Miércoles a última hora. Los estudiantes están en las clases. Cristina y Elena están sentadas en la segunda fila. Desde ahí se ve la pizarra mejor. Cristina, con su camiseta de la torre Eiffel, sus pantalones negros y sus bailarinas marrones, intentaba prestar atención a la profesora. Desgraciadamente, ahí estaba Elena para interrumpirla. Le pasó un papel doblado. Cristina lo cogió y lo abrió.
Dibujado a lápiz, se podía apreciar un muñeco moreno muy parecido a Lucas, besando a una muñeca rubia que, por lo que ella deduce, se trata de un dibujo de ella misma y Lucas besándose.
¿A qué conclusión llega Cristina? Elena no sabe dibujar. Cristina le devuelve el dibujo a Elena con la intención de poder prestar atención en clase. Elena ríe y le susurra;
-Hoy va a ser tu día.
Cristina suspira.
<< ¿Qué voy a ser con esta niña? Todo el día igual. No sé qué parte no entendió de ‘’No quiero nada con Lucas’’. Ahora tengo que prestar más atención que nunca o no me llevaré la beca>>
-Muy bien alumnos, Lo que queda de clase estaré ausente por una reunión. El tema ya ha acabado. Podéis empezar a estudiar en lo que yo no estoy.-Dijo la profesora levantándose de su sitio y recogiendo sus cosas.
Todos los alumnos empiezan a hablar. No estaban dispuestos a hacerle caso a la profesora. Eran estudiosos, pero no tontos. Elena aprovechó para hablar con Cristina.
-No me lo puedo creer. Hoy vas a la casa de Lucas.
- Elena, a ver si te entra ya en la cabeza hueca tía. Solo vamos a investigar.
-Si, a investigar. Tú vas a ser la que más investigue.
- Elena, por favor.
-Es que estoy súper nerviosa.
-¿Por qué? si no voy a hacer nada con él.
En ese momento, entra de nuevo la profesora en la clase.
-Alumnos, una cosa que todavía no he dicho. Mañana se suspenderán las clases.
Todos asintieron. Las 14.30, Los alumnos se levantan de las sillas y salen del aula. Elena miraba a Cristina con una enorme sonrisa. Ella lo notaba. Cristina sentía un frio en su cuerpo como si estuvieran a cinco grados bajo cero. Una sensación muy extraña y nueva para ella. Un temblor le subía desde los pies hasta la cabeza. Había llegado el momento. Iba a ir por primera vez a casa de Lucas.
Salieron por una puerta enorme principal. Caminaron recto hasta que vieron a Lucas y a Jorge sentados en un muro. Ellas se dirigieron hacia ellos. Ambos se levantan de donde están sentados.
-¿Cómo os han ido las clases chicas?-Dice Jorge con la intención de empezar una conversación.
-Bien.-Dicen ambas.
-¿Bueno Cristina, nos vamos ya?-Dijo Lucas.
-Vale.
Lucas y Cristina se despidieron de sus mejores amigos y se alejaron de ellos. Dejándolos solos.
-¿Quieres que salgamos a dar una vuelta hoy? Ya que no vamos a estar con ellos. –Dice Jorge.
-De acuerdo.
-Venga, te acompaño a tu casa.
Ellos caminaban por aquella calle de la gran vía. Elena solo tenía ojos para él y era muy raro porque ella no había pensado nunca en un chico en especial.
-A saber que harán estos dos en casa de Lucas.-Dice Jorge intentando sacar un tema de conversación.
- No creo que hagan nada. Cristina no es tan sociable.
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Juguemos a ser del mismo mundo
RomanceY todo empezó una mañana en Madrid. Cristina. Simpática, alegre, divertida, educada y sincera. Para él es mandona, grosera, salvaje, pobre y envidiosa. Lucas. Soñador, protector, sincero, optimista y cariñoso. Para ella es mujeriego, pijo, mimado, m...