Male reader✔ Infidelidad✔ Tragedia✔ Lenguaje explícito✔
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-¿Pasa algo?- preguntó Emma mirándote con curiosidad.
- Creo que me siento mal, debería regresar a casa...- dijiste parándote de la cama de la chica antes nombrada.
Era un martes por la tarde, después de ir a estudiar, ambos habían regresado del colegio y habían pasado un par de horas en la casa de Emma.
Llevaban alrededor de 7 meses de noviazgo, su relación iba despacio por petición tuya.
Tenías problemas para confiar en las personas y le temías a que te abandonaran como lo hicieron tus padres contigo y tu hermano menor Ken o mejor dicho " Draken".
Por esas razones, se te hace más cómodo ir lento en la relación para establecer confianza.
Tomaste tu mochila y tus zapatos y la menor de los sano te acompañó a la puerta de su casa.
- Adiós cariño- besó tu mejilla y replicaste su acción despidiéndote.
Mientras caminabas a casa peleabas contigo mismo, pues desde hace unas semanas notabas como Emma se ponía algo extraña cuando hablabas de tu hermano.
Siempre parecía estar interesada en él Y normalmente te preguntaba por él muy amenudo.
No se te haría tan extraño si no supieras sobre los rumores que apuntaban a que ambos salían en secreto.
Y mentalemente te cacheteabas, pues no deseabas desconfiar en una chica como Emma.
Linda, divertida, amable y cariñosa. No la creías capaz de hacerte algo así.
- Tonterias... Ella me ama nunca me haría esa estupidez-
(...)
- ¿Oye ____ no quieres mejor ir a comer helado?- preguntaba un rubio algo nervioso.
- Michy necesito hablar con Ken, déjame pasar- decías intentando apartar al nombrado poniendo ambos brazos en sus hombros empujándole.
- ¡P-pero ____, él está algo ocupado!- notabas como su voz se quebraba.
- Solo debo decirle que Mikey quiere hacer otra estupidez, será rápido- tu paciencia se agotaba y contenías las ganas de golpearlo y entrar al taller mecánico donde Draken estaba.
Sin mucho esfuerzo empujaste al chico que bloqueaba tu camino y abriste la puerta del taller.
- No quiero mentirle más a mi hermano Emma- al escuchar la voz de tu hermano menor te quedaste quieto escuchando su conversación.
¿mentirte? No entendías nada.
- ¡Pero no quiero dejarte!- sollozo la chica aferrando su cuerpo al brazo del mayor.
