De alguna manera habíamos hecho que nuestra caótica relación durara tres meses, un mes más de lo que yo había previsto.
Con el pequeño detalle que ni sus padres, ni mi madre sabían de todo lo relacionado a nosotros.
Ellos ya no coqueteaban con nadie y yo ya no acepta citas con extraños. En cierta forma se podría decir que teníamos una relación sana, a veces si creía que me harían una propuesta, pero estando juntos estábamos tan tranquilos que parecía que no lo necesitábamos, era como si me lo hubieran dicho sin palabras.
Pero establecimos ciertos límites, mientras Tenjiku y la ToMan tuvieran reuniones no mostraríamos que estábamos en una relación porque eso podría interferir en las decisiones que se tomen, en pocas palabras la Nat de la ToMan estaba prohibida, pero la Nat del día a día era de ellos.
Hoy por la tarde iría por primera vez a la casa de los Haitani, esa noche me quedaría a dormir con ellos, le dije a mi madre que me quedaría con una amiga y no me preguntó nada más.
El problema era mi hermano, al principio creí que tendría que sobornar a Chifuyu para evitar que le dijera la verdad a mi mamá, no era la clase de chismoso pero nunca se sabe con los hermanos, pero solo me dijo que le debería un favor más adelante.
Ese sería un problema para la Nat del futuro.
Tomé una mochila y guardé un cambio de ropa para el día siguiente y un par de cosas de higiene personal.
Tocaron a la puerta de mi casa, debía de ser Rin que iba a pasar por mi.
-Esta abierto- grité desde mi cuarto. No tardó mucho en que Rindou apareció en mi habitación.
-¿Estás lista Nat?- Cuando levanté mi mirada para ver a Rin mis ojos se toparon con un Haitani bastante golpeado, nunca lo había visto así, casi siempre él dejaba a las personas de esa manera, corrección, él los dejaba peor.
-¡Mierda Rin! te ves horrible- Fui hasta él y le puse las manos en el pecho, los cortes no estaban tan mal de cerca.
-Justo las palabras que quería escuchar de mi novia- ambos sonreímos y yo le di un corto beso.
-Corrección Rin, no soy tu novia- Siempre le decía eso para molestarlo.
-Dilo hasta que lo creas- Ahora fue él quien me besó
-Ven siéntante- Rin levantó un ceja, sabía que significaba esa expresión en su rostro -No voy a tener sexo contigo, solo te voy a curar.
-Prefiero el sexo- Fui al cuarto de Chifuyu por el botiquín y cuando regresé, me senté junto a él.
Comencé a pasar algodones con agua oxigenada por los pequeños cortes de su cara. En ningún momento hizo muecas de dolor en su lugar me regalaba varias sonrisas.
-Terminé- Volví a meter todo a la cajita.
Rindou no perdía de vista ningún movimiento mío, puso su mano en mi rostro y comenzó a acariciar mi mejilla.
-Nat te amo- me quedé helada ante su confesión -No tienes que contestar nada, pero quería que lo supieras- Se puso de pie cargando mi mochila en un hombro, estiró su mano para que pudiera agarrarla -Ran nos espera.
Quería decirle que yo también lo amaba pero las palabras no salían, nunca esperé esa confesión de parte de él.
Pero me sentía muy contenta porque mis sentimientos eran correspondidos por uno de mis dos no novios.
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Entre Sangre y Romance
RomantizmChinatsu era la hermana mayor de Chifuyu y un miembro más de la ToMan siendo la única mujer entre las filas de la pandilla. Un día los hermanos Haitani son transferidos a su escuela y empieza una extraña interacción con ellos dentro y fuera de la p...