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Narra Jimin

Ha pasado una semana desde que fui a casa de Ninah. Ese día finalmente me armé de valor y le dije todo lo que sentía, lo arrepentido que estoy y lo que quería hacer por ello.

Recuerdo cómo ese día llorábamos en silencio, moría por abrazarla y darle mil besos mientras le decía que la amo. Pero cuando está a punto de besarla, unos llantos y llamados del pequeño nos detuvieron.

Pero debo a reptar que lo que me molesto más fue ver a Jeon en esa casa. Se supone que eso está en Seúl y que esté en esa casa con mi familia me desespera.

Me recuesto en la silla y cierro mis ojos por unos minutos, anoche no dormí nada terminando algunos documentos que debía presentar para la junta de hoy, es la última del año, se supone que en unos días la empresa cerrará por las fiestas navideña.

A lo lejos escucho unos pasos sin embargo ma tengo mis ojos cerrados.

—Señor Park, lo espera en la sala de juntas— escuchó cómo la nueva secretaria me llama.

Suelto un pequeño bufido mientras asiento, tomo algunos de los documentos y camino hacia la puerta para así salir de la oficina.

Al llegar a la sala de juntas me siento a un lado de Taehyung para así poder comenzar con la reunión.

Eun Woo comienza leyendo los informes de inicio de año y dice cómo las acciones han subido, anotó unas cosas, pero observo cómo mi teléfono se prende por una notificación. Lo tomo desbloqueado y abriendo el mensaje.

Ninah ❤️

Mañana puedes conocer a tu hijo, nos podemos ver cerca al parque que está por mi casa

No llegues tarde.

Mis ojos y mi boca sé abren leer eso, pensé que demoraría más en llegar ese mensaje. Incluso pensé que si llegaría iba a ser negativo.

Me paro de la silla y salgo de la sala de junta sin importar los llamados de los demás. O lo que sea que había dejado botado.

Por unos largos minutos manejo hacia un centro comercial para poderle comprarle algo a mi pequeño. Recorrí la tienda varias veces en búsqueda del regalo perfecto. Las vendedoras se cansaron y me dejaron solo. Me encargué de buscar los regalos para niños de tres años, pero no se cuál tomar.

Park ¿Estás loco? ¿Por qué te fuiste así?

Eso ahora no importa, ¿Sabes que le gusta a Jin-Young?

Por unos largos segundos se escucha un silencio al otro lado.

—Ama los carros.

Espera, esa no era la voz de Taehyung.

—¿Perdón?

—Young le gusta coleccionar carros.

Yo asiento como si este me pudiera ver, camino un poco más hasta llegar a la sección de carros.

—Gracias.

—No lo hago por ti sino por él.

—Lo sé, gracias— iba a colgar, pero su voz me detiene.

—Si llegas a lastimar a mi sobrino, lo pagarás muy caro.

—No los lastimaré, los amo y daré lo mejor de mí.

No escucho más nada, así que retiro el celular de mi oreja y veo que corto la llamada.

Guardo mi celular y me pongo a buscar el mejor carro para mi pequeño.

Amor o ContratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora