James
Después de que Sky me envió los mensajes no puedo dormir.
La veo a lo lejos recostada en la cama junto a Jess.
No puedo entender la atracción tan fuerte que siento por Sky, incluso me siento un poco asustado de lo que ella me hace sentir. Me encantaría estar en esa cama junto a ella abrazándola y oliendo su perfume combinado con el aroma de su cabello. Incluso puedo recordar vívidamente la suave textura de su piel al ser recorrida suavemente con mis dedos.
Después de dar muchas vueltas en el sofá y escuchar a Andrew roncar por fin me quedé dormido.
Abrí los ojos muy temprano, unos minutos más tarde Andrew se levantó y fue directo a la ducha.
Cuando logré despertar a Jess fue a ducharse y yo me quedé atendiendo asuntos en el teléfono. Me di cuenta que salió del baño pero no le presté atención hasta que ella ya casi estaba arreglada. Entonces me puse de pie y jalé mis calcetines de zorro, cuando comencé a ponerlos me di cuenta que Jess se quedó parada muy seria observándome.
-qué sucede?
-tus calcetines, son muy lindos.
Sonreí y no dije más. Vi que se quedó mirándolos pero no supe qué llamó tanto su atención.
Alcanzamos a Andrew y a Sky para almorzar y Jess comenzó a hablar sin parar, todo surgió cuando mi pulsera se enredó con su cabello y le prestó atención.
Llevó la plática a tratar de incluir a Andrew y a Sky de una forma tan característica de ella.
Empezó contando sobre su enorme cantidad de joyas y lo mucho que quería conseguir una pulsera idéntica para ella.
A continuación Andrew agregó que a él le encantaba usar pulseras de todo tipo, Sky permanecía hablando solo lo necesario.
Jess la interrogó sobre sus gustos en Joyería y al saber que Sky disfrutaba de las cosas pequeñas y discretas para el diario, trató de dar a entender que seguramente eran demasiado costosas y que Sky al ser tan joven no podía costearse algo así.
Andrew la miró molesto y se quedó en silencio, Sky comenzó a reír sin mostrarse ni un poco molesta, había pasado más de una media hora en la que siguió hablando de joyas.
Hubo un punto en el que ya nos tenía hartos de escucharla y ahora si era evidente la incomodidad de los tres que la acompañabamos. Hizo un comentario que me permitió hacerla enojar y que guardara silencio para poder hablar de cualquier otra cosa.
Jess: ahora que lo recuerdo... A ti nunca te ha gustado usar ni pulseras, ni collares. Incluso usar reloj te incomodaba.
-así es, pero este fue mi regalo de cumpleaños y me encanta, es muy cómoda, ligera y elegante.
Jess: ah si? Pues esa persona por lo visto no te conoce bien. Tu detestas usar accesorios.
-lo hacia, hasta que esta pulsera llegó a mi.
Jess: y se puede saber quien fue la persona que te la regalo? Entonces no buscaré una igual, te daré otra que sea a juego con una para mi. Así será más especial.
-me lo regaló la hija y próxima heredera de las joyerías Blackwood.
Aquella pelirroja lucía ya molesta y siguió interrogandome. Sky se agachó y se sonrió disimuladamente. Andrew estaba atento a la pelea que se avecinaba entre Jess y yo deduciendo las cosas.
Jess: entonces tú y ella son buenos amigos? Me intriga saber cómo es. Seguramente ya es vieja y solterona, por eso anda dando obsequios de este tipo. Ahora sé que debo cuidarme de ella. Tú, querido James, eres mío. Hazle saber eso.
Sky comenzó a reír y yo también. Andrew nos miró sorprendido dándose cuenta que de quien yo hablaba era de Sky y Jess ignoraba todo.
-tú eres más vieja que ella y te seguro que no es así, ella y yo tenemos una gran amistad. No tiene interés en mi. De hecho ella tiene novio y... Jess, no soy tuyo, ni tu eres mía.
Jess: entonces deberías presentarme a tu gran amiga, quizá aún no tengamos algún compromiso pero en eso estamos. Verdad que tú lo entiendes, Sky? Por que estos dos caballeros estoy segura que no.
Sky: yo... Pienso que lo mejor que puedes tener en una relación es confianza y seguridad, no pedir que te den tu lugar o que te respeten. Ellos deben ser consientes de lo valiosa que eres al igual que nosotras debemos tenerlo presente. Aplica lo mismo para ellos. todo debe ser mutuo.
-Acabas de escuchar un sabio consejo de la vieja, solterona y querida amiga mía Sky Blackwood.
Jess: tú eres de la familia Blackwood? Perdona, yo solo estaba jugando al decir todo eso....
Sky: no hay problema, yo sé que no era tu intención. No te preocupes.
Sky estaba muy divertida riendo al ver la expresión tan apenada de Jess y su cara enrojecer. Andrew sonrió y tomó la mano de Sky mostrándole su apoyo. Yo reía sin ninguna restricción.
A partir de ahí cambió el tema de conversación y decidimos ir a explorar los alrededores.
Llegamos a un área donde había una tirolesa enorme. Quisimos intentarlo, al subir nos entregaron un arnés y equipo de seguridad para lanzarnos de un extremo al otro. Me demoré ayudando a Jess a colocarse su equipo de protección y vi que Andrew se colocó el suyo e intentó ayudar a Sky.
Cuando ellos tres ya estaban listos yo aun no terminaba de alistarme. Escuché que Sky dijo que le quedaba grande y el encargado pidió que fueran a buscar el arnés más pequeño que había, ya habíamos esperado algunos minutos y sugirió que comenzara alguno a lanzarse, Andrew eligió ir primero y así lo hizo, yo me quedé ayudando a Sky para ajustar lo mejor posible a su cuerpo el arnés, Jess siguió con su turno mientras el encargado nos explicaba que no había más que ajustar al arnés.
Sky un poco desanimada dijo que no había problema, que por seguridad no se lanzaría y nos alcanzaría del otro lado, entonces tuve una mejor idea.
-ve tu, Jay. Yo bajaré y los alcanzo del otro lado. Es imposible ajustar más la cintura de esto y queda muy suelta.
Encargado: si, por normas de seguridad es mejor que no se lance ya que será difícil para ella sostenerse todo el trayecto.
-puedo engancharla a mi? De esa forma yo voy con ella y la abrazo, tengo la suficiente fuerza para no soltarla y llegar a salvo al otro lado.
Encargado: si, supongo que no hay ningún problema. Cuánto pesas? Su peso juntos no debe exceder los 120 kilos, esto aguanta hasta 300 kilos pero preferimos no exceder ese peso por seguridad.
Sky: peso 46 kilos.
El hombre hizo los cálculos y se dió cuenta que estábamos aún por debajo de los 120 y nos proporcionó un par de argollas que sujetaría de mi pecho a su espalda de ella. Nos dió indicaciones y dijo que al llegar del otro lado el único que frenaría el desplazamiento sería yo.
Tenía que ir con las piernas flexionadas e ir bajandolas cuando llegara a la estructura siguiente. Sky debía mantenerse flexionada sobre mi cuerpo, prácticamente sentada sobre mi pelvis y sus piernas sobre las mías.
Practicamos un par de veces antes de lanzarnos. Cuando lo logramos a la perfección comenzamos a acercarnos a la orilla.
Sky se dejó abrazar por mi, pasé mis manos sobre su estómago y la levanté sosteniendo su cuerpo con mucha seguridad, pegué mi pecho a su espalda y le pregunté si estaba lista.
Ella respondió que si y me dejé ir.
Durante el trayecto la sentí feliz, divertida y segura. Extendió sus brazos disfrutando de la adrenalina del momento y cuando tomó más fuerza el trayecto ambos comenzamos a gritar de emoción. Casi al llegar al final ya nos esperaba otro encargado para ayudarnos a quitarnos el equipo.
Sky me decía que había sido increíble y que estaba feliz de haberse lanzado. Los dos reíamos muy contentos y yo estaba más que feliz de haber compartido la experiencia con ella.
Incluso antes de frenar pude ver las caras de nuestros acompañantes muy serios y molestos. Andrew lo disimuló mejor que Jess, quien se notaba a punto de estallar.
Solté a Sky depositandola de pie en el piso, quise retirar la argolla pero se atascó y tuve que esperar a que el encargado nos ayudara.
Aquel inocente hombre y ajeno a todo lo que sucedía bromeó sobre quedarnos así enganchados. Para ese momento Sky ya había visto lo enfadado que estaba Andrew y solo se rió por compromiso.
Una vez que nos liberaron bajamos de aquel lugar y comenzamos a adentrarnos en el bosque para explorar.
Intenté hacer plática para suavizar las cosas y la única que me seguía era Sky, los otros dos se mantenían muy callados.
El camino era obviamente un martirio para Jess ya que no dejaba de quejarse, se tropezaba cada 4 pasos que daba, mientras que Andrew caminaba tomando la mano de Sky y él no le permitía avanzar mucho a ella ya que iba con cautela. Quería que vieran la hermosa vista desde un punto más alto y cerca de una cascada. Después de un rato Sky se soltó de Andrew y prácticamente ella y yo íbamos varios metros adelante de él y Jess.
Nosotros íbamos riendo y bromeando. Me encantaba compartir esto con ella, amaba que se veía feliz y sorprendida por cada pequeña cosa. Sky no se quejó ni una vez en el trayecto de subida, su condición era muy buena.
Al llegar al punto donde yo quería llevarlos me detuve a sentarme sobre una gran roca, Sky quiso subirse y la ayudé a hacerlo. La tomé de la cintura y la levanté para colocarla sobre la roca, al ser pequeña y muy delgada fue muy fácil hacerlo.
Ella estaba tomando fotos de su alrededor cuando Jess llegó a pararse muy enfadada a mi lado y me pidió que la ayudara a subir.
No me quedó otra que cargarla como lo hice con Sky. Jess era más alta y pesaba más que Sky así que fue un poco incómodo lograrlo.
Andrew se quedó mirando a Sky y sacó su teléfono para fotografiarla mientras ella estaba distraída. También aprovechó para tomar un par de fotos de Jess y me las mostró.
Ellas estaban ahí de pie, de pronto yo abrí mi bote para beber agua, Jess quiso tomarse un par de selfies sin fijarse que estaba muy cerca de la parte redondeada de la roca, si ella se caía iría directo hacia una zona de piedras puntiagudas y se haría mucho daño en el mejor de los casos.
Andrew y yo lo vimos al mismo tiempo pero ambos estábamos lejos de ella, Sky reaccionó muy rápido y la tomó del brazo y torso lo mejor que pudo para evitar que Jess se cayera.
Sky también se cayó fuertemente sobre la roca y su tobillo fue a meterse en un hueco, se escuchó un crujido al mismo tiempo que se escuchó el golpe de sus cuerpos al caer, Jess gritó y quedó colgada a la orilla sosteniéndose de Sky y jalandola tratando de subir.
Al instante Andrew y yo subimos y la ayudamos a regresar para que se soltara de Sky quien estaba tendida y soltó un grito de dolor.
Una vez que Jess estuvo a salvo nos acercamos a ver a Sky. Ella estaba escondiendo su rostro entre su brazo flexionado para tapar su expresión de dolor.
Con mucho cuidado me agaché para ver donde había quedado su pie y vi que no estaba fracturado pero sus Jeans se habían roto y su bota había salido de su pie. Andrew le preguntó si estaba bien y ella solo asintió y una vez que pasó el dolor se levantó lentamente.
Jess estaba derramando lágrimas por el tremendo susto que se había llevado. Su labio y frente estaban sangrando pero estaba bien. Quien nos preocupaba era Sky ya que se había golpeado muy fuerte y su pie había emitido un sonido con el cual yo apostaba que se había fracturado.
Una vez que se sentó sus ojos estaban enrojecidos pero resistió mucho para no llorar.
-Sky, tu pie. Está roto o dislocado?
-no, estoy bien. Se torció pero estoy bien. Solo fue el dolor. Tranquilos.
Andrew: de verdad? Di si te sientes mal o estás herida, bonita.
-estoy bien, en verdad. Estás bien, Jess?
Jess: si, estoy bien. Gracias, salvaste mi vida.
-no te preocupes, tú lo habrías hecho por mi.
-Debes fijarte donde te paras, debes tener cuidado. Esto no es un juego, pusiste en peligro tu vida y la de Sky.
Jess: lo siento, no me fijé.
Sky: James, tranquilo. Fue un accidente. Tranquila, Jess. Lo importante es que estás bien y no pasó algo más grave.
Yo estaba más que enojado con la estúpida distracción de Jess, estaba enojado de que no fue solo ella quien resultó herida, si no que también Sky había sufrido las consecuencias sin ser culpable.
Se acercaron a la orilla y Andrew se acercó a intentar cargar a Sky, fue donde escuché que Sky le pidió que no lo hiciera, que no quería que lastimara su espalda.
Bajé a Jess y cuando ayudé a Sky vi que su bota se había roto también, su pierna sangraba un poco a través de su pantalón roto y no pudo apoyar bien su pie.
Saqué el botiquín de mi mochila y limpié las heridas de la pelirroja hermosa.
Le extendí el botiquín a Andrew para que ayudara a Sky.
Estuvimos ahí aproximadamente una hora y al intentar regresar al hotel ví que a Sky le sería complicado caminar.
Andrew se tocaba su espalda como conteniendo dolor, intentó ser el soporte de Sky pero se veía más adolorido que ella.
Al notar que nos sería casi el doble o triple de tiempo el bajar, volteé a ver a Andrew.
-Sky no va a soportar bajar todo esto con esa pierna lastimada. Y por lo que veo tu espalda te está doliendo. Si están de acuerdo yo puedo cargarte, será más rápido y menos complicado.
Jess no estaba en condiciones de reclamar nada ya que había sido culpa suya lo sucedido.
Sky intentó negarse pero Andrew respondió que si, que era lo mejor.
Mi pequeña y hermosa amiga estaba muy apenada cuando me acerqué para subirla a mi espalda, se abrazó con changuito a mi cuerpo y así comencé a caminar. Nuevamente y aun cargandola yo iba hasta adelante y Andrew y Jess venían muy atrás.
Aproximadamente 10 minutos después Sky pidió que solo la ayudara a caminar como apoyo, que ya no la cargara por que era mucho peso y esfuerzo para mi.
Después de que insistió mucho acepté y me fui a la par de ella abrazando su cintura y con su brazo sobre mi hombro.
Lo que eran 15 o 20 minutos de camino restante se convirtieron en 50.
Al llegar al hotel nos quedamos en la recepción, Sky estaba siendo atendida por un médico mientras nosotros esperábamos ahí.
Decidí ir a buscar un baño, me aparté un momento y me di cuenta que mi teléfono lo había dejado ahí, al regresar escuché la conversación entre Andrew y Jess, ellos no se percataron de que yo estaba cerca.
-estás bien, Jess? Luces triste y enojada.
-pensé que lo podía ocultar, pero ya veo que no.
-puedo saber qué te sucede?
-por favor, no me digas que no te das cuenta de lo que sucede. Tú y yo sobramos aquí. Estamos de adorno.
-no pierdas la calma.
-cómo no voy a perderla? Hay algo entre ellos o por lo menos desean que haya algo. James es como un cachorro atrás de ella. Estoy harta de la forma en que la ve, en que le habla, en que la cuida. Acaso a ti no te molesta?
-lo he notado, he visto como se miran, como se llevan. He visto la química que hay entre ellos, pero si no están juntos es por algo.
Si Sky me corresponde y me da la oportunidad de estar cerca de ella no la voy a desaprovechar. Ellos estaban juntos cuando la conocí y aún así aceptó salir conmigo, yo le pregunté si había algo entre ellos y me dió a entender que no era así.
-lo sé, sé que también él decidió intentarlo conmigo aún estando ella en su vida, sin embargo no entiendo como es qué con ella es así de atento, cariñoso, tierno y protector.
No sabes cuanto desearía ser ella en su vida. No estoy diciendo que la deteste o me caiga mal, me molesta que James es tan imbecil, frío y distante cuando se trata de mi.
-yo veo que él se esfuerza mucho contigo, no deberías ser tan dura con él. Quizá es su forma de querer. No deberías compararte con Sky ni con nadie más. No lo hagas, eres hermosa Jess y estoy seguro que tienes un lugar importante en su vida por eso él está intentandolo contigo. Se nota que en general es bastante reservado, serio y distante.
-él siempre ha sido así, pero con ella no. Y yo no puedo evitar pensar en que ellos viven juntos, acaso no te molesta eso?
-solo me inquieta un poco, pero confío en Sky. Además cuando estamos a solas ella es tan tierna, cariñosa, incluso un poco empalagosa y adorable conmigo, se preocupa por darme mi lugar en su vida. Yo voy a poner todo mi esfuerzo en que las cosas funcionen entre nosotros, ayer hablamos y me dejó en claro que le gusto mucho y que me ha tomado mucho cariño. Estoy muy feliz por eso.
Decidí acercarme a ellos, guardaron silencio y unos segundos después Sky venía caminando hacia nosotros.
Jess sería la siguiente en entrar a que el médico la revisara así que me tendría que quedar ahí.
Andrew: qué dijo el médico? Estás bien?
-si, todo bien. Solo fueron raspones y una torcedura.
Sonreí para ella, era lo único que podía hacer ya que a Andrew era a quien le correspondía reconfortarla.
Mi pequeña amiga de ojos hermosos pidió subir a la habitación para darse un baño y cambiarse de ropa, se fue con su novio y yo permanecí esperando.
10 minutos después aparecio Jess.
-qué te dijo el médico?
-estaré bien, fue algo leve.
-luces enojada. Qué sucede?
-podemos caminar un rato y charlar?
-si, vamos.
Caminé cerca de ella hasta salir a la naturaleza. Me detuve cuando ella lo hizo esperando que comenzara.
-bien, ahora dime.
Me miró con mucho enojo en sus ojos y se mostró muy alterada.
-estoy esperando, Jess. Solo dilo.
-estoy harta de lo que sea que hay entre tú y tu querida amiga. Me siento tan estúpida, siento que sobro aquí.
Respiré tratando de no enfadarme ni de hablarle mal. Ya estaba siendo un mal día para ella y en en fondo le tenía cariño.
-te puedo asegurar que con ella solo hay una buena amistad, no hay nada más. No sobras aquí, Jess. Tu fuiste la de la idea de hacer algo en parejas, yo no te obligué a esto, sin embargo yo estoy contigo, aquí. Estoy esforzándome todo lo que puedo por hacer que las cosas entre tu y yo funcionen.
Te pido una sincera disculpa si es que te he hecho sentir de esa forma. No era mi intención, te doy mi palabra.
Ella se soltó a llorar enfrente de mi y no sabía que hacer ni que más decir.
Me acerqué con cuidado y la abracé fuerte contra mi pecho y acaricié su cabeza con delicadeza.
Al principio se resistió y dejó sus brazos cruzados sobre su pecho y cubriendo su rostro, no la solté. Permanecí esperando a que se calmara para poder seguir hablando.
Un par de minutos después se movió para abrazarme y volvió a hablar.
-esto es lo que quiero, esto es lo que necesito de ti.
-perdón, sé que no soy la persona más expresiva o cariñosa pero eso no significa que yo no te tenga cariño.
-lo sé, sé que tu eres así. Pero me molesta mucho lo atento que eres con ella, la forma en que la miras, en que le hablas. La forma en la que Andrew y yo salimos sobrando.
-qué propones para solucionarlo? Vamos a llegar a un acuerdo. Lo único que no está en discusión es que pidas que dejemos de compartir departamento. Todo lo demás lo podemos negociar.
-ahora lo haces ver como si el problema fuera ella. Ella no lo es. Me cae muy bien, es una gran persona. El maldito problema eres tú!
Para ese momento yo ya estaba muy enfadado y me alejé un par de pasos. Crucé los brazos y trataba de contenerme para no decirle en ese momento que terminábamos lo que sea que tuviéramos.
-qué quieres? Quieres que deje de verla? De hablarle? Cómo pretendes que lo solucione?
-si y no. Es la forma en que la miras, en que le hablas. La forma en la que te ríes de todo con ella, la forma en la que no tienes problema de abrazarla o cargarla a la menor oportunidad.
Eres como un cachorro detrás de su madre.
-Jess, cálmate.
-no me voy a calmar! Estoy harta de sentirme así contigo. Yo solo soy sexo para ti. Eso y nada más, solo vienes a mi cuando yo te busco, y en cuanto acabamos te largas y te olvidas de mi.
Jess comenzó a gritar y a hacer un berrinche como los recordaba. No era sólo conmigo, con cualquier cosa que no saliera a su favor ella lo desahogaba de esa forma.
Sabía que no estaba equivocada pero yo tampoco merecía la escena que ella estaba armando frente a mí y personas a lo lejos que nos observaban.
- ya basta! Es suficiente. No tienes 5 años para portarte como lo estás haciendo. Y yo no tengo la paciencia de un padre para aguantarlo.
Si, sé que he cometido error tras error contigo, pero te juro que estoy dando mi mayor esfuerzo. Si no estás conforme entonces perdón, no quiero hacerte más daño. Aquí termina todo.
Y discúlpame por haberte ilusionado y ser una perdida de tiempo para ti.
-no James, no...
-Jess, yo sé que te di mi palabra hace un tiempo. Me gustabas mucho, Jess. Pero fue hace 5 años atrás. Todo en mi vida ha cambiado, antes tú y yo convivíamos mucho, nos llevábamos bien y yo fui claro contigo. Me gustabas pero no quería nada serio. Eso no ha cambiado, sigo amando mi libertad, sigo feliz estando solo.
-entonces por qué estás conmigo?
-Jess, quiero que entiendas esto. Si algo se da entre nosotros no va a ser de un día a otro, va a ser progresivo, va a tomar tiempo y mucho esfuerzo. También paciencia.
-cuál es la razón por la que no estás con ella?
Sus ojos seguían llenos de lágrimas mientras me cuestionaba.
-Es mi amiga. Le tengo demasiado cariño. Además es muy joven. Simplemente no puede ser. Yo no tengo interés de ese tipo en ella y ella no me ve de esa forma.
-James, ella te encanta. Lo disimulas muy bien la mayoría del tiempo pero cuando la miras tu rostro se ilumina con una sonrisa. Eso no lo puedes negar. Por favor, hasta tienen calcetines iguales. Estúpidos zorros.
-no voy a discutir más. Pensaba que llegáramos a un acuerdo pero está bien. Iré a abrazar y a besar a mi amiga Sky aún cuando ella tiene novio a quien se nota que quiere demasiado y con quien se la está pasando increíble. Iré a arruinar lo que ellos tienen por los berrinches de la niña de 5 años con quien vengo.
Me di la vuelta y comencé a caminar hacia el gran llano frente al hotel, Jess venía siguiéndome hasta que de pronto comenzó a llorar y se dejó caer en el pasto.
Me detuve y miré hacia ella, la vi deshecha y no pude más.
Me senté a su lado y la jalé un poco para abrazarla mientras se desahogaba.
Saqué un par de pañuelos desechables de mi bolsillo y de los dí para que limpiara su rostro.
Los tomó y se acomodó recargándose en mi.
-Jess, necesito que respires profundo. Por favor, intenta calmarte. Quiero que me escuches.
Asintió y secó su rostro. Ya se veía más tranquila y a la vez muy cansada.
Me moví y le pedí que me mirara a los ojos. Tardé un poco en convencerla pero lo logré.
-Jess, eres hermosa. Nadie merece tus lágrimas ni ver la forma en la que te deshaces, en especial yo. Eres una persona increíble, eres exitosa, muy inteligente. Cualquier persona que esté a tu lado va a ser muy afortunada. Perdón por llevarte a este punto de exasperación.
-en verdad piensas eso?
-así es. Yo no tengo mucho que ofrecerte, lamento que sea así y te prometo que si me das la oportunidad trataré de compensarte y ser más atento.
Jess asintió y se abrazó a mi. Me quedé sentado un largo rato ahí con ella platicando.
Por fin después de mucho tiempo logramos entablar comunicación como antes.
Continuará...