.
.
.Nos habíamos encerrado en casa definitivamente, y solo salíamos por alguna necesidad o compra importante... comida por ejemplo.
Para no quedarnos en desventaja respecto al estudio, Sasuke, Itachi y yo, pasábamos clases desde casa con profesores online... Al menos durante dos semanas estaríamos así, las necesarias para poder hacer un test de embarazo.
Por cierto, así sería fácil engañar a Fugaku-san... Porque en ese tiempo, podría estar embarazada de cualquiera. ¡Ay! Decir eso me hace sentir como una verdadera perra.
.
.
.—Llegó el momento... —Dije abriendo la pequeña cajita que contenía la prueba.
—Tranquila... Esa cosa se marcará con dos rayitas.—Dijo Itachi rascándose la cabeza.
—Seh. Odio admitirlo, pero Itachi es todo... menos precoz.
Con este tipo, ya has de tener sextillizos.—Dijo Sasuke burlón.—¡¿Y tú cómo sabes eso?!—Dije sonrojada.
—... ¡Ay, por favor!... Llevo varios días escuchándolos coger. Y, aunque me traumé, al menos pude calcular el tiempo en el que mi hermano se pone a gruñir como loco, para después quedarse totalmente en silencio.
—Que diablos... ¡Estás loco! ¿Por qué harías algo así?—Dije e ignoré lo que debía hacer por unos instantes.
—Para ganarle en eso también... Yo duro poco.—Admitió molesto.
—¡Vas a explicarme bien qué hiciste, niño malcriado!
Pero eso será luego... Ahora, en serio debo ir al baño.—Dije por último y me metí al baño por unos minutos.Aunque creía saber el resultado, estaba nerviosa... ¡¿Y si no lo estaba?!
¡Una cantidad masiva de gente podría morir!
Con esos pensamientos en la cabeza, decidí no mirar lo que fuese que saliera, y me dirigí hacia mi azabache fuera del baño con la prueba en mano... Tenía miedo, así que lo necesitaba a mi lado para cualquier respuesta posible.—Itachi... No quiero ver.
Dime... ¿Algo malo?—Dije entregándole el test, pero con la mirada en el suelo.—S-sí.—Se puso nervioso, pero con el sonido de su duda yo ya tenía ganas hasta de arrancarme los pelos.
—¡Dime! ¡¿Qué sucede?!
—... Tendré que comprar pañales un buen tiempo.—Dijo aún nervioso. Ante esa reacción, yo alcé la mirada hasta chocar sus ojos con los míos, y pude sentir cómo una taquicardia se estaba a punto de presentar.
—I-Itachi... —Me puso el dedo índice en los labios para callarme.
—¿Ya escogiste bien los nombres?—Dijo, y rápidamente una sonrisa se formó en su rostro.
Grité, por lo cual Sasuke y Shisui vinieron a la habitación de Itachi corriendo y, ahí yacía una pareja sollozando abrazada, apricionándose mutuamente con tanta fuerza, que hasta les costaba reír de alegría.
—No me digan... Itachi se convertirá en amo de casa, ¿cierto?—Dijo mi cuñadito con sarcasmo.
Rio.—Eso parece... y tú en niñero.—Contraatacó Shisui.—Pero, ya en serio... ¡Van a ser padres! ¡Y yo el tío millonario que malcría sobrinos!—Se abalanzó contra nosotros y nos abrazó fuertemente.—Este es el inicio de una gran familia...
Estoy orgulloso, Itachi.Rio avergonzado.—... Gracias, primo.
Aunque debo admitir que me sentiré celoso de ti por perderme los meses de crecimiento de mis pequeños y dártelos.
Pero sé que valdrá la pena y volveremos a estar juntos muy pronto.—Me besó repentinamente y rio.—S-sí... Y mientras tanto, a tu esposa no le faltará nada tampoco. Confía en mí.
Ellos estarán bien... Y ustedes van a casarse pronto..
.
.Ya iba a terminar el año... Faltaban solo dos meses para diciembre, y hasta ahora, nada había cambiado. El padre de Itachi no se hizo notar para nada... Aunque siempre estuvimos atentos.
Les habíamos avisado a nuestros amigos sobre mí embarazo... Aunque solo por mensajes. Ellos se pusieron muy felices, y nos hicieron llegar algunos regalos a nuestra puerta.
Son personas muy chidas.Mientras tanto, Shisui ya había armado toda una historia acerca de nosotros dos... Fue algo extraño, pero a Itachi no le molestó tanto... Solo estaba un poco celoso.
Y yo... Yo solo esperaba ansiosa.Yo ya llevaba 1 mes de gestación, y ya estaba lista para llevar a cabo todo ese rollo al pie de la letra.
.
.
.—¿Lista, Izu?—Dijo Shisui tomándome de la mano.
—L-Lista...
Es momento de enfrentar a los Uchiha.
—Bien.—Tomó mis maletas y las llevó hasta la puerta.
Mientras tanto, yo me había quedado a solas en la habitación junto a mi pelinegro.
—Itachi... —Me abrazó de forma violenta y escondió su rostro en mi cuello.
—Te amo... Nunca lo olvides, Izumi.
Los amo tanto.—Dijo y comenzó a sollozar.—... Cuando tengan la mansión, vete a mi recámara... Estarás más cómoda allí que en la habitación principal junto a Shisui.—Tranquilo... Mi amor, todo estará bien.
Y sí, tenía pensado utilizar tu recámara en lo que te esperaba.—Reí abrazándolo con fuerza.—Bien... Nos veremos pronto, dentro de 1 año ya seremos una familia...
—Lo sé. Te amo...
Shisui ya me espera.—Dije limpiándome los ojos.—De acuerdo... Aunque antes, quisiera darte algo... —Sacó una cajita de plata de entre sus cosas, y la abrió en frente mío.
—Esa caja... Me la ibas a dar cuando pasó el incidente de Léonard.—Recordé impactada.
—Sí... Iba a pedirte que lleves esta pulsera. Era de mi madre... ella me pidió que te la diera cuando estábamos en París.
—Lo sé... Los escuché hablando cuando te despediste de ella.—Extendí la mano para dejar que Itachi me la pusiese.
—... Sí.
No sabía cuándo sería el momento indicado... pero creo que este es perfecto.—Me puso aquella pulsera de las Uchiha y sonrió.—Prométeme que nunca te la quitarás... Que siempre que la veas me recordarás y recordarás también que te amo.
Hazlo y, solo así te dejaré ir.—Dijo tomándome de la mano.—Lo prometo... —Dije mirando la pulsera. Era muy bonita y elegante.—Sé que esta es la muestra de tu amor hacia mí... Por eso, voy a llevarla siempre y la cuidaré con mi vida.
—Gracias... —Dijo Itachi y, finalmente, todo acabó en un beso.
Ya nos habíamos tardado, así que Shisui volvió a subir por mí, y nos fuimos de la recámara de Itachi dejándolo a él solo en esta...
Sasuke nos esperaba en la puerta vigilando el taxi que nos llevaría al aeropuerto, así que me acerqué a él, le di un beso en la frente y le encargué a su hermano mayor.
Luego de eso, ya solo salí de Tokyo junto a Shisui. Él era muy cálido y comprensible, así que entendió mi repentina decaída emocional de camino.

ESTÁS LEYENDO
El chico del antro
OverigDescripción: Historia inspirada en acontecimientos reales de la vida cotidiana con algo de ficción y personajes exagerados con el fin de atraer a los lectores. Contenido: 38 Capítulos + 2 Especiales Total ➡ 40 Capítulos Capítulos con extensión cort...