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.Cuando vi la hora en mi celular, me di cuenta de que ya iba a amanecer... Y, luego del primer amanecer que había visto con Itachi en Francia, se convirtió en mi hora favorita. Ahora adoraba los amaneceres y atardeceres sin excepción.
Emocionada, se lo comenté al pelinegro.
—Amor...
—¿Sí? Dime, ¿qué sucede, preciosa?
—Ya casi va a amanecer.
—Aaah, eso...
¿Quieres que te lleve a verlo?—... No. Estamos aún en la fiesta junto a los chicos. No podemos dejarlos.
—Podemos ir, si quieres.–Sonrió.
—... No.
Además, ¿adónde iríamos?—A la terraza de este lugar.
—¿Hay una terraza con acceso público acá?
—... Este "lugar" es un establecimiento de cuatro pisos. ¿Crees que solo iba a ser ocupado para un club nocturno?
—...
—Jaja, amo cuando te doy algún dato acerca de algo, y tú pareces estar divagando en tu mente sin entender ni una mierda de lo que digo.
—¡Entiendo! Es solo que...
Creí que habían departamentos y oficinas en los pisos restantes.
¿Qué más hay allí?Suspiró y negó con la cabeza riendo.—Es un prostíbulo.
En los otros tres pisos de arriba hay habitaciones para coger, amor.—Me explicó.—... Bueno, si subimos a la terraza está bien.
Por cierto, ¿cómo sabes eso?—... Antes, acompañaba a Kisame arriba después de beber aquí. Él iba seguido con las muchachas de arriba... —Me hizo un gesto mientras miraba a Kisame de reojo.—Aunque realmente a mí no me interesaba, y solo lo hacía para acompañarlo ya que siempre nos quedábamos hasta muy tarde...
—... ¡Te estoy viendo, Itachi!—Amenacé cruzando los brazos.
Rio.—Y yo a ti, Izumi.
Por unos segundos hicimos una batalla de miradas, pero como siempre, me rendí ante sus ojos profundos.
Después, me besó, e hizo notar a los demás que nos ausentaríamos un momento.
Nadie tuvo ningún problema con dejarnos solos un rato, así que subimos hasta la terraza y... como esperaba, el amanecer se veía hermoso.—Estuve pensando en algún regalo para los pequeños.
—Que bueno.
Dime... ¿En qué pensaste?—Pregunté clavando mi mirada en el paisaje.—Pensé en que un collar sería perfecto.
—¿Un collar? ¿Y eso de qué les servirá?
—No será cualquier collar.
El que planeo darles es el del Yin-yang.—... Claro.
Eso los representa a ambos... y también representa el perfecto complemento que son juntos...—Exactamente.
—¡Es genial!
Así también podrán recordar a su familia en todo momento... como con un amuleto.—Ajá. Entonces...
¿Está bien?
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El chico del antro
De TodoDescripción: Historia inspirada en acontecimientos reales de la vida cotidiana con algo de ficción y personajes exagerados con el fin de atraer a los lectores. Contenido: 38 Capítulos + 2 Especiales Total ➡ 40 Capítulos Capítulos con extensión cort...