Cap 9

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Los ojos grises de Cedric, ahhh, siempre me parecieron como un rio, las miles de piedrecitas de un río, brillantes y hermosas cada una por su lado, pero maravillosamente bonitas todas juntas.

No me di cuenta de que Cedric se encontraba a mi lado con cara de abatimiento.

-¿Que ocurre?- pregunte yo toda feliz.

No dijo nada, nada de nada, nada, solo me miró fijamente a los ojos, yo no aparté la mirada, sentí un suave cosquilleo en la nuca, y no pensé que era a si que me deje llevar, es bastante agradable la verdad, seguí sin apartar la mirada hasta que me VI a mí misma en una habitación junto con un Cedric que me sonreia, me tocó el cuello y fue bajando por mi pecho, dios santo parece real, o lo es, note que mi mente era un libro abierto, me sentí avergonzada, pero derepente todo se acabó, volvía a estar en la enfermería, tumbada en la camilla, con mis costillas vendadas.

Entonces caí.

-Me has leído la mente- susurre.

-No- dijo el mirando extrañado.

-He sentido un cosquilleo en la nuca y he notado como si alguien urgara en mis pensamientos, has sido tu- lo mire entre incrédula y dolida, ante su descaro.

-Oh mierda, estaba tan cansado, que he transmitido mis pensamientos a tu cabeza sin quererlo, lo siento- dijo mirándome y acariciandose el puente de la nariz.

Piensa Vicky, iba a ...

-¡Pero que cojones pasa por tu cabeza, pervertido!

-Lo mismo que tú sueñas

-Hay has estado rápido, lo respeto- dije pensativa,

-Cuando salgas de la enfermería nos divertiremos, ¿te parece?

-Eso suena a violador

-Me refería a volar en escoba o jugar a los naipes explosivos, pequeña malpensada.

-Siempre pensé que eras alguien inocente y lindo...

-¿Y?

-Sigo pensándolo- dije sonriendo.

-Te parece que alguien que sabe leer la mente es inocente.

-Bueno gracias por recordarme el temita

-Oh mierda, soy idiota

-Bueno, ¡¿me has leído la mente, pero a ti que te pasa!?

-Te lo voy a repetir, estoy muy cansado

Igual lo puedes perdonar, ....¡NO! ¡NO LO VAS A PERDONAR ASI PORQUE ASI, QUE LO DEMUESTRE EL MUY IDIOTA!

-Deja de gritar por favor, me duele la cabeza- dijo abatido.

-¿Perdona?- dije atónita.

-Que dejes de gritar- dijo con notable fastidio, realmente si tiene el rostro como si le doliera la cabeza.

-Tu, has oído que gritaba en mi cabeza, ¿porque?

-Pues yo no puedo entrar en tu cabeza y leer una serie de pensamientos concretos, solo oigo palabras por separado y yo las tengo que en lazar, y hay veces que como hoy no elijo meterme en tu cabeza, si no que la mía lo hace automáticamente- dijo Cedric.

-Lo siento mucho Ced

-¿Porque?

-Por ser tan impulsiva, es que después de todo lo ocurrido estoy a la defensiva

-Bueno eres una Gryffindor

Yo lo miré con rabia, nadie se mete con mi casa, me recoste en la cama y me tapé hasta el cuello.

-Oye, ¿qué pasa?

-Nada, buenas noches- dije fria, y me diréis, es el chico que te gusta y solo a ofendido un poco a ti casa, na más.

Pero mirar...¡ESTOY UNIDA A VOLDEMORT! ¡ESTOY DE LOS NERVIOS! ¡PUEDE MATAR A QUIEN LE SALGA DE LOS COJONES!

Los Trillizos Weasley [Cedric Diggory]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora