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AL TERCER DÍA, EL Sr. Miyagi había decidido que ambos chicos ya estaban listos para su siguiente lección. Cosa que en verdad emocionó a la pareja de jóvenes.
── Sabe, si Sato lo odia tanto, ── empezó Daniel mientras los tres se dirigían a donde el Sr.Miyagi los llevará. ── ¿por qué le da tiempo para llorar por su padre?
── Mi padre fue su maestro.── explicó Miyagi sin detener su paso.── Sato en su corazón aún sabe distinguir el bien y mal.
── Parece no saber.── se burlo Quinn negando.── Aún quiere matarlo, si me preguntan, moralmente y legalmente esta mal.
── A veces corazón saber, cabeza olvidar.── Miyagi contesto con un asentimiento. ── Nunca poner fin a una guerra tomando parte en una.
── ¿Y si le llega a golpear?── preguntó Daniel alzando los hombros.── ¿Qué hubiera pasado?
── Bloquear.── contestó el mayor simplemente.
── ¿Cree que lo hubiera logrado? ──Quinn cuestionó mirando a su maestro.
── Incluso ustedes. ── Miyagi dijo mirando a la rubia.
── No tenemos tanta fuerza.── le recordó Daniel.
── Da igual quien ser más fuerte, importa quien ser más listo.── Miyagi los llevó al lago cerca del pueblo detrás de la vieja construcción de conservantes. ── Desde mi primer lección de karate, padre Miyagi siempre decir, 'Mejor forma de evitar golpe, no estar adelante'
── Un hombre muy sabio.── sonrió Quinn alzando los hombros, Daniel le sonrió. Miyagi subió a una plataforma, jaló una cuerda y una ancla de barco salió disparada desde arriba, pero Miyagi la esquivo.
── Eso estuvo cerca.── rió Daniel nerviosamente.
── Técnica del tambor, ¿entienden?── preguntó Miyagi repitiendo su movimiento.
── Déjeme intentarlo.── pidió Daniel sonriente, Miyagi dudó un poco pero aceptó, intercambiaron lugares.
── Por favor no saltes, tu madre me mataría.── pidió la rubia mientras observaba a Daniel subir a la plataforma.
── Tranquila nena, no voy a saltar.── aseguró el chico ladeando la cabeza con una sonrisa.
── Recuerda Daniel-san, no estar adelante.── Miyagi dijo colocándole una protección al ancla. De repente, lanzó el objeto hasta Daniel, pero perdió el equilibrio y terminó cayendo al agua haciendo que Quinn carcajeara. ── Vamos, bastó por hoy. Intentar mañana.
Pero Daniel volvió a subir a la plataforma, mientras Miyagi bajaba por unas escaleras contando su primera cita con Yukie.
── ¡Danny, espera!── gritó Quinn cuando vio que el chico jalaba la ancla tratando de hacer el movimiento pero terminó perforando su camiseta. ── ¿Estás bien?
── Si, lo siento, fue un estupidez.
── Miyagi decir lo mismo a padre cuando él pasó.── Miyagi negó saliendo de la fabrica.── Y estar de acuerdo.
── Dios Danny, que estúpido.── regañó Quinn tomando de la mano al chico bajándolo de la plataforma.
── Aw, te preocupaste.── dijo Daniel abrazando a la rubia.
── Quítate, estas empapado. ── se quejó Quinn tratando de alejarse de su chico. Pero este se negaba.
── Aw, solo admite que entraste en pánico.── se burló Daniel sin soltarla.
── ¡No! Hazte a un lado.── Quinn rió, pero Daniel la tomó de la mano y se lanzó con ella al lago.── ¡Estás loco!.── carcajeo el chico salpicándole agua a Quinn quien regresó el movimiento.
── ¡Jóvenes, vámonos!── pidió Miyagi, ambos rieron y salieron del rio, esta vez sin separase.
Cunado volvieron al pueblo, Daniel y Quinn ayudaron amablemente a un hombre quien había tirado sus zanahorias en el camino, lo ayudaron a llevarlas hasta los puestos, causalmente ahí también se encontraba Chozen.
Pero cuando Daniel dejo caer el peso de las zanahorias en la balanza, esta se rompió dando a entender que Chozen había puesto mucho menos peso en su compra y todos lo acusaron de estafador.
── Hablaremos en otro memento,── Daniel dijo sonriente rompiendo la pesa. ── cuando no estas tan ocupado.
La tarde de Quinn se fue como agua. Había perdido de vista a Daniel pero no le preocupaba mucho hasta que decidió buscarlo, lo encontró en medio de la calle, bailando, con Kumiko. Los miró frunciendo el entrecejo pero no interrumpió.
── Que lindo bailas.── felicitó Chozen bajando de un auto.── Como una geisha.
── Vámonos.── Kumiko dijo tomando el brazo de Daniel alejándolo
── La técnica favorita de tu maestro, 'vámonos'.── rió Chozen, Quinn avanzó un poco todavía sin que la notaran. Chozen y sus amigos corrieron detrás de Daniel tomando el tambor de sus manos.
── Devuelve el tambor. ── pidió Daniel de forma cansada.
── El sonajero quieres decir.── Chozen rió agitando el tambor en su mano.── ¿Por qué no me lo quita el bebé?
Kumiko intervino pero Chozen la tomó violentamente de los brazos separándola.
── ¡Oye!── gritó Daniel abalanzándose a Chozen pero recibiendo una patada en el estomago haciéndolo caer. Quinn ya había visto la escena anteriormente, y tenía miedo.
── Si vuelves a insultar mi honor, ── Chozen amenazo.── te mataré. ── y con esó él y sus amigos se fueron. Kumiko abrazo por el estomago a Daniel mientras ambos se levantaban. Pero una vez levantado, Kumiko no lo soltó, si no que caminó hasta la casa, Quinn los siguió por detrás.
No escuchaba de lo que hablaban, pero tenía la seguridad de que algo iba a pasar. Ambos en el frente llegaron hasta la casa, donde pudieron ver al Señor Miyagi y Yukie sentados compartiendo una bebida.
── Es la ceremonia del té.── explicó Kumiko.
── Supongo que es un viejo ritual. ── Daniel dijo con una sonrisa mirando a su maestro.
── Significa que están enamorados otra vez.──Kumiko suspiró mirando con una sonrisa. Daniel miró a Kumiko, no fue una mirada normal, algo estaba pasando. Algo que Quinn ni siquiera quería pensar en.
