"El llamado del Pasado"

"Epílogo"

Como si fuera un sueño, como si regresara el tiempo como si hubiera viajado al pasado se sintió aquella platinada al ver aquel fiordo que se encontraba lleno de colores y fácilmente se podía ver un lindo arcoíris haciéndolo un paisaje hermoso, tal vez los años pasarán y las cosas cambiaran pero este fiordo quedará igual de hermoso como lo es ahora... Oh eso pensó la platinada al momento de cerrar sus ojos y comenzar a imaginarse estar en aquel balcón del castillo el que fue alguna vez su hogar cálido, en el cual fue donde creció junto con su hermana, donde vivió la mitad de su vida, donde ocurrieron cosas buenas como malas, donde pudo crear su nueva familia, donde se pudo enamorar y en donde pudo ser feliz en sus últimos días de "vida". Al seguir manteniendo sus ojos cerrados comenzó a sentir como aquellos recuerdos y momentos regresaban a la vida, ya que las voces y las risas se escuchaban como un eco, como si el lugar se hubiera encargado de guardar todos aquellos momentos los cuales vivió con los que amo y amará, en su mente comenzó a imaginarse a ella y a su hermana riendo mientras platicaban y se tomaban de sus brazos para de igual manera comer chocolate, igual se imagino como llegaban con ellas aquel rubio con un reno y el muñeco de nieve uniéndoseles, haciendo que la platinada sonriera al recordarlos, al tener unos segundos de aquella imagen en su cabeza esta desapareció para ahora estar ella junto con aquel peliblanco el cual recuerda bien cuando tuvieron una conversación acerca del pasado de ella, recordando como aquel peliblanco se vía tan bien debajo de la luz de la luna, ya que su cabello brillaba luciéndolo más lindo, el brillo de sus dientes como si fuera nieve recién caída del cielo hacia que su sonrisa brillara más que nunca y sus ojos, como si de dos diamantes zafiros hablara, podía describirlos como los más hermosos del mundo, haciendo que nuevamente sonriera mientras que su corazón se acelerara un poco al tener esa imagen en su cabeza de su peliblanco. Cada uno de esos recuerdos los llevaría para siempre en su corazón al igual que todas aquellas personas que amaba y apreciaba ya que gracias a ellos ella jamás se volvió a sentir sola, todos esos años de tristeza, inseguridad y miedo fueron borrados por ellos, por eso mismo se prometió a si misma a vivir sus días con valentía, fuerza y alegría, como lo era aquellos días con su familia y así llevarlos siempre con ellos. Al soltar un suspiro decidió abrir sus ojos, sintiendo como las risas y voces iban desapareciendo poco a poco, dejando nuevamente solo el ruido de las pequeñas olas que hacia el mar mientras nuevamente admiraba aquel fiordo, sonriendo y sintiendo cálido su corazón, aceptando ahora su nuevo comienzo. 

-Elsa!- llamó aquel muñeco de nieve mientras se acercaba a ella a toda velocidad -Elsa! vamos! vamos! ya todos están esperando- dice tomándola de la mano.

-Olaf ¿Porqué tienes tanta prisa?- dice para después soltar una pequeña risa mientras era guiada por el muñeco. 

-Porque prometí llevarte hacia la ceremonia a tiempo, no quiero romper mi promesa con los guardianes- dice algo preocupado, cuando nuevamente la platinada soltó otra risilla. 

-Olaf- lo llama viendo como este la mira -Aún estamos a buen tiempo, además aún no han llegado los demás invitados- dice mientras acomodaba el pequeño moño que tenía el muñeco en su cuello -Y no quieres que todos vean a la novia antes de tiempo ¿verdad?- pregunta viendo como él negaba varias veces -Bien entonces ¿me ayudarías a ponerme la corona de flores?- pregunta mientras la toma con cuidado y se la entrega, Olaf feliz la tomo igual con cuidado viendo como Elsa inclinaba su cabeza, con cuidado la acomodo correctamente asegurándose de que no se viera chueca.

-Listo- dice emocionado al ver como la platinada tocaba con cuidado la corona asegurándose de que estuviera bien puesta, al hacerlo le sonrió.

-¿Y que tal?- dice mientras se colocaba correctamente de pie tomando con delicadeza la capa que salía de aquel vestido blanco y daba un par de vueltas. 

-Woow Elsa, te vez hermosísima!- dice feliz Olaf mientras daba unos pequeños saltos de emoción -Anna se hubiera puesto igual de feliz verte vestida de novia- dice casi inconscientemente cuando al darse cuenta de sus palabras, aquella emoción se fue por un momento al recordar a su familia, Elsa se percató de eso así que se acerco al muñeco para abrazarlo.