¡vamos! deja ver tus ojos. vkook.

capítulo 11

Narración primera persona.

Mi mirada se centraba en el, en sus movimientos mientras comía la deliciosa comida de mi madre que había cocinar especialmente para el.

Obviamente no toque el tema anterior nuevamente; lo dejaría así hasta que sea el momento indicado para hablar con el de forma adecuada y así poder explicarle la situación para que éste pueda ya entender un poco más de las propuestas de novios.

Con mis palillos tome un poco de mi platillo Bibimbap comiendo un poco de lechuga con gusto.

— Entonces eso querido, se qué es difícil tu condición pero si deseas puedes venir a mi sin problemas.— hablo mi madre con calidez hacia Jungkook pero él parecía no prestarle atención; pues se veía concentrado leyendo la parte de atrás de un pote de ketchup.

—si deseas puedes venir a mi sin problemas— Repitió.

Y me observó por unos segundos.

Unos hermosos segundos.

—Ahm..., jungkook tiende a repetir las palabras.— expliqué al ver el rostro confundido de mi madre ante escuchar sus mismas palabras salir de la boca del contrario.

Bueno, la entendía, yo igual reaccione así.

Algunas veces personas lo ven como una burla.

°°°

— y esta es mi habitación, trate de poner todo en su lugar para recibirte aquí, puedes sentarte.—

Una vez después de cenar lo lleve a mi habitación para hablar un poco más tranquilos.

(Aunque yo sea quién hable más)

—tengo algunos videos juegos, también pelicular y figuras que colecciono— comencé a contar con gusto al enseñarle cómo un fanático los típicos juegos de mi infancia que tenía. Era agradable hablar del tema.

Cada juego que estaba en las manos de jungkook le explicaba la historia y de que trataba; solo ganando un asentimiento de su parte, solo algunas veces.

También las figuras de algunos animes, al igual mi pequeña colección de mangas

(Obviamente enseñándole algo suave y no tan violento)

—Es de chicas.— hablo el tímidamente. —¿Que?, No es de chicas, solo es de romance y es muy buena— el manga que tenía en sus manos era uno que tenía la colección completa pero no encontraba que fuese de chicas solo porque era muy romántico.

—Chica.— repitió.

Yo solo reí un tanto avergonzado. Lleve mis manos a mi cabellera para sacudir con vergüenza mis cabellos.

Mis gustos quizás eran algo femeninos.

— Ore Monogatari....— trato de pronunciar el nombre del manga con su dulce voz.

Aunque fuese en japonés a mi parecer lo dijo como todo un profesional.

—Es muy bueno, hay mucho romance y es divertido. Me reí mucho leyéndolo por todas las estupideces que hacen ambos por ser su primer amor mutuo.— sonreí ampliamente observando a él contrario con atención viendo cómo este se concentraba en ver la portada de El manga— ¿Quieres que te lo preste?— se veía tan atento a la portada que supuse aquello. No espere que aceptara moviendo su cabeza hacia arriba y abajo.

Sin mirarme.

—Entonces es tuyo. Puedes llevártelo después.— levanté mi mano llevándolo hasta su cabello,pero me detuve para evitar incomodidad. — ¿Puedo acariciar tu cabello? —

Negó.

—oh bien, lo lamento. — me disculpé dejando salir un suspiro y desviando la mirada hacia un lado segundos antes de dejarme caer sobre la cama a un lado de el entre cerrando mis ojos.

Estaba un poco cansado, hoy me había levantado temprano a la universidad y luego ayude a mi madre con la cena; me dolían un poco las piernas.

Pensar en las cosas que hice hoy me metió en una burbuja que en cuanto se rompió me asusté un poco.

Jungkook frente a mi rostro mirándome fijamente a los ojos con ambas manos sobre mi pecho en una posición algo extraña.

Mi cuerpo se estremecio por completo, las mariposas inundaron mi estómago y mis mejillas se pusieron más cálidas de lo normal.

¿Que debía decir?, Era una situación bastante comprometedora.

—¿Puedo besar?— mis ojos se abrieron un poco más de lo normal y me quedé sin aliento sonriendo con torpeza por lo feliz ante su propuesta.

¡Claro que podía!

Relami mis labios asintiendo suavemente listo para besarlo nuevamente después de unos días.

Deslice mis manos a sus mejillas para tomarlas con suavidad e acariciarlas con mi pulgar.

Tan suave.

Acerque su rostro al mío rozando sus labios con los míos por unos segundos sintiendo los del contrario temblar suavemente.

Uno...,dos...,tres...

Y finalmente junte nuestros labios en un beso con el fin de hacerlo sentir seguro.

Un beso lleno de amor.