¡vamos! deja ver tus ojos. vkook.

capítulo 13.

Narración primera persona.

—¡Fondo fondo!— gritaba yoongi junto su compañía el famoso Jimin mientras yo bebía de la parte de abajo de una cerveza que rompí con un cuchillo.

El ardor y el amargor inundó mi garganta para cuando ya terminar de beberla dejar salir un quejido al igual que un gruñido de desagrado.

Me gustaba la cerveza pero no para beberla de esa manera.

Era asqueroso esa sensación al igual que desesperante el tratar de tragar rápido con tal de acabar lo más rápido posible. —¡Lo hice!— dije no muy fuerte dejando la lata sin ni una gota sobre la mesa estando jadeante.

Solo era una reunión de "hombres" con yoongi, Jimin y Jungkook.

Quien se encontraba a mi lado bebiendo solo gaseosa. Al menos era un niño de bien y no se va a emborrachar como quizás lo hagamos los tres.

—los hielos.— hablo Jungkook solo manteniendo su mirada en los hielos de su vaso— ¿Que pasa con ellos?— limpie mis Labios con mi ante brazo para dirigir mi mirada hacia el.

No dijo nada.

Suspire suavemente y mire a Jimin quien bebía sin parar e reia junto mi mejor amigo con sus mejillas sonrojadas.

El estaba borracho.

Muy borracho para coquetear a Yoongi de una manera extraña.

—Eres un marcianito muy bonito~, si , si.— su voz era como un hilo mientras movía sus dedos apuntando a yoongi y unos ojos entre cerrados.

—ruido, es...molesto...— apenas escuchar esas palabras me levanté de la mesa para prestarle atención a la persona quién las había pronunciado.

Prometí que esto sería lo más tranquilo para el, no habría problemas, ni nada por el estilo y estaría para el.

Se que no disfrutaría pero no quería dejarlo solo o que se enfadara y le dieran sus pequeños ataques de ira.

(Aunque sea pequeño se enfada)

Con cuidado lo tome por los hombros para levantarlo sin antes avisarle de mi acción. Proseguí llevarlo al living donde lo senté en el sofá y yo a su lado; deslice mis manos hasta su muslo donde pregunte antes de dejar descansar está allí.

—¿Estás mejor?— sin respuesta.

Al menos se veía bien, sus manos no temblaban y su mirada no se veía desesperada.

—¿Sabes?, Fue feo tomarse esa cerveza, es muy amarga y bueno creo que ya me hace efecto con el dolor de cabeza increíble que está dándome.

Acaricie mi cien suspirando y pensando en algo que no sea ese molesto dolor en mi nuca.

—soy de beber pero beber a mi manera, más tranquilo y de apoco. No todo de una porque mi estómago de hincha, oh qué dolor.

Mi mano en mi abdomen acaricio dando círculos y sintiendo la hinchazón que dolía un poco.

—gas no.— hablo.

—No,no,no,no. No lo haré.— hablé rápido riendo con vergüenza. No me sentía capaz de tirarme un gas frente a el. No,no ¡No!, Si quiera pensarlo.

—solo me hincho nada más, soy como un pez globo; solo que me hincho con cerveza. Me hubiera gustado beber tequila o vodka, es más de mi gusto pero lamentablemente no puedo dejarte solo aunque solo estemos nosotros cuatro. ¿Lo entiendes?, Me preocupa que si me emborracho te asustes.—

Silencio.

Esto es difícil.

—¿Piensas beber gaseosa?, Puedes beber un poco de alcohol si deseas Jungkook. Es de las baratas pero al menos es algo.— me incline suavemente hacia el.

—me acercaré a ti para susurrar.— hablé.

—yoongi no tiene dinero para comprar buen alcohol.— susurré entre risitas para así alejarme. Negando suavemente hasta que logre escuchar lo imposible.

Una pequeña risa y una sonrisa cubierta por su mano.

¡Lo había hecho reír!

¡Que logro!

—seria bueno si Yoongi juega un juego de lotería para ver si tiene un poco de suerte y gana unos billetes aunque sea que le alcance para un ramen instantáneo.— seguí la broma apoyando mi espalda en el respaldo de el sofá viendo a Jungkook aún cubrir sus labios.

¿Seguirá sonriendo?

—oh quizás debería trabajar.— voltee mi mirada viendo a Jungkook quien volteo a verme al mismo tiempo que lo mire. Mantuve fija mi vista en el hasta que el sonrió viendo unos hermosos dientes de conejo asomarse.

Sonriendo se ve más precioso

Pensé un millón de cosas y una de esas era besarlo.

—Voy a besarte, quiero besarte.— admití de forma brusca a lo que el por primera vez asintió y desviando la mirada beso mis Labios por unos cortos segundos.

Segundos hermosos para mí.

—Jung-...

Un desgarrador grito impidió terminar la palabra.

Ese grito de horror tan fuerte que se podía sentir una garganta desgarrándose nos dejó en silencio.