres golpes en la puerta de mi oficina para luego escuchar que la abre. Termino de anotar  unas cosas y alzo mi cabeza encontrabdome con una chica de mediana estatura, su cabello es negro y liso, este le llega por debajo de los hombros.

Viste una falda negra y una camisa blanca ceñida a su figura, doy una vista rápida así cuerpo y debes aceptar que tiene buen cuerpo. Trae con ella una agenda en sus brazos y una nota, exactamente la que yo le había dejado esta mañana en su oficina.

Supongo que debe ser mi secretaria, así que me levanto, arreglo un poco mi traje, carraspeo mi garganta y me acerco un poco más hacia la puerta en donde aún permanece la secretaria que estaría solo a mi servicio.

Se me hace muy conocido su rostro, bastante para ser exacto, esos ojos color miel con esa mirada son muy familiares. Aún no sé su nombre, después de lo de ayer, no pude preguntarle a Taehyung.

—Lamento que no nos hayan podido presentar antes, mi nombre es Park Jimin— siempre suelo ser serio en este tipo de ocasiones y esta no es la excepción.

—Es un gusto, soy...

Cerró su boca viendo cómo da un respiro profundome le quedo mirando esperando a que termine de presentarse.

—Soy Min Ninah.

¿Espera qué? ¿Escuche bien? —perdón, ¿Me puedes repetir tu nombre? — la miro atento, siento que los ojos se me saldrían en cualquier momento.

—Min Ninah, seré su secretaria personal, puede pedirme lo que necesite, estoy aquí para ayudarlo— acomodó un mechón suelto de su cabello detrás de su oreja.

Min Ninah...no, no puede ser ella, ¿Qué es esto? ¿Un sueño, una pesadilla?, no puede ser posible que ella sea la misma chica que ahora tengo ante mis ojos.

—Tú— me interrumpió

—Quería pedirle mis disculpas por lo que pasó ayer.

Aún estoy en un estado de shock, siento que mi cabeza explotara en cualquier momento, pero debo actuar con normalidad hasta no estar seguro de que es ella y no es una ilusión.

También es que esta  muy cambiada, última vez no estaba así. Su rostro está más maduro, su cuerpo tiene más forma.

—No te preocupes, todo está bien — me doy la vuelta y camino hacia el escritorio. Me siento en la silla y doy otra mirada rápida a su cuerpo.

—Encontré esto en mi computadora — me mostró la nota que había escrito —¿Necesita algo?

—Sí, ¿Ves esos papeles? —le indiqué una montaña de papeles que esta en un mueble— revisa uno por uno y ve si están al día, si no lo están ve cuantos impuestos hay que pagar— hablo mientras miro la pantalla de la computadora.

—Como usted diga.

Se dirigió hacia los papeles y con sus débiles y delgados brazos tomó la gran montaña de ellos.

—Ninah —no me quería quedar con la duda. 

—¿Sí?— me miró como pudo entre los papeles.

Me quedé pensando unos momentos, pero no, no podría decírselo, no en estos momentos y tampoco no es el lugar adecuado.

—Nada, has lo que te pedí.

Ella asistir para luego salió de la oficina.

Sin esperar más me levanto para salir de la oficina hecho una furia, pasó por la oficina de Ninah y observo cómo está concentrada en sus cosas que ni mira mi presencia. Sacudo mi cabeza y camino hacia la oficina de Kim, ingreso sin anunciarme ni nada. De verdad estoy molesto él todo este tiempo supo donde estaba y me lo oculto.

Amor o ContratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora