¡vamos! deja ver tus ojos. vkook.

capítulo 31.

Jungkook no es muy bueno para expresar sus sentimientos porque no los entiende, se le hace difícil comprender si estaba triste o no, o que significaba las mariposas en el estómago.

Por eso muchas veces no entendía que sentimientos tenía hacia otra persona.

Taehyung lo hacía sentir unas enormes mariposas en su vientre, también unas ganas de saltar, abrazarlo, besarlo y reír.

Pero ¿Que era exactamente?

Después de dos meses ya eran tan apegados que siempre ambos andaban juntos. Jungkook no podía estar sin taehyung no un día, siempre le gustaba estar con él y recibir esos cálidos abrazos de saludo que éste le daba.

Amaba esa sensación que quisiera siempre sentirla.

En cambio taehyung disfrutaba también de el tiempo con jungkook pero algo le parecía mal. Algo no estaba bien en esa bonita relación de amigos que tenían.

La dependencia emocional de jungkook.

Eso lo había notado hace unos días que él quiso salir con su mejor amigo yoongi ya que desde el suceso del hospital no lo veía. Pero jungkook al enterarse se negó a quedarse un día sin el.

Y tuvo un ataque de pánico.

Claramente no estaba bien y no sabía cómo tratar de alejarlo un poco de el para que pueda tener su privacidad como antes a jungkook le gustaba, pero ahora siempre dependía de este para estar bien.

Eso le parecía un poco mal pero aún así su compañía le gustaba.

Y hoy era un día especial para ambos por lo que taehyung no quería arruinarlo.

Sentados en el pasto del parque taehyung se encontraba comiendo unos cupcakes de frambuesa con gusto al igual que jungkook.

Taehyung los devoraba en segundos por la deliciosa crema que tenían encima; en cambio jungkook lo comía con tranquilidad.

—¡Están muy ricos! — el mayor hablo feliz al sentir ese rico dulzor en su paladar ante los cupcakes que su menor le había traído. —¿Los hiciste tú? — este asintió virando su mirada a el mayor mientras relamiendo sus labios.

Jungkook quería hacer algo especial por taehyung, algo que a él le gustará y pudiera disfrutar. Por eso el cocino esos cupcakes la noche anterior.

—estan deliciosos, amo la frambuesa, me gusta ese sabor ácido dentro de los cupcakes. Le da un toque espectacular. — taehyung hablo casi como si fuera lo que más amaba comer en su vida. Pues aunque no lo fuera quizás empezará a amar los cupcakes que Jungkook le hacía.

Ver que el menor comenzaba a tener deseos de hacer cosas le alegraba, así podría experimentar cosas nuevas en su vida , tener nuevos gustos como el de la cocina y eso le alegraba bastante.

Le gustaría ver a su menor cocinarle pasteles, donas y cupcakes cuando fuese a su casa.

Sería divertido verlo al igual que ayudarlo.

—me gusta cocinar. — respondió el desviando la mirada como siempre lo hacía una vez después de haberse comido su dulce. — es...relajante. — asintió levemente para voltear su cabeza y mirar a taehyung con seriedad, aunque por dentro el estaba sonriendo , todo en su interior era felicidad pero se le hacía difícil demostrarlo.

—ahm..., jungkook. — susurro taehyung suavemente al tener la mirada del ya nombrado conectada con la de el.

Estaba nervioso, hace días había preparado este picnic con solo una intención.

Esperaba que no saliera como antes pero era inevitable saber cómo terminaría esto aunque trataba de que todo saliera perfectamente.

Jungkook no dijo nada, solo mantuvo su mirada en el pero para taehyung eso ya era suficiente.

—¿Sabes?, Últimamente o bueno más bien hace tiempo e sentido algo peculiar — comenzó a hablar suspirando un poco nervioso por como fuera a salir todo. — siento mariposas en mi estómago cuando estoy contigo, siento una felicidad indescriptible que quisiera saltar, abrazarte y decirle a todo el mundo lo que eres para mí. Con tan solo mirarte jungkook siento mi corazón cálido. Nada sería igual sin ti —poco a poco comenzó a abrirse tratando de no trabarse al hablar para no desconcentrar a este.

—eres una persona tan especial para mí, algo tan frágil que quisiera meterte en una cajita de cristal. Amo besarte, también, amo sentir tus labios sobre los míos en los suaves besos que me das cada que quieres. No sabes cuánto anheló para poder tener un beso cada día de mi vida jungkook. — este se acomodó de rodillas en el césped frente a jungkook, tomo sus manos sin antes avisar de aquel movimiento para poder finalmente decir lo más importante.

—Te amo. Eres la persona con la que quiero estar toda mi vida, eres la persona el cual quiero llegar a envejecer juntos, eres la persona el cual quisiera ver todos los días al despertar. Eres la persona el cual quiero tener una familia. — hizo una pequeña pausa. — eres la persona el cual quiero verte a mi lado lo que resta de mi vida. — jungkook se mantenía observándolo con impresión ante lo que había dicho pues el se sentía de igual forma.

También sentía esas mariposas en su estómago, el también sentía esa felicidad en su interior, pero ¿Que era?

—¿Sabes que todo eso es amor?, Yo siento amor por ti ,yo estoy profundamente enamorado de ti. Jungkook lo que siento hacia ti es un amor de pareja tan hermoso que no hay otra manera para explicártelo mejor. Te amo, y te amare lo que resta de mi vida. ¿Tú quisieras hacerme el honor de ser mi pareja? — allí estaba la respuesta. Después de tanto tiempo pensando en que podría ser Finalmente entendía todo.

Ahora sabía que todos esos sentimientos, todas esas veces que se emocionaba era solo por una cosa.

Amor.

Jungkook estaba enamorado.

Hubo un silencio entre ambos por varios segundos el cual Jungkook hacia descubrimiento de todo, pues no sabía que responder.

¿Si ellos se amaban debían ser novios?

Pues tiene sentido, bastante a decir verdad.

—tu y yo, novios taehyung. — murmuró antes de formar una gran sonrisa en sus labios.

La primera sonrisa que taehyung pudo ver.

La primera vez que ve a su pequeño fue tan feliz desde años.

Después de tanto sufrimiento jungkook había sentido nuevamente esa emoción que no había sentido hacía años.

Amor.