Entre Sangre y Romance

Extra Nuestro hijo

Después del berrinche de Ronin de escaparse de la casa, Ran le quitó el dinero que le daba semanalmente, a manera de castigo para que según él "aprendiera a valorar lo que nosotros le dábamos". Así que para que Ron pudiera comprarse sus cosas le pidió trabajo a Fuyu. Aunque yo sabía que Rin le daba algunos yenes a escondidas.

Al principio no me gustó la manera en que Ran sobrellevó la situación, pero parecía que estaba funcionando porque nuestro adolescente volvía a ser tranquilo como antes.

Aunque para mí era más trabajo porque tenía que pasar por él al terminar el turno.

Pero la actitud de Chifuyu cambió, estaba muy distraído, distante y se notaba por como gestionaba la tienda, mandaba a Ronin a acomodar la mercancía donde no era su lugar u olvida hacer el inventario.

Ya me estaba preocupando, no era normal su actitud, se lo llegué a decir a Baji pero él me dijo que solo estaba preocupado por tonterías.

No me tragué su estúpida escusa, investigué un poco con nuestros amigos pero todos estaban igual que yo, un día recibí una llamada de mi hermano pidiendo verme en una cafetería cerca del jardín infantil donde teníamos a Ren.

Mientras me estaba estacionando vi a mi ex-capitán y sub-capitán llegar, cerré mi camioneta y fui con ellos, escogieron un mesa en el rincón más alejados de todas las personas.

Baji no paraba de moverse en su lugar y se tocaba el cabello constantemente, en cambio Fuyu parloteaba sin parar de cualquier estupidez que se le atravesara por la cabeza.

Algo anda mal con ese par y les voy a sacar la verdad no me importa como.

-¿Vas a morir?- Les pregunté sin meditar ni una sola de mis palabras -¿te dio cáncer?... ¿o Kei es el moribundo? Los dioses son tan crueles con las buenas personas.

-Nat, calmate tarada, nadie está muriendo- bien al menos Baji recuperó el habla.

-¿Ah no? ¿Entonces porque han estado actuando como unos locos fuera del manicomio?

-Baji y yo queremos ser papás.

Vaya, me esperaba de todo menos eso.

-¿Por eso han sido misteriosos?... saben que soy su fan número 1, viva el matrimonio homopar...

-Queríamos pedirte que tu fueras la gestante- me dijo Baji.

Pero en lo único que podía pensar era en la pelea que se armaría entre ellos y los Haitani por embarazarme de alguien que no fueran mis esposos.

-¿Qué?

-Tenemos a la donante de óvulo y el espe...

-Pero si tengo a tu hijo puede nacer con problemas, porque somos hermanos además sería como incesto, solo de pensarlo me da escalofríos.

-El esperma será mío Nat, ya habíamos pensado en eso, solo queremos que tú gestes a nuestro hijo.

Para mi todo el lugar quedó en silencio, solo podía escuchar el sonido de mi corazón latir a tope, además la mirada de Kei y Fuyu no ayudaban en nada.

-¿Puedo pensarlo?

-Si, si, si, si- dijo Chifuyu a la par que movía la cabeza de arriba hacia abajo.

-Ya fueron muchos si- Baji le terminó dando un codazo para que se callara.

Había perdido el apetito, porque entre más lo pensaba más me parecía una pésima idea.

Ya tuve tres embarazos, no me fue precisamente mal pero tampoco fue un paseo por el parque, por esa misma razón obligué a Ran y Rin a hacerse la vasectomía. Y no solo era eso, Rindou quería tener un segundo/cuarto hijo y yo le corté esa fantasía de raíz, seguramente me pedirá el divorcio apenas mencione que podría tener el hijo de Keisuke y ni mencionar lo que hará Ran, nunca ha superado esos celos infundamentados por mi cuñado.

Y podría causar una confusión en mis niños al saber que voy a tener un bebé que no será su hermano, suficiente trauma tienen los pobres sabiendo que son primos hermanos, literalmente.

Necesito meditarlo porque es una decisión que puede afectar a toda mi familia.

-¿Nat, Nat?- Rindou chasqueó sus dedos frente a mi, yo estaba sentada en la cama viendo algún lugar indefinido en el espacio, esperando que los dioses me dieran la respuesta de si aceptar o no ser la madre subrogada del hijo de Bajifuyu.

-Aquí estoy- contesté sin animo y dejando salir un pequeño suspiro.

-Solo en cuerpo, llevas media hora viendo el cesto de basura ¿te pasa algo Chinatsu?

-¿No?... es difícil de decir, es que no paro de pensar en algo y bueno si se los digo, ya los conozco y van a actuar de forma impulsiva y también está la cuestión de mis hijos.

-Haitani Nat no haz terminado ni una sola oración de las que empezaste, dinos que te pasa- Rindou me escrudiñaba con la mirada.

Yo tomé la mano de ambos, acercándolos a mi. No hay peor escenario que pueda pasar que ya no me haya imaginado antes. Tengo que decirles lo que me pidieron Kei y Chifuyu independientemente de si acepte o no. Solo debo decirlo, ellos son adultos y saben muy bien como gestionar sus emociones ¿Qué es lo peor que pueda pasar?

-¡ESE HIJO DE PUTA!

-Ran amor cálmate, no pienso aceptar ¿bien? debes tranquilizarte.

¿De entre todos los hermanos del universo por qué me conseguí a los más psicópatas?

-¿Primero nos dices que vas a coger con el estúpido de Baji y ahora le pides que se calme? Nat no tienes ni idea de lo que le voy a hacer a Baji.

Nunca me deja de sorprender la forma en que Rindou entiende las cosas que le digo.

-En primera no voy a tener sexo con nadie que no sean ustedes, todo se hace en un laboratorio el ovulo ni si quiera sería mío... y en segunda ya les dije que no lo haré, ellos me lo pidieron por la confianza que me tienen y porque de alguna manera Chifuyu se sentiría más cercano al bebé si yo lo tuviera. Pero como ya les repetí un montón de veces N-O  L-O   H-A-R-É.

No quise seguir con la discusión porque no íbamos a llegar a ningún lado, quise decírselos porque odio las mentiras entre nosotros, pero como siempre ellos pensaron con su lado menos racional. Salí de la habitación y bajé a la cocina lista para llamar a mi hermano y poder decirle que tendría que buscar a alguien más, tal vez Emma pudiera hacerlo, su esposo es más sensato que los míos.

¿Pero como carajos le diría que no?

El Chifuyu adolescente me ayudó a criar a mi hijo, pasaba por él todos los días a la guardería, lo bañaba, le cambiaba el pañal, prácticamente fue su papá y por no mencionar todo lo que hace por Ren y Ru.

Sin darme cuenta me puse a llorar, me sentía entre la espada y la pared, porque por un lado quería ayudar a mi hermano pero tampoco quería sacrificar a mi familia en el proceso.

-¿Chinatsu?

-Déjame sola Ran, lo último que necesito es escucharte gritar- limpié mis lagrimas con el dorso de mi mano.

-Mi amor...- Ran me abrazó, envolviendome con sus brazos -Perdón, sé que me pasé de celoso, no hay justificación para como actué.

-Tú no lo entiendes, quiero ayudar a mi hermano pero sé que el decirle que si podría ser el punto final para nosotros.

-Nat, esta es una decisión que debes meditar, no debes de decir que si por mero impulso, hay un montón de cosas que tienes que planear- Rindou tiene razón, no puedo decidir sin antes ver todos los puntos posibles, podría buscar en algunos foros por Internet de madres subrogadas y de hijos que fueron de vientres alquilados.

La ayuda de un profesional también me serviría, pero sobre todo no aceptaré si alguno de los Haitani me dice que no quiere y eso incluye a mis hijos.

Chifuyu y Baji tendrán que esperar un poco si quieren que les sirva de incubadora humana.